El Chico de Tres8Uno | Emiliaco

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Joaquín

Al fin permitieron que entraramos a ver a Emilio, quien estaba dormido.

Gabo estaba en el sillón de la habitación, sentado, viendo 31 Minutos en mi teléfono, programa el cual Emilio le enseñó su existencia. (qlo si no han visto esa joya de programa😔👊🏻) Mi Suegrita estaba viendo el programa con él. Yo estaba caminado de lado a lado, con Adri en brazos, amamantandola.

Minutos después Emilio comenzó a hacer ruidos y volteamos a verlo.

Abrió poco a poco sus ojos, trató de sentarse y me acerque a él rápidamente.

— No te esfuerces. — Cargue a Adri con una mano y sostuve la de Emilio con la otra

— Amor? — murmuró

— Hola — Sonreí

— Que bonita escena — me reí, seguía amamantando a Adri, a él le encantaba ver eso

— Como te sientes, cachorro? — Mi Suegrita se acercó con Gabo en brazos

— Papá!

— Hola, chaparro — Gabo empezó a patalear y mi suegra lo soltó, dejando que se acercara a Emilio, abrazando el brazo de Emilio que no estaba enyesado, con su propio bracito, el que tampoco estaba enyesado — Me duele todo, ma'

Ella se rio — Era obvio, tarado. Aparte de eso...

— Aparte de eso estoy bien...

— Nos diste un sustote, amor... — mi voz salió un poco ahogada y Gabo asintió

— Fue algo que... Según dicen los doctores, no tiene explicación — explicó mi suegra

— Pero si tiene — dijo Emilio y mi Suegrita y yo volteamos a vernos

— ¿P-Por qué lo dices, cielo? — El doctor entró

— Disculpen, los niños no pueden quedarse más tiempo, son muy pequeños y si hay algún virus en el aire pueden enfermar gravemente.

Asentí — Claro, un segundo — el doctor salió

Adriana rechazó mi pezon justo en ese momento y la separé, baje mi camisa y le saqué el aire.

— Me voy con los niños, llamo a Eli y a Romi y regreso — Dijo mi Suegrita

— Si, muchas gracias — Sonreí — Despidanse de papá — les dije a mis hijos

— Ayos, papá Imi — Mi novio sonrió, hace mucho que Gabo no le decía "Imi"

— Adiós, mi amor — Emilio le acarició la cabeza

— Ata! — le gritó Adriana moviendo su manita

— Adiós, princesa — le lanzó un beso

Mi suegra cargo a Adriana y bajó a Gabriel de la camilla y tomó su manita — Vuelvo más tarde — Aviso

— Con cuidado — dijimos al unísono y ella rodó los ojos con una sonrisa y salió de la habitación

— ¿Tu como te sientes, mi vida? — me preguntó

— Yo estoy bien, un poco adolorido del cuerpo, pero bien. No sabes la felicidad que siento al saber que... Que estoy aquí y no haciendo tramites de funeral — se rio — ¡Es en serio, tonto! — me contagió su risa

— Mi amor... — susurro — Tu me trajiste de vuelta — Frunci el ceño

— ¿C-Como?

Suspiró — Cuando chocamos, lo último que escuché fue el llanto de los niños y que Gabo gritaba "Papis, despierten". Me dije a mi mismo que no podía ser que tu también murieras, porque estaba seguro que por la velocidad a la que chocamos yo no sobreviviria