koothing ♡ jikook au

019

Lo siento por capítulo de mierda.

El aire acondicionado tocaba su cabello haciéndolo revolotear, jungkook toco su mechón suelto castaño antes de empezar a jugar con él. Hoy en la veterinaria estaba muy tranquilo, lo cual era un gozo para el castaño, no es por que no le gustara su trabajo, de hecho, es una de las cosas que más le gusta en su día-además de beber como un desgraciado- ya que tener animales cerca de él, le daba una calidez que muy rara vez siente. Él es el encargado de lavar el pelaje y darle un corte si es que el dueño lo pedía, incluso había veces donde el castaño llevaba accesorios. Su animal favorito son los perritos, pero también había veces que llevaban gatos-Jungkook sufre esos días-.

— ­¡Jungkook! — Exclamó su compañera de trabajo, Ji Eun, es una chica muy tierna para su gusto y con una dulce personalidad. El castaño se sobre salto antes de girar su cabeza hacia la entrada donde la castaña se encontraba, ¿no se supone que iba a comer e iba a llegar a las 4? Espera... Su vista se dirigió hacia el reloj que colgaba en una de las paredes del local, el reloj ya marcaba las 4.

El tiempo sí que corre rápido.

Tengo unas ganas de beber una cerveza y comer unas brochetas. Pensó mientras sentía rugir su estómago. —Dios, te dije que fueras a comer algo, Jeon, ten —Hablo la chica mientras le pasaba un tóper lleno de comida Gogi gui.

Su corazón enloqueció al igual que su pansa. Dios el hambre lo vendría matando. Jeon dejo el tóper un lado antes de lanzarse a los brazos de la chica besando repetidamente las mejillas, —Mucho amor, ya, ya— Trato de calmar al chico que la tenia prisionera, jungkook rio antes de dejarla e ir a su lugar de trabajo para comer.

El gogi gui es una barbacoa, aunque el atractivo era cocinarlo, pero no podía ser muy exigente...Esperen. Jungkook alzo su cabeza —¿Trajiste algún banchan?

Ella se quedo viendo al chico antes de negar, se lo había acabado con su acompañante. —No te pongas así, que no me quisiste acompañar— el castaño solo hizo un mojin antes de tomar los palillos reciclables para empezar a comer.

— Pudo haber venido un cliente, eun.

Resoplo la mencionada. —Si, vinieron muchos. —Agrego antes de que la puerta del local fuera abierta por una chica. Jungkook alzo una ceja al ver la vestimenta de la señorita, venia de una academia, una persona con dinero. Decidió ignorarla para seguir comiendo.

Escucho como su compañera la atendía, parece ser que trajo un gatito que se encontró en la calle en muy malas condiciones.