I'm in Trouble [Chenmin/Xiuchen] Omegaverse

Capítulo 4.1: Situaciones inesperadas...

Jongdae despertó sintiendo los molestos rayos del sol colarse por las cortinas e incidir directamente en su rostro, gruñó molesto y se volteó intentando volver a dormir, pero todo deseo de entrar en el mundo de los sueños se esfumó al sentir la presencia de otra persona en su cama. Abrió uno de sus ojos acostumbrándose a la iluminación natural, debió haber cerrado las ventanas y corrido las cortinas antes de acostarse, entonces recordó que las había dejado abiertas para que el aire fresco de la noche alejara todo pensamiento pecaminoso y el calor de su cuerpo ansioso por tener contacto con el de su compañero en celo en la habitación de al lado. Los recuerdos los azotaron con fuerza y fue realmente consciente de quien era el hombre que con el que compartía su cama, decir que estaba feliz era poco para describir las emociones que se mezclaban dentro de su pecho, su lobo movía la cola, inquieto, mientras que el humano se acercaba más al alfa hasta llegar a sentir su respiración sobre la suya. Una de sus manos se posó en su mejilla acariciando suavemente, sonriendo cuando el chico se removió un poco y frunció el ceño ante el contacto con otro cuerpo. Jongdae pensó que Minseok abriría los ojos y lo alejaría, pero pasó todo lo contario, el pelirosa le dio una cálida sonrisa antes de acurrucarse más contra su pecho.

── Buenos días, Dae. ──dijo y esas simples palabras hicieron revolotear mariposas en el estómago del menor. El Alfa no sabía que le había gustado más, si la voz ronca del mayor en la mañana o el mote que le había puesto, su nombre sonaba tan bien cuando salía de sus labios.

── Buenos días, Min. ──le contestó abrazándole. ──¿Cómo te sientes?

── Mejor, el celo ya terminó. ──contestó algo avergonzado al respirar el aroma del Alfa mezclado con el suyo. ──Gracias.

── ¿Por qué me agradeces? ──preguntó algo confuso.

Minseok, quien había reunido mucho valor para dejar salir sus palabras, maldijo en su interior la idiotez de Jongdae y la forma en que conseguía derretirlo con solo unas caricias en su espalda. Había pensado que lo entendería a la primera, no quería explicarle el porqué, nunca había sido bueno dando explicaciones de todas formas.

── Ya sabes a qué me refiero. ──tragó en seco, nervioso, antes de seguir. ──G-gracias por no echarme de tu habitación y ayudarme con mi celo. ──la risa de Jongdae fue música para sus oídos, era sexy.

── No deberías agradecerme por ello, soy yo quien debería hacerlo, después de todo desperté para encontrarte a mi lado, no me alejaste cuando me acerqué, me sonreíste y abrazaste. Ahora mismo me siento la persona más afortunada del mundo. Gracias por no rechazarme.

Se quedaron un rato más abrazados, cómodos ante el contacto con el otro, las caricias y besos castos en la frente, incluso el tarareo del rubio tenía al mayor en una burbuja de felicidad. ¿Así se sentía tener un compañero? A pesar de no estar enlazados y apenas conocerse, Minseok sentía que conocía a Jongdae de toda una vida y se sentía realmente correcto estar entre sus brazos, siendo mimado y querido. Aún tenían una plática pendiente, pero el pelirosa no dudaba más, definitivamente había hecho mal al rechazar a su compañero antes. ¿Era demasiado tarde para arrepentirse? ¿Jongdae querría intentarlo de nuevo? ¿Le aceptaría ahora después de escuchar sus palabras en el pasado?

── Nunca es demasiado tarde si lo que quieres hacer es importante y sí, me encantaría intentar estar contigo, no es como si fuera a dejarte ir tan fácilmente. ──dijo encogiéndose de hombros y Minseok se sonrojó al saber que había estado pensando en voz alta. ──¿Ya te he dicho lo hermoso que te ves sonrojado? ──el mayor negó. ──Me encantas, eres hermoso Minseok, no sabes lo loco que me traes.

── Tú también eres hermoso. ──se encontró admitiendo el mayor. ──Me gusta mucho tu voz y tu sonrisa gatuna. ¿Estás seguro de que eres un cambiaforma lobo? ──preguntó haciendo al rubio sonreír, podría morir en ese mismo momento.