- Estaba nervioso, muy nervioso ya que nunca había echo esto con alguien, el irme lejos, dejar todo y comenzar de 0, estaba ansioso por llegar pero preocupaciones inundaron mi cabeza.
- ¿Qué haremos llegando? ¿Dónde dormiremos? Realmente estaba preocupado, pero se que al lado de mi León no pasara nada, juntos sabremos que hacer, tomamos el primer vuelo a Paris y antes de abordar quise hacer algo por Jean, ya que el siempre hace todo por mi, hace que no me preocupe, y ahora quiero hacer eso por el, deje a Jean haciendo cheking y yo me dirigí a comprar algo de comida y algo mas para hacerle una pequeña broma al Sr. Jean. estaba emocionado, llegue al lugar y compre brownies y algunas cosas mas en ella unos condones ex grandes, la señorita del lugar me miro raro pero me daba igual, pague y me dirigí a donde se encontraba mi Sr esposo, me pare frente a el escondiendo las cosa.
- Libardo:
- Amor, traje unas cosas para ti, quise hacer algo por ti, se que es algo tarde y quise comprarte esto.- Estire mi mano con la bolsa y este se puso a reír, lo primero que vio fueron los condones, y este me dijo.
- Jean:
- Quieres usarlos ahora? .- Dijo sacando los condones y mostrarlos a todo el mundo, quien termino apenado fui yo.
- Libardo:
- Se suponía que la broma era para ti.- Dije con un puchero, para así ser correspondido con un beso.
- Jean:
- ¿Tienes miedo?.- Me pregunto, el sabia que estaba nervioso.
- Libardo:
- Si, lo estoy pero a tu lado, juntos se que nada estará mal, te amo. Dije con mucha ilusión.
- Jean:
- Y yo se que a tu lado no tendré miedo, eres mi complemento y mi todo, jamás te dejaría, jamás dejaría que pasara algo malo y mucho menos a ti mi amor.
- Han pasado varios años y aun mi corazón se siente débil cuando dice esas coas, no se si llegara algún día en el que pueda no sentirse así, lo amor y ese amor es correspondido, realmente estoy agradecido por eso, mi alma, mi corazón solo lo desean a el en todos los sentíos, me a mostrado que no importa donde nos encontramos nuestro amor perdurara por siempre.
- Narradora:
- Estos dos enamorados pasaron el tiempo dándose pequeños besitos y dándose amor como lo hace desde hace años, el amor que se daban era mas grande y no hay manera de explicarlo, es como si una flor jamás se marchitara, Libardo y Jean habían encontrado el amor perfecto en el lugar indicado, en su historia de amor pasaron muchas cosas t esta no iba a ser la excepción ya que nuevo amigos llegarían a su vida, y después de tiempo estos por primera vez sentirían celos de alguien mas, pero eso acabaría su amor? No, no lo haría ya que no importa donde se encuentran o quien los quiera separar el amor de ellos es inquebrantable y algo que ni la muerte los separaría. Estos abordaron y el avión que tomaron por segunda vez era el mismo que tomaron para ir a su luna de miel, ese avión donde pasaron tantas cosas que a Jean le paso por la cabeza de usar esos condones que Libardo le había comprado, pero después de ver esa tierna y hermosa imagen de su bebe deseo no moverlo, estaba dormido, su respiración era lenta y tranquila como si del el mar se tratara, sus ojitos cerrados y su boca dulce y suave se encontraba con un leve puchero, Jean se acerco a el y le dejo un pequeño beso haciendo que este se moviera un poco para así atraerlo a sus brazos y acurrucarse en el pecho del menor, el pequeño deseaba ese calor ese calor que por años lo a acurrucado, esa sinfonía de latidos que con años inundaba sus oídos, el menor abrió sus ojos y los ojos del menor se encontraban con los del mayor haciendo que sus universos se volvieran uno, y su corazón tuviese una vez mas esa explosión de sentimientos, el menor tomo la mejilla del mayor haciendo que la piel del mayor se erizara ante ese toque, le menor dejo un beso que el sabor a deseo, a necesidad de su mayor, el mayor tomo a Libardo llevando su cuerpo al regazo del el y este comenzo a satisfacer cada parte del menor, los suaves toques del mayor saciaban todo ese deseo del menor, estaba claro que solo Jean podía hacer eso en el cuerpo del menor.
- Sus manos hacían explotar la cabeza del menor, deseando mas el menor comenzo a moverse un vaivén entre sus piernas para así recibir de respuesta un jadeo leve del mayor, Libardo cada vez que lo hacían algo pasaba en su corazón, en su alma que no podía explicar y solo era ante el, esta no era la excepción. Sus manos hablaron por el, tomo el mentón del mayor y así provoco al mayor dando un beso diferente a todo lo que había echo antes, acerco sus labios a los del mayor y este en vez de dejar un beso por completo dejo su lengua, la punta de su lengua hizo un camino por todos sus labios dejando un camino de saliva por los labios del mayor, para al final dejar un beso demasiado provocador, beso que hizo que la respiración del mayor se volviera loca, el mayor haciéndolo bruscamente dejo a Libardo entre los dos asientos para después romper los pantalones del menor, el menor solo rio demasiado excitado, era una sonrisa tan provocadora que eran la locura misma, el mayor siguió con la playera del menor, la rompió por mitad y este solo la tiro por el avión sin darle importancia, este se dirigió a los pezones del menor y lo provoco de la misma manera que el menor lo que había echo, saco su legua y la dejo en el pezón para así después dar pequeños circulos, circulos que iban lentamente al compás de sus gemidos, después paso al otro haciendo lo mismo, Libardo lo paro y lo tiro al asiento para así después subirse a el y ponerse de espalda y empezar a dar brinquitos en la entrepierna del mayor, el mayor tomo la cintura del menor y la acerco mas hacia el haciendo que su entrepierna y el hermoso trasero del menor chocaran aun mas, el menor se levanto para quitar el pantalón del mayor y así arrojarlo lejos de ellos, este sin mas volvió a montarse de la misma manera y sin pensarlo tomo el miembro del mayor y así sin preparase lo metió y comenzo a gemir tan alto que tenían miedo de ser descubiertos, Libardo con la fuerza que le quedaba tapo un poco su boca y comenzo a brincar, Jean tomo la cintura del menor para así hacer que su miembro entrara aun mas y así chocar con el punto dulce del menor, cada gemido demostraba que aun Jean hacia explotar la locura de Libardo y Libardo la locura de Jean, su historia era mas que sexo, era amor, amor que ellos tampoco saben explicar.
- Jean tomo la cintura del menor con fuerza para así ponerlo en cuatro y tomar su trasero con fuerza y seguir con ese vaivén que les hacia explotar la cabeza. Jean estaba a punto de venirse y este paro, tomo a Libardo y lo tomo entre sus manos para así cargarlo y volver a penetrarlo, adrenalina era lo que ellos sentía, adrenalina, excitación, deseo, Jean dio fuertes embestidas y toco fuerte el punto dulce de su bebe, este se vino y seguido Jean mostrando que aun quería mas siguió, siguió penetrándolo y Libardo simplemente deseaba lo mismo que el mayor, estar juntos era lo único que importaba por segunda vez terminaron, pero esta vez Jean dejo al menor y este se vino en la cara del menor, la escena para Jean era tan excitante in linda que tomo un poco de su semen y lo llevo a la boca del menor, el menor dudaba ya que antes no lo había probado pero lo hizo y este solo lo trago sorprendido ya que era dulce, dulce con sabor a fresa, estaba confundido, pensó que era el cansancio, pero cuando vio a Jean probarlo se volvió loco y se lanzo de nuevo a el estos tuvieron una, tercera y cuarta ronda, estaban tan cansado pero el deseo los consumía, cuando menos pensaron ya era ahora de aterrizar y estos se prometieron seguir cuando llegaran al destino, y aquí es donde comienza todo, donde esta historia apenas comienza y tendrá un final.
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(Perdón por tardar, apenas llego la Luz y no sabia como publicar, pero aquí esta el capitulo, espero les guste, extrañaba escribir, los quiero.)
