Strɑy Kids ♡⃕ ʀᴇᴀᴄᴄɪᴏɴᴇs.

011

BangChan.
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Las rosas estaban muy bien cuidadas y estaba orgullosa de mi cuido en ellas, eran de la mamá de BangChan por ello las cuidaba mucho. Esa señora fue como mi mamá cuando la mía se fue a mi poca edad y me dejó con mi papá que ahora es mi vida por supuesto que el fue madre y padre a el mismo tiempo cuando esa señora se fue con otros peces. BangChan es mi novio y estamos muy felices de lo que somos, tengo una pequeña hija llamada, Sofía.

Esta relación está funcionando muy bien, mi hija está súper bien a el igual que mi novio. Últimamente esta ¿Raro?, Pues está nervioso cada que le hablo y eso hace que también este nerviosa más ahora que me dijo que fuésemos a un restaurante a hablar. Ese restaurante es muy privado, es decir, se puede pagar una mesa enorme y alrededor cero gente.

Eso me preocupa un poco porque ¿Si me termina? ¿No sabe cómo hacerlo acaso?.  La relación en mi opinión está yendo bien y no es como para terminarla pero si es el caso lo aceptó, prefiero dejarlo ser feliz.

También me sentía mal, últimamente vomito a el ver el arroz que con pensarlo voy a el baño y esto me suele pasar cuando me viene la menstruación y no me ha venido se lo que muchos piensan y es “embarazada” y bueno, si lo estoy. Estoy muy feliz por mi embarazo de ya un mes que por cierto, BangChan no sabe nada, estoy aún nerviosa por lo que quiere decir y no es momento de decir lo de ello. Aparte eso de que este el muy raro me pone nerviosa a mi mucho más de lo que da a notar el.

—Cariño, ven.— Llame a Sofía, que apenas tiene seis años y está en esa edad donde juega en cualquier lugar. Es muy inquieta, hace de mis días hermosos pero también cansados.—Tienes que cocinar con mamá.

Desde mucho ella quería cocinar conmigo, debo de aceptar que me da miedo dejar que se acerque a la cocina pero estare atenta, más de lo común. Aún eran las cuatro de la tarde, ¡Muy tarde para regar las rosas!, Pero estuve limpiando y votando muchas cosas de casa que ya no sirven.

Ella es juguetona pero algo que no le gusta son las Barbies, dice que son muy falsas. Prefiere nadar con ayuda de su papá.

BangChan, el salía de ensayar hoy a las cinco y cuarenta. Llega como a las ¿seis y quince?, Tal vez. Mi niña no irá porque según mi novio ella se dormirá y prefiere que duerma cómoda con su abuelo.

[…]

Después de hacer comida para mi papá que hoy se queda a cuidar a Sofía, me fui a cambiar de atuendo. Un vestido negro para combinar con tenis porque algo que tengo es que no me gustan mucho los tacones. Mis tenis eran blancas, mi pequeño bolso también era blanco. Mis colores favoritos, uhm.

Escuché el timbre y asegure que era papá ya que mi novio tiene llaves. Baje a el primer piso y fui directo a la puerta negra. Mi casa era así, colores como; negro, blanco, gris, dorado. Sofía ama el dorado y el rojo.

—Hola papa — Saludé con un beso en la mejilla y un abrazo un poco corto— Sofía te está esperando en su habitación. Lo que te espera. Por cierto el almuerzo está en el horno, la ensalada en el refrigerador, coge todo lo que quieras.

Sonreír y corrí un poco lento por un motivo muy obvio a la habitación a tomar mi celular para ver la foto de la camisa que mande ha hacer para Sofía, era una sorpresa para BangChan si todo salía con noticias buenas hoy por supuesto.