parte 4

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Estaba nerviosa y emocionada, su primer trabajo sería si conseguía pasar los filtros de la empresa, había logrado conseguir la entrevista en una farmacia de renombre como cajera, esos dos meses de recuperación los utilizo para enviar currículum a todas partes.

Se vistió con una blusa blanca sin mangas, cuello en v, un saco azul marino que acentuaba su figura y de juego un pantalón de vestir del mismo color, antes hubiera elegido una falda, pero no sé sentía cómoda, después del episodio se dio cuenta que consiente o inconsciente mente la ropa holgada le daba una sensación de seguridad y que a pesar de que su recuperación fuera rápida aún seguía sangrando de entre sus piernas.

Traía un arsenal de productos femeninos en su bolsa para evitar cualquier accidente, cada ves era menos pero igual las secuelas de lo sucedido seguían en su organismo.

Se maquillo ligeramente mientras se veía en el espejo, su rostro se veía más delgado, sus ojos grandes y azules extraños para un japonés, pero siempre se sintió agradecida de su belleza poco común su piel pálida pero sus mejillas sonrosadas.

-te ves hermosa

Le hablo su pequeño niño Zorro, mientras cambiaba de forma de un niño humano a un niño con  rasgos demoníacos.

Kagome volteo a verlo, se veía hermoso con su uniforme de kínder, era todo ojos verdes y cabello del atardecer.

-Cómo te fue en la escuela Shippo?

Llevaba dos semanas asistiendo a la escuela y le iba bien, era un niño encantador y seguía las reglas de la familia como si fueran sagradas, nunca mostrar su apariencia ni he hablar de su magia.

Kagome estaba feliz en ese punto, pues Shippo se estaba  adaptando tan fácilmente a la escuela y ahora ella tenía que conseguir el trabajo para poder pagar los gastos del niño, la universidad a dónde quería entrar no era tan costosa pero tampoco barata y aportar a la casa se había vuelto una meta, el sueldo era atractivo noventa y tres mil quinientos yenes semanales, que cubrirían los gastos para ella y su pequeño zorrito.

Su madre había insistido en qué no trabajará aún, pero no quería ser una carga, sabía que faltaba dinero porque ese mes habían comido solo arroz con pescado, Souta no había podido ir a una excursión por qué no pudieron pagar los costos del viaje, su hermano era consiente y no protesto sonrió alegando que estaba bien, a si que ella había decidido darles una vida buena a su amorosa familia.

-Ven corazón, hoy volviendo de la entrevista si me dan el empleo, que te parece si te llevo al parque por caramelos.

La cara de su niño se ilumino

-Viva! Si!

Saltaba el pequeño zorrito lleno de felicidad.

-Deséame mucha suerte Shippo.

Se despidió de su familia y en lugar de tomar un taxi decidió tomar un autobús, guardaría dinero para comprarle los dulces a Shippo aún si no conseguía el trabajo.

Llegó veinte minutos antes de lo previsto, la hicieron pasar a una pequeña salita de espera, mientras una enfermera tomaba muestras.

-Hola cariño te vamos a hacer unos exámenes de rutina, en algunos momentos el gerente te atenderá, hoy esta de visita el dueño de la farmacéutica, a si que tardarán un poco, tu tranquila y mucha suerte.

Kagome espero tranquila cuando sintió una punzada de energía demoníaca, entro en pánico, la conocía maldad pura con veneno letal, quería levantarse y correr pero en lugar de eso su propio Reiki choco con esa energía, que de repente desapareció como si nunca hubiera estado.

Akuma Naraku se sintió sorprendido en el momento que el Reiki purificador chocó con su yokai, estuvo a punto de entrar en euforia pero se calmo, su plan estaba en marcha era beneficioso que la pequeña Miko hubiera mandado solicitud de empleo a su empresa, por eso planeo la visita con la estúpida escusa de supervisar a sus empleados.

Sonrió para si cuando el gerente y la asistente obesa le explicaban el funcionamiento de la tienda, por dios que humanos mas estúpidos, explicarle el plan de negocios a quien lo creó.

- falta personal en esta locación

Naraku hablaba con una voz monótona

-Claro señor pero ahora tenemos varios candidatos, de hecho ahí una en estos momentos, en cuanto veamos que sea apta le diremos si se quedará ó no.

-Quisiera ver la entrevista.

-Pero señor! no creo que le Interesé mucho, es solo una empleada más.

-No cuestione mis decisiones!

Naraku se estaba impacientando, quería tener a Kagome en su poder, controlarla para acabar con la maldita y deplorable raza humana, el pensar en reinar sobre todos le ponía feliz.

-Señorita Higurashi
el gerente la llamo para pasara a su oficina.

Naraku veía y escuchaba todo por las cámaras de seguridad, la recorto de pies a cabeza, se veía como un ratón tratando de ser valiente, pero rota ¿como sería verla implorar por dolor y que le jurará lealtad a el?

Sabia que Sesshomaru y el estúpido de Inuyasha no habían dado señales de vida, investigo todo lo relacionado a demonios en la actualidad en el momento que recupero todos sus recuerdos, le extrañaba que no estuvieran al pendiente de su hembra o quizás si, pero no tenían cara para exigirle nada después de haberla montado.

Se pregunto que pasaría si ella decidiera estar con otro hombre, sería el quiebre del orgullo de Sesshomaru, dejaría de ser un lord y el idiota de Inuyasha tan sumiso se volvería?
Siguió observando la entrevista, el gerente junto con su asistente se veían nerviosos.

-Cuéntanos sobre ti, porque decidiste aplicar al empleo?

-Me interesa el ramo farmacéutico y el horario se acomoda a la universidad que quiero entra el próximo ciclo.

-veo que vives muy cerca de esta sucursal, Tienes un hijo y el padre?

Kagome se retorcía las manos de nerviosismo, que podría decirles?

-me embarace a los 15 y soy madre soltera.

De inmediato vio el semblante de las caras de sus entrevistadores cambiar, la mujer hacia un gesto de desprecio, mientras el gerente se ruborizaba.

-Disculpe señorita

El gerente se veía mortificado

-creo que estaría dando mala imagen a la empresa, siendo madre soltera.

La asistente hablo de inmediato, siendo una mujer grosera juzgando a Kagome
Naraku sonrió dejaría que la Miko se defendiera sola o se quebrara, después el se encargaría de la mujer humana.

-creo que mi vida personal no le importa a nadie más que a mí, puedo demostrar lo competente que soy como empleada.

La mujer levantó una ceja lista para humillar a la ojo azúl, cuando la puerta sonó y la enfermera entraba con el expediente medico de Kagome, el gerente lo tomo en las manos y empezó a leerlo.

-Ok, de salud se ve perfectamente, un poco baja de peso pero eso no afecta en nada su desempeño oh!

La expresión de sorpresa del gerente la intrigó, mientras la asistente leía sobre su hombro y una sonrisa sínica cruzaba su cara.

-lo siento señorita Higurashi, pero por el momento no podemos contratar mujeres embarazadas.

Kagome parpadeo varias veces mientras procesaba la información.

-Disculpe, debe de haber un error

La voz de Kagome sonaba a punto de quebrarse, no podía pensar bien su cabeza daba vueltas.

Embarazada? un hijo de Inuyasha o de Sesshomaru? Dios esto debía de ser una broma! no podía jugarle de esa forma el universo, su periodo había llegado, o las heridas de su entre pierna eran…?

Trato de concentrar su Reiki y lo sintió una pequeña fuerza yokai respondiéndole, se sintió cálida y llena de amor, pero a la vez la aterro.

-Lo siento señorita Higurashi no en podemos permitir contratar a una mujer embarazada,
Bajo la mirada conteniendo el llanto mientras se levantaba.

-lo entiendo no se preocupe y disculpe la perdida de tiempo

Salió a toda prisa, su andar aumentaba hasta que se convirtió en una carrera alocada sin rumbo, sin darse cuenta llegó a un pequeño parque solitario.

Por otra parte Naraku procesaba mil ideas, un embarazo! Maravilloso o interfería en sus planes? lo interrumpía en ese momento? esperaba un nos meses más para sacárselo del vientre, matar a la criatura frente a los ojos de la Miko mientras daba a luz, quedarse con el bastardo y torturarlo hasta que fuera una piltrafa humana, o moldearlo a su forma, que el heredero del oeste le fuera leal a la araña.

Se levantó tranquilamente y se dirigió a la pequeña oficina del gerente

-Estoy disgustado con su forma de tratar a esa mujer

-Señor entiéndanos, si la contábamos pronto pediría permiso para ausentarse.
No lo dejo terminar cuando uno tentáculo proveniente de la espalda del hanyo lo atravesaba dándole muerte inmediata, la mujer trato de gritar pero otro tentáculo se lo impedía.

-me molestan los humanos que se creen con la autoridad cuando tienen un cargo insignificante
Miraba a la mujer que lloraba de miedo.

-O el olor del miedo me encanta, pero el tuyo huele a grasa, tendré que conformarme y jugaré con tigo.

Con una garra iba pasando del torso al estómago de la mujer, dejando un rastro de veneno que carcomida la tela de la ropa y la piel, la prisionera se retorcía de dolor mientras era quemada viva con el veneno, llegó a tal grado que al pasar las garras por el vientre de la mujer la piel cedió, vertiendo los intestinos de ella al piso y luego muriendo como un animal en el matadero.

Naraku miro la escena sin ninguna emoción, saco su celular del saco y marcó el número de su asistente personal.

-Acabo de jugar con dos personas, el gerente y asistente de una de las farmacias del sector este, ya sabes que hacer, si pon a alguien más cubriendo los puestos, es más dale la gerencia a Kagome Higurashi, quiero que le plantes un sueldo atractivo y una disculpa a nombre de la familia Akuma.

Colgó el teléfono y empezó a caminar siguiendo el rastro de Kagome.
--------------------------------------------hola mis lectores hermosos, en este punto de va a desarrollar más la historia si tienen alguna sugerencia será bien recibida 💓💓
Me llena de felicidad saber que les gusta mi pequeña historia.




Caminando con la MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora