P.

13 1 0
                                    


 P.

Voy a tratar de describirla, porque es imposible describir a la mujer que desde mis ojos era perfecta. Que desde mi perspectiva fue la mujer mas maravillosa de todo el mundo.

P, una mujer de 21 años. Cristiana. Heterosexual. Religiosa. Tan perdida el mundo perfecto que ella mismo creo.
Cuando ella era pequeña perdió a su madre por una enfermedad pésima que se le arrebató. Mujer que desde lo poco que supe, fue una madre espectacular, tan linda como cualquier otra madre desde los ojos de una hija.
Ella sufría de ataques de ansiedad, depresión, problemas en casa, dolor y soledad, mucha soledad.
Una mujer tan sola, que cualquier amor era suficiente para sentirse "bien", pero nunca completa, nunca enamorada del todo, nunca con el sentimiento que vivimos entre ella y yo.
Cuando P, tenía ataques ansiedad o pánico, acudía a mi.
Era tan guapa, tenía una piel tan blanca como la nieve. Y, aunque nunca pude tocarla, estoy segura que era mas suave que la misma seda. Estoy segura que su piel era tan cálida que podía curar cualquier herida de tanto amor.
Ella es tan linda, como la flor de el mismo edén. Tenía un toque de ternura, de sensualidad que si ustedes pudieran verla, se enamoraría de instante. Quedarían tan enamorados, tan locos, tan completamente fascinados, que no me culparían por amarla tanto.
Trataría de explicar cada rincón que conocí de su piel, cada centímetro, cada célula que me dejó completamente perdida en su ser y sin haberla tocado aún.
Sus labios tan rosas, tan carnosos, tan suaves. Que estoy segura que cuando alguien los toca va al infierno y regresa para subir al cielo en menos de un momento.
Sus manos, tan largas, tan flacas. Que al verlas desearía tenerlas sobre mi o dentro.

En toda mi vida, jamas había conocido una persona tan buena, tan linda, tan excitante a la vista. No solo quiero elogiar su cuerpo y la cara que tiene. Es la mujer mas buena que he conocido, es hermosa desde el alma hasta el exterior. No hay nada que ella no tenga, que ella no me haya hecho sentir, no hay cosa que ella no haya provocado en mi.

P, era tan buena que todos supimos como herirla. Era tan buena que necesite lastimarla para darme cuenta de lo buena que era. Fue tan linda con todos, que nadie sabe que hacer con tanta bondad, ni yo.

Lo que nunca dije.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora