Lo que nunca dije.

Nuestra Historia. La relación

 Segunda parte. La relación.

Nuestra relación es algo que no puedo explicar. Es algo que se sentía tan bien. Que aún en la distancia emocionaba mi corazón. Algo que me hacía derretir hasta morir.

Primer mes:

Todo era tan bello. Eran nuestra videollamadas diarias. Y ni hablar de la video llamadas calientes. Creo que nunca había llegado a un orgasmo de tal manera. Sin ni siquiera tocarnos nos hacíamos de todo. Verte bailar de la manera en la que lo hacías, verte mover de esa forma me hacía ir al infierno y al cielo más de tres veces seguidas. Y por esto quiero decir llegar al orgasmo.

Fue un buen momento de nuestra vida, de nuestra relación. Fue un momento perfecto, nos conocíamos más, pasábamos mucho tiempo juntas, todo giraba en torno a ella.
Y realmente me sentía enamorada, enamorada hasta los huesos, hasta las lagrimas por tanta distancia, hasta la impotencia por no poder hacer nada para tocarla por primera vez.

Como tuvo sus momentos de felicidad a morir. Tuvo unos muy tristes, de mucho llorar por la jodida distancia. LA MITAD DE UN CONTINENTE NOS SEPARABAN. MAS DE 5 FRONTERAS. MAS DE 15 Hrs EN UN AVIÓN. Todo era dificil.

Trataré de resumir el segundo, tercer y cuarto mes. Porque todo fue muy igual.
Tanto amor, que los ojos te brillaban, tanta felicidad que aún estando tan lejos se notaba.
Y aunque esos meses fueron bastante comunes, hay algo bueno/malo, el hablar de una heterosexualidad fingida, una heterosexualidad por compromiso. Yo lo entendía, salir de closet contigo mismo es difícil, y salir con tu padre peor. Era un proceso el cual no la iba a obligar a salir por mi, porque yo misma se lo difícil que es.
Meses de adaptación, de distancia, de llorar, de felicidad. Buenos meses, pero en lo bueno, siempre hay algo malo.

QUINTO MES: Agosto.
Había olvidado mencionar que yo no estudiaba durante los primeros meses, pero este fue crucial debido a que continué con mis estudios, regreso un viejo amor y nuestra vida cambio.
Debido a que no estudiaba no me rodeaba de muchos amigos y ella cambiaba sus planes por mi. Comencé a salir a fiestas y conocer a gente nueva y fue allí cuando ella (M le llamaremos) volvió a mi vida.
La inseguridad en ella aumentó debido a mis salidas tan regulares. Debido a que le conté de M, lo que fuimos y lo importante que fue en mi vida. Nunca la culpe por sentirse así, yo la entendía. Tanta distancia era enfermiza, saber que M volvió, yo complicada con mis estudios. No tenía demasiado tiempo para nuestra relación, pero aún así no dude nunca en lo mucho que la quería, en lo que quería junto a ella.
Logramos arreglar y las cosas mejoraron. Cada llamada, cada te amo, cada que beso, cada "cogida" se sentía tan real. Todo era tan bello.
P (nuestra novia) sufría crisis de ansiedad y una depresión bastante severa. Entenderán que el saber que no podía estar para ella todo el tiempo (como antes) me dolía. Hacia partir mi corazón en mil pedazos. Pero, desde la distancia hacia lo que podía. Y lo que podía era bueno para ella. Y aún así, me sentía le peor persona del mundo.