Central Station ✧ KookMin

07: Ven conmigo

"No puedes ayudar a alguien que no quiere ser ayudado"

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Tan pronto como su nombre salió de sus labios, el rubio lo miró, sorprendido y sin estar muy seguro sobre qué hacer. No fue hasta que Jungkook comenzó a acercarse a él que reaccionó y comenzó a correr a la salida, siendo seguido por el agente.

— ¡Jimin! — le gritó, pero el chico no se detuvo.

Jungkook era muy rápido, y fue cuestión de segundos para que llegara a él y se pusiera en medio de su camino, importandole seguir corriendo.

— Tenemos que hablar, chico.

— ¡No es cierto! ¡Déjame en paz! — nuevamente intentó salir corriendo, pero Jungkook lo tomó del brazo y lo arrinconó en una pared, importandole totalmente escapar.

— ¿Por qué mentiste?

— ¡Que te importa!

— ¡Jimin, estoy intentando ayudarte! ¿¡Puedes cooperar!? ¿¡Acaso piensas estar toda tu vida en un prostíbulo!?

Jimin permaneció en silencio, con sus ojos cristalinos pero sin derramar ni una sola lágrima. Únicamente miraba fijamente a Jungkook hasta que éste comenzó a debilitar el agarre que tenía sobre el rubio.

— S-solo déjame ayudarte.— pidió.— Si me dejas, podemos sacarte de ese lugar, Jimin.

Los labios de Jimin temblaron al intentar hablar. Sentía la impotencia de no poder hacerlo correctamente, más una fuerte vergüenza ante lo que estaba apunto de decir.

— Yo no tengo a donde ir, ¿Bien? — balbuceó.— Yo sé que fuí secuestrado, y si no trabajará en ese jodido lugar, podría parecer que no es así, no es mi lugar favorito en el mundo pero yo no recuerdo a mis padres, no sé de dónde vengo, ni tengo idea de como podría buscarlos. ¿Crees que yo quiero vivir así toda la vida? Vendiendo mi cuerpo a un precio estúpidamente costoso solamente para hacer aún más rico al dueño. Me pagan bien, no me tratan como normalmente trataría a alguien como yo, otra razón por la cuál no me he ido de ahí. ¿Quieres una más? De hecho es la más válida. ¡Estoy secuestrado! No. Me. Puedo. Ir, Jungkook.

— Ven conmigo. — habló el agente.— Soy un maldito policía, un agente del FBI y debí hacer esto desde que salimos de la jodida cafetería. Bien dices que no tienes a donde ir, ven conmigo entonces, yo te ayudaré a buscar a tu familia y te sacaremos de ese infierno.

El rubio tardó unos segundos en responder, segundos que usó para poder limpiar las lágrimas de sus mejillas, intentando desaparecer todo el rastro de ellas.

— No es tan fácil, Jungkook.— miró la hora en su desgastado reloj de cuero artificial en su muñeca.— Debí llegar hace cinco minutos, no tardarán mucho en venir y buscarme.

— Entonces es mejor que nos demos prisa y salgamos de aquí antes de que te encuentre alguien.

El rubio frunció su ceño.

— ¿Que clase de secuestro es éste? — Jungkook no pudo evitar reír.

— No es un secuestro, es tu decisión. Puedes entrar al auto y prometo hacer lo imposible para hacerte libre, ó puedes volver por tu camino y jamás volverás a verme si así lo quieres.

Jimin giró y miró detenidamente el camino, sólo tenía que caminar hacia allá para olvidar todo y seguir con su vida como si Jungkook jamás hubiera aparecido, y realmente sería así, ya que no volvería a ver al castaño.