Boo bear y Harry han estado juntos desde que eran jóvenes, contaba mi mamá, siempre con alegría y orgullo de sus padres. Han estado casados durante casi más de medio siglo. Siempre han sido una pareja muy tierna y graciosa. Les gustaba jugar. Y aun que el tiempo cambio el color de sus cabellos y la fuerza de sus músculos, nunca se llevo su energía y mucho menos su amor.
La vieja casa del abuelo Louis a las afueras de la ciudad de Homes Chapel era lo más acogedor que había en todo el lugar. Desde la vieja madera de las ventanas, las pesadas puertas con un olor exquisito de árbol seco, las flores que crecían a los alrededores de la casa, los nidos artificiales de aves que ellos mismos habían puesto en los arboles, hasta las fotos de su juventud colgadas en toda habitación, los recuerdos de su boda en la mesa de centro de la sala, las graciosas escaleras que rechinaban con un ruidito casi tan agudo como la voz del abuelo Louis, el hermoso piano bañado en un infinito negro casi tan oscuro como la noche, la pequeña plantita que se encontraba encima de este, justo a un lado de una foto del abuelo Louis enseñándole a tocar el piano al abuelo Harry.
Estar en casa de los abuelos era respirar aire fresco, era estar en contacto con la naturaleza, relajarte y alejarte de la mala vibra que la ciudad traía. Era sentirse limpio, sentirse vivo.
Cuando el abuelo Louis enfermo, el abuelo Harry decidió entonces que era tiempo de dejar su monótona vida en la ciudad y cambiarla por una sencilla y pacifica vida de campo.
El abuelo Harry en su juventud era hermoso, no hay algo más que los describiera.
Tenía unos larguísimos rulos color chocolate, que incluso a un diabético se le antojarían. En su rostro había unos grandes ojos casi tan verdes como su jardín, unos labios muy rosados que le ayudaban bastante con esa gran sonrisa que alegraba a cualquiera, unos hoyuelos tan preciosos que solo querías pasar horas besando, el abuelo Hazza era un querubín en aquellos tiempos, siempre había sido un hombre de campo. Amaba las plantas y a los animales.
El tío Liam solía hacer chistes sobre que por eso había elegido al abuelo Louis, porque él era un animal.
Mamá también dice que el abuelo Harry era bastante cuidadoso con todo, cuidaba a sus plantas tan bien que mamá a veces se sentía celosa de ellas, pero sin duda alguna de quien más sentía celos era de Boo bear, porque Harry siempre estaba muy al pendiente de lo que su esposo hacia y cuidaba muy bien cada paso que daba.
Una vez, Niall, el hermanastro de Harry dijo que incluso una vez en un Domingo cuando salieron y había caído una lluvia, habiéndose formado los charcos, el abuelo Harry se quito la chaqueta para ponerla sobre un charco y asi los zapatos de correr favoritos del abuelo Louis no se dañarían.
Hazza Bear era ahora un hombre que a sus 65 años seguía riendo a enormes carcajadas todo el tiempo, aun que ya no tenía tanta fuerza como antes, sus hoyuelos aun se marcan tan tiernamente y son besados a cada hora por un pequeño hombre gracioso.
Se pasa las mañanas limpiando su jardín y cuidando a su esposo, las tardes preparando un sazonado almuerzo y tocándole viejas canciones de Queen en el piano a su esposo, en las noches mira el televisor mientras le grita siempre al equipo contrario al que su viejo hombre apoya solo para verlo ponerse rojo hasta las canas, justo a la hora de dormir le da un tierno beso a su esposo mientras duerme abrazándolo por la espalda, contándole una tierna historia de dos pequeños ositos que se enamoraron durante una guerra y como su amor pudo seguir luchando incluso después de sobrevivir a la guerra.
El abuelo Louis ha sido siempre un payaso.

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SHMILY | Larry Stylinson AU
Fiksi PenggemarShmily aparecía en el jardín. Shmily aparecía en la cocina. Shmily era la palabra favorita de Darcy. Shmily era el juego de sus abuelos. Obra protegida bajo el código 1501213055492 por SafeCreative. Créditos de la portada a quien corresponda.