Los rayos del sol se filtraron por las hojas de los árboles, el lugar seguía estando tan silencioso como si la explosión de energía de hace unas horas nunca hubiera ocurrido. Tres agraciados jóvenes hombres se mantenían en silencio, con rostros inexpresivos cada uno perdido en sus pensamientos.
Después de la sorpresa inicial por la desaparición del rollo de pergamino, en un acuerdo silencioso concordaron en esperar el arribo de sus progenitores antes de emprender la búsqueda del extraño objeto. Pero, ya casi había amanecido y no había ninguna otra presencia además de la de ellos en el bosque.
Jiang ShiHuang fue el primero en levantarse del suelo y sacudir sus túnicas, antes de comenzar a caminar en dirección a la ciudad.
Nie ShuFen alzó la cabeza y preguntó intranquilo – ¿A dónde vas? Acordamos esperar a nuestros padres.
Jiang ShiHuang no se volteó y siguió caminando – No vendrán. No lo has notado, con una explosión de esa magnitud tendríamos a todas las sectas y la mitad de la gente de Qinghe sobre nosotros en pocos segundos pero ya amaneció y yo no veo a nadie aquí.
Lan MinSheng que encontraba recargado sobre el tronco de un árbol con los ojos cerrados y brazos cruzados, estuvo de acuerdo y comenzó a caminar para dar alcance al chico de las túnicas violetas.
Al quedar solo, Nie ShuFen no tuvo más opción que seguirlos.
La ciudad de Qinghe siempre había sido tranquila y las personas que vivían ahí se mostraban amigables con los viajeros. Pero justo ahora, la mirada que lanzaban los pueblerinos sobre ellos, era de todo menos amigable. La sensación de ser estudiados comenzaba a ponerlos nerviosos y molestos.
Nie ShuFen tiró de la manga de Lan MinSheng y susurró –MinSheg ¿Por qué nos miran así? Tal vez se corrió el rumor de nuestra travesura y están al tanto del castigo que nos impondrán
Jiang ShiHuang soltó un bufido y se dirigió con pasos firmes a una joven chica que vendía algún tipo de hortaliza –Oye tú, ¿A ocurrido algún movimiento extraño en las últimas horas?
La chica al observar las túnicas color violeta, se asustó y trató de alejarse de Jiang ShiHuang. En su torpe huida, pateó los canastos que contenían las hortalizas que vendería ese día. El joven Jiang trató de evitar que se cayeran, pero si querer terminó pisando algunas de las bolas redondas que se deslizaban fuera de los canastos.
Los murmullos provenientes de las personas que observaban la escena, comenzaron a ser más audibles.
-¡Qué maleducado! La Secta YumengJiang como siempre dando muestras de poca educación
-Que esperabas, su líder sigue siendo un mocoso. El haber ganado un poco de gloria en la guerra ya lo hace sentirse al mismo nivel que los demás líderes.
-Jiang WanYin siempre ha tenido esa actitud agria y desagradable. Era de esperarse que sus discípulos sean tan poco agraciados como él.
Jiang ShiHuang se volteó en dirección a los pueblerinos que murmuraban, posando sus ojos grises como el metal sobre ellos, con voz mordaz y fría dijo –Tan valientes soltando un montón de estupideces a espaldas del líder Jiang, espero que sigan manteniendo esa misma actitud frente a él.
Los pueblerinos rápidamente se dispersaron al sentirse atravesados por esa mirada.
Jiang ShiHuang soltó una risa seca -¿Ahora huyen? Solo sirven para chismosear ¡Acaso no tienen un poco de cara!
Lan MinSheng se acercó rápidamente –ShiHuang, quédate con A-Fen yo hablare con la señorita.
Jiang ShiHuang lanzó una mirada enfurruñada a la chica que seguía tratando de desaparecer de su rango de visión y con pasos largos llegó a donde se encontraba Nie ShuFen.
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El debut de la Triada del Desastre
RandomTomar cualquier objeto extraño del estudio de Lan Qiren nunca es una buena opción. Tres jóvenes amos lo descubrirán muy pronto. Tendrán que lidiar con los dilemas sentimentales de sus inexpertos padres e impedir que se asesinen unos con otros todo e...