∆Ven aquí y ámame∆ {Adaptación} 🥑JoongNine🍓

🥑XII🍓

Después del beso Joong no dijo mucho, nada, en realidad. Sólo había sonreído a medias para Nine, le tomó la mano y lo encaminó a su casa. Para el peligris aquello estuvo más que bien, ese era un pequeño gran avance, sabe que tampoco Joong va a estar besándolo a cada rato como su corazón lo pide. El alfa necesitaba acostumbrarse a la idea de que eran alfa-omega.

Para el miércoles Joong estaba más cariñoso que nunca. En el receso no hacía más que estar con la cabeza enterrada en su cuello, olfateando. Gruñía cada vez que alguien le hablaba al de tez clara, no importaba si era beta o un omega como él. Nine no se quejaba, le gustaba sentir la necesidad del alfa en tenerlo a su lado, por él estaba perfecto así.

Ahora están sentados en las mesas de la cafetería, Joss también está con ellos, porque dijo ahora eran sus nuevos amigos. Joong no lo soportaba, porque era el que más le hablaba a Nine y lo estaba provocando.

― Hey, Joong ―el omega acaricia la mejilla de Joong, llamando su atención, sólo hace que el azabache ronronee ante el toque― ¿Puedes ir a comprarme una malteada?

― Que vaya Joss. ―aspira fuerte, sonando distraído.

― Pero no creo que quieras que otro alfa me compre cosas...

― Está bien. ―molesto de tener que dejar el calor del omega, se levanta, yendo al almacén de la institución.

Nine voltea hacia Pável, alzando su ceja.

― Es su celo ―su tono es de obviedad―. Se está acercando y necesita olerte para que a la hora de, ya sabes, "hacerlo" su alfa te reconozca y no te haga daño.

― Oh... ―asiente comprensivo, y no sabe por qué sus mejillas se calientan un poco―. ¿Crees que Joong lo quiera pasar conmigo? ¿O llamará a alguien?

― Pienso que primero te dirá que no porque tendrá miedo de lastimarte. Pero si tu quieres pasarlo con él y lo convences de que no te hará nada...Tal vez lo logres.

― Y si no pasa, ¿llamará a alguien?

Pavel niega, sonriendo de lado ante la expresión inquieta del otro.

― No lo creo ―lleva a su boca un trozo de chocolate, de esos que Joong le regaló a Nine, quien al notarlo le da un manotazo aunque no logra impedir que lo coma―, su alfa se volvería loco de oler a otro omega que no seas tú. Así que, si no eres tú, no es nadie.

Pável termina de comer el chocolate y a Nine ya no le importa. Muerde la piel de sus labios, pensando. El pensamiento de que Joong no llamara a nadie más para pasar su celo le calmaba un poco, pero sabiendo el dolor que iba a sufrir, lo alteraba de nuevo. Tenía que convencerlo.

― Toma. ―el alfa azabache reposa la malteada de vainilla en la mesa, sentándose al lado de Nine y tal vez es la costumbre, porque su cabeza cae instantáneamente sobre su hombro.

― Gracias, Joong. ¿Cómo sabías que ésta era mi favorita?

Joong gruñe, pero muy bajito.

― Era la única que había.

Nine se ríe y le da un sorbo al batido, sabía que era muy bueno para ser verdad.

　　　　　
　　　　　
　　　　　
　　　　　
　　　　　
　　　　　
　　　　　
　　　　　

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