ｇｏｌＤ °YM• JS One Shot

•Gold•

Min YoonGi...

Mi primer y gran amor, creo que es hora de soltar tu mano, o más bien dicho, es hora de soltar tu saco, por qué tu mano la apartaste de mí desde hace tiempo. Y mientras tú te alejabas, otro llegó para sostener y consolar mi corazón, por qué quiero decirte yo antes de que otra persona te cuente. Él es todo un caballero, me llena de detalles cada día, no se duerme sin antes decirme un "te amo" es un buen amigo y un excelente novio, él me hace sentir amado y especial, cuando estoy en sus brazos me siento protegido, me siento a salvó, así como tú solías hacerlo. Él es maravilloso, pero ¿te digo algo? No eres tú. Pero esta carta no es para hablar de él, es para decirte todo lo que me guarde durante todo este tiempo, por fin podré darle un cierre a este capítulo. Ambos lo necesitamos.

Te ame, te amo y te amare. Estos cinco años junto a tí, fue lo mejor de mi vida. Te deseo lo mejor, se feliz con SeokJin, más de lo que fuiste conmigo. ¿Cómo pudo acabar todo en tan sólo dos años? Realmente no se que me faltó. ¿Amor? ¿Fue eso lo que te faltó? Me esforcé en demostrarte mi amor cada noche, cada mañana, tal vez no fui lo suficiente.
¿Ya no te atraía? Lo entiendo, él es más bello, tiene lindo cuerpo, semblante encantador, y es obvio, es modelo.

¿Tal vez más atención? Te la otorgue toda, acorte mis horarios en la academia para poder estar contigo, pero lo único que recibía a cambio era un "tengo junta, nos vemos más tarde" "no me esperes despierto" "tengo un viaje, serán dos semanas" "te quiero" "disculpa no podré ir a nuestra cita" "será otro día" y cada día era lo mismo hasta que los te quiero desaparecieron de tu vocabulario al igual que tus llegadas a casa.

¿Cuado me di cuenta que algo andaba mal? Desde el día que, buscando mis zapatos debajo de la cama encontré tu anillo de compromiso, al principio quise créer que se cayó del mueble, mi mente me lleno de ideas que no quise creer pero terminaron siendo ciertas. Esa noche era nuestro cuarto aniversario, decidí hacerte una cena sorpresa, me puse lo más bonito posible. Te esperé, realmente lo hice. ¿Llegaste? No, no ese día, ni el siguiente, ni el siguiente. Esa semana en la que no estuviste, mientas acomodaba tu ropa, hallé recibos de prendas, perfumes y joyería, en el televisor salió la noticia de que te habían visto con un chico, un amigo, un familiar quizá, obligue a mi cerebro creer eso, ese mismo día llegó tu madre de visita, ella también lo había visto y tuvo el mismo presentimiento que yo. Ambos lo dejamos pasar. Fue cuando escuché la frase "No salgas a buscar cobre cuando en casa hay oro".Cuando llegaste solo dijiste que fue un viaje de última hora y que la noticia era falsa, me dijiste el "te quiero" más falso y forzado que lo único que me provocó fueron ganas de llorar. Desde ese día supe que las cosas estaban rotas. ¿Cómo pude ser tan descuidado?

Un día salí antes del trabajo, tomé rumbo a comprar tu comida favorita, quise sorprenderte, ya casi era hora de tu descanso, cuando llegue tu asistente me informó " el jefe dijo que tomaría el día para estar con usted, señor Min" ¿si eso era cierto por qué no me dijiste nada? salí enojado y dolido no sin antes aclarar que mi apellido era Park. Cómo era de esperarse no llegaste, me había acostumbrado a tu ausencia que ahora me sorprendía cuando llegabas.

Esa misma semana salí con TaeHyung y los demás bailarines para discutir las siguientes presentaciones y rutinas. Tae te miró con él, iban agarrados de la mano y riendo, me impidió ver pero aún así logré verte, justo en el momento que lo besabas. ¡Dios! No sabes cómo me lastimaste.

Los meses siguieron pasando y todo siguió empeorando. Lo supe cuando no te importó llegar en la madrugada a casa sin interesarte que yo aún estuviera despierto escuchando tus conversaciones con él, tampoco te importó ocultar las marcas que te dejaba, era tan doloroso tener que dormir a tu lado aún oliendo a él, tanto era mi dolor que cuando por fin te dormías yo me iba al siguiente cuarto y lloraba. Lloraba está que el sueño me vencía y en esos momentos me dejaba de doler.