El pasado siempre vuelve (en proceso y editando)

3.Siempre tuyo Siempre mía

Pov Riven.

Los rayos de sol entran por la ventana del salón de Musa donde anoche - después de una pequeña discusión-me dejó quedarme, debo explicarle muchas cosas si quiero que me perdone, aunque simplemente acabemos siendo amigos porque después de la manera indiferente de mirarme de ayer dudo mucho que siga sintiendo algo por mi como lo hacía años atrás. Ni siquiera se si tiene pareja

Mierda

Me jodería mucho, han pasado años y no he estado con nadie, a menos no de manera seria, porque aquí entre nos, un hombre tiene sus necesidades, solo que al final del día ninguna de ellas era el hada azabache

Doble mierda

Me levanto de un salto, haciendo que la manta que cubría mi cuerpo y la cual no recuerdo haberme puesto anoche caiga al suelo, es una manta azul de lana bastante suave-Musa-debió de habermela puesto cuando dormía

La coloco en el respaldo del sofá y me dirijo hacia la cocina, no sin antes colocarme una camiseta y unos pantalones, mi pijama consiste en unos simples boxers.

La cocina es amplia, todo lo amplia que podría ser dentro de la pequeña casa de su padre, hay una encimera donde están los utensilios, en frente del marco la puerta y a la derecha hay una barra americana que supongo la usará para el desayuno

Busco un tazón para la leche y agarro las tostadas-le llevaré el desayuno-las unto con mantequilla como a ella le solían gustar y preparo café, saco de la nevera junto a la encimera una pieza de fruta, la troceo vertiendo su contenido en otro tazón, y por último en un vaso le sirvo jugo de naranja

Coloco todo de forma perfecta en una bandeja que encuentro en uno de los cajones y me dispongo a subir las escaleras

Cuando llego a su puerta, segunda a la izquierda, llamo y espero a que me abra solo que nadie responde. Vuelvo a llamar, esperando paciente, cuando ya han pasado tres minutos desde la última vez que llamé me dispongo a abrir la puerta con cuidado de hacer el más mínimo ruido

Es una habitación bastante pequeña, en tinieblas, en una de las paredes está el escritorio y en otra la cama, sobre la que descansa su cuerpo, aunque tal vez descansar no es exactamente lo que está haciendo, al darme cuenta, voy rápidamente al escritorio sobre el que dejo la bandeja

El cuerpo del hada se retuerce bajo las sábanas, las cuales le tapan de la cintura hacia abajo, gracias a los rayos de luz que se cuelan por las cortinas puedo detallar su cara-esta teniendo una pesadilla-gruesas lágrimas ruedan por sus mejillas mientras gime en dolor y solloza, susurrando algo inentendible

Me acerco a ella, despacio, me siento en su cama y acaricio su pelo susurrandole que todo está bien, que está a salvo.

Nada ayuda

En un intento desesperado por que deje de llorar me quito los zapatos y me tumbo con ella en su pequeña cama, al instante en el que paso un brazo al rededor de su cintura comienza a calmarse, tengo miedo de que se haya despertado y se asuste, pero no, esta en calma, la pesadilla se ha ido y ya no llora. Limpio con mis pulgares sus mejillas y me permito abrazarla contra mi pecho, ella inconscientemente pasa uno de sus brazos sobre mi, agarrando la tela de mi camisa, su cara en la curvatura de mi cuello, acaba tumbandose encima mía debido a que la cama es demasiado pequeña para los dos, la abrazo por la cintura y la pego más a mi. Ahora esta dormida, tan profundamente que me parece que no me podré mover hasta que ella se despierte, esperemos que no me mate por haber venido aquí.

No puedo evitar recordar las noches que pasamos en esta misma cama, las noches que pasamos en su habitación de Alfea o en la mía de Fontana Roja, las noches que a orillas del lago Roca luz, sobre la verde y frondosa hierba, volvíamos a gritarle a la luna que nos amabamos, de manera intensa, loca, peligrosa, y si, algo tóxica, las noches que la hice mía... Y ella me hizo suyo

Porque yo soy suyo

Siempre seré suyo

Sin importar la distancia, los años, las décadas, las personas que se interpongan en nuestro camino, siempre seré suyo porque así lo decidí, así decidí entregarle no solo mi corazón sino mi alma y mi vida.

Ella es mi vida

Como diría el poeta de Helia, ella es la melodía que un día entro a mi mundo, llenándolo de color y de vida con su risa

Con ese último pensamiento en mente, vuelvo a caer en la inconsciencia

Pov Musa

Otra noche llorando

Siento que no estoy en mi cama, estoy sobre algo más duro y... ¿Musculoso?

Abro los ojos dejando que la luz que entra por mis cortinas detallen la habitación y cuando miro hacia abajo me encuentro con algo que para nada me esperaba

Riven

Durmiendo debajo de mi

Con sus brazos al rededor de mi cintura

Mi cabeza sobre su pecho

Y yo

Abrazandolo

No puedo evitar detallar su rostro, su piel morena que le da un aspecto más rudo, siempre ha tenido la piel morena, no tan morena como Layla pero si similar a la de Flora

Su cabello está desordenado, apuntando cada mechón a una dirección, su expresión es relajada, satisfecha, como si hubiera estado esperando esto por demasiado tiempo

No controlo mi cuerpo cuando mi mano se dirige a su mejilla en una leve caricia, siempre ha tenido el sueño muy ligero pero parece que hoy no es el caso.

Retiro los mechones de pelo que le caen sobre la frente con las llemas de mis dedos, apreciando la cicatriz que empieza en la sien y acaba en el mentón, recorriendole el costado derecho de la cara, me acuerdo de esta cicatriz.

Hace años, cuando habíamos empezado el primer curso

Alfea

Nos mandaron a una misión a los dos solos en la Tierra, hacíamos muy buena pareja en el campo de batalla y solo podían enviar a un par de personas

Habíamos estado entrenando mucho antes de eso, nos gustaba trabajar juntos, nos entendíamos bien

Éramos tan buenos y estábamos tan compenetrados que parecíamos uno solo, asique nos enviaron a ambos

Unos magos habían robado armas mágicas del planeta Domino y tenían pensado venderlas en la tierra

Cuando estábamos luchando contra ellos y yo estaba a punto de lanzar una bomba sonica un tipo me atacó por la espalda, haciéndome quedar inconsciente. Riven luchó contra él, eran cuatro magos en total, acabó ganando Riven por supuesto pero el precio fue llevarse demasiadas heridas

A pesar de su cuerpo dañado me cargó en brazos y me transportó hasta la habitación de hotel en la que nos hospedabamos

Ahí supe exactamente qué estaba enamorada de él

Un mes después me pidió salir, esta claro que acepté, ¿no?

Sigo acariciando su mejilla, tan concentrada que no me doy cuenta de que ya ha abierto los ojos

Me está mirando

Fijamente

Mierda

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Espero os haya gustado el capítulo de hoy ☺️☺️
Veremos que pasa en el siguiente

Creen que sean capaces de arreglar sus diferencias y entenderse o no?

Besos

A.H💋