JeongJin ˚ ༘ : ❝ Fantasy ❞

Second "Innie is not a kid"

JeongIn era totalmente consciente de que los ruidos en la sala de estar no eran precisamente por un masaje, sabía que HyunJin había estado haciendo "Cosas malas", ¡Carajo, no tenía cinco años, técnicamente ya era un hombre!

- ¿Que pasa con esa cara larga, estás bien? - Cuestionó el pecoso a su lado, sus puños estaban tensos y su celo fruncido, eso no era para nada habitual en el.

- Felix, ¿Cómo hago para que me note? - Dijo el menor mirándolo con confusión.

- Y-Yo, ¿Hablas de HyunJin? Realmente no tengo idea... No conozco de relaciones y e-esas cosas. - Su respuesta nerviosa solo hizo que Yang pudiera sus manos en los costados de su cabeza y comenzara a filosofar para si mismo.

¿Debería decirle que lo vió anoche tocándose diciendo su nombre una, y otra vez? La imagen de su Hyung tocándose con sus ojos acuosos, sus piernas arqueadas y su pecho subiendo u bajando gracias a su agitada respirar.

- Buenos días. - Saludó el de cabellos  rubios llegando a la llanta baja, sus ojos estaban algo inchados, ¿Habrá dormido anoche? A lo que el maknae del grupo vió, realmente no durmió mucho.

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- M-Mierda, así Innie... M-Mgh~ - Los chicos habían salido a hacer algunos mandados, lo cual el mayor aprovecho para autocomplacerse pensando en el menor.

Lo que no sabía, era que Yang no había salido por simple pereza. Y nadie lo obligo a salir aquel día.

- Así que... ¿Cuando te masturbas llamas a mi nombre? - Dice el maknae en la puerta de la habitación, Hwang de sobresalta y da un brinco, cubriendo su desnudez con las sábanas, sus piernas tiemblan y su corazón se acelera.

- JeongIn, p-puedo explicarlo... - Suplica el rubio con vergüenza en su mirada, sus mejillas parecen ser dos tomates y sus manos ocultan su expresión.

- ¿Qué tienes que explicar? Llevo más tiempo aquí de lo que te imaginas, ¿Acaso no te he visto metiendote tus dedos mientras gritas desesperado que me necesitas, ¿Eh? ¿Acaso quieres que te toque? - Sonríe acercándose al de ojos felinos, quien intenta esconderse en la sábana. - ¿Por qué de repente sentir pena? No me digas que ya olvidaste como llorabas de placer pidiendo que te toque.

- N-No es cierto... - Miente.

- ¿Vas a negarme lo que he estado viendo durante tanto tiempo? ¿Acaso crees que soy un idiota, o un mentiroso? - Hwang simplemente no puede responder,  pero ni siquiera tiene la opción de procesar cuando la gran mano de JeongIn comenzó a acariciar su miembro.

- ¿Q-Qué? Mmh... - No puede evitar jadear, sus piernas se tensan mientras muerde su labio, el suave movimiento de arriba a abajo en su virilidad hace que cierre sus ojos, concentrándose en la sensación.

- ¿Te gusta? - No hay sonido alguno, solo expresiones por parte del rubio. - Se qué te encanta... Y eso que apenas vamos iniciando.