Hello, Bro.

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" Todos aquellas familias quienes tengan un integrante para que se ofrezca a la milicia es bienvenida"

Eso le han dicho al jóven Dave Strider, hace ya 8 años. Todavía lo recordamos, todavía él lo recuerda. Bombardeos, ruidos de ambulancias y coches, tanques y camionetas militares. Bro tomaba la mano del pequeño Dave, de 11 años.

- ¿Bro, a dónde vamos? - Dijo el jóven Dave, extrañado. Bro le sonrió.

- Eso no importa ahora, pequeño hermano. -

Ambos entraron a una gran carpa, seguida de una no muy extensa fila. Esperaron hasta que tocó su turno. Se pararon frente a un escritorio y un hombre vestido de ropas de la milicia.

- Nombre entero y edad - Dijo éste, seriamente mientras tomaba un bolígrafo.

- Dirk Strider, 30 años. - Dijo Bro.

- Quítese las gafas y la gorra, déjelas encima del escritorio y llene este formulario. -

Tal como le había dicho, Bro se quitó ambas cosas y las apoyó donde le indicaron. Mientras él llenaba la hoja de datos, Dave apretó la blanca camisa de Bro con sus pequeñas manos, y lo miró, inseguro. Cuando el muchacho termina el formulario, toma sus cosas y le agradece al hombre, tomando la mano de Dave y llevándolo de vuelta a casa.

Un par de días luego, una gran camioneta de la milicia, con muchas personas al parecer recién reclutadas, paró frente a la casa de los Striders. Bro se levantó del sofá y subió a su cuarto. Al cabo de un rato bajó, vestido igual que el hombre de la carpa días antes. Dave se acercó hasta él, y lo miró.

- ¿Bro?, ¿A dónde vas..? -

Bro se agachó hasta la altura de Dave, se quitó la gorra y las gafas, y se las dió.

- Escucha pequeño.... Debo irme por un tiempo.. -

Dave todavía recuerda la mueca que puso al oír eso. Abrió los ojos como platos y se le empañaron los ojos.

- ¡¿QUÉ, A DÓNDE TE IRÁS?! ¡¡YO IRÉ CONTIGO!! - Dijo, gritando.

- No... No puedes venir Dave... Debes quedarte aquí. - Dijo Bro, alternando las cejas, frustrándose.

- ¡PERO....! ¿P-Porqué no puedo? - Contestó Dave, a quién se le caían unas cuantas lágrimas.

- Escúchame... Tú sabes en qué situación estamos y me obligan a colaborar.... No tengo a nadie con quién dejarte, por lo que te he dejado suficiente provisión de comida para que no tengas que salir a la calle... Así que sólo te pido un único favor. - Dijo Bro, acercándose al pequeño.

- Tan sólo prométeme que te cuidarás.. Y que no saldrás de casa y que... Me esperarás. - A Bro se le cayó una lágrima, mientras Dave no sabía que decir.

Bro sonrió y le susurró "Te amo Dave, cuídate pequeño". Besó su frente acariciando su cabello y se levantó, dirijiéndose a la puerta. El pequeño reaccionó entre lágrimas y corrió hasta su hermano mayor, apretando su ropa, ocultando su rostro en él.

- ¡NO TE VAYAS, POR FAVOR! - Gritó, desesperado.

El mayor sólo pudo acariciar su cabeza, y le dió una última sonrisa, antes de sollozar y cerrar la puerta, dirigiéndose hasta la camioneta. Dave sólo se arrodilló frente a la puerta, apretando la gorra y las gafas, llorando sobre ellas.

Eso es lo último que Dave recuerda sobre su hermano. Él ahora tiene 19 años, y se ha podido cuidar muy bien desde que Bro se fué. Hoy Dave mira las noticias, mientras se sirve una taza de café, y casi lo escupe, al oír lo último.

" La guerra ha podido calmarse actualmente, y ya no hay riesgos de bombardeos ni ataques. Hoy por fin nuestros compañeros que hace 8 se han ido a la guerra, podrán regresar con sus familias, y volver a estar en paz."

Al instante que ésto termina, Dave oye el timbre, y salta del sofá corriendo hasta la puerta. Ilusionadísimo, la abre con brazos abiertos, esperando a su hermano. Pero no es él, sino un militar.

- Perdona... ¿Dave Strider? -

Dave asiente. El militar se quita la boina y baja su brazo.

- Lo siento mucho, el soldado Strider forma parte de nuestra lista de desaparecidos.-

La sonrisa del jóven se marchita, y sus ojos se abren enormemente, empañándose. Suelta la puerta, dejando caer su brazo como un pedazo de trapo inservible. El oficial se percata y vuelve a dar sus pésames, mientras cierra la puerta por el chico. Dave cae al suelo, arrodillado. Comienza a llorar, y golpea el suelo con los puños fuertemente, maldiciendo. Él sabe que no sirve de nada, él piensa que no sirve de nada.

Varios días luego, Dave vuelve a estar sentado en el sofá, con las gafas de su hermano en la mano. Tiene unas ojeras que le llegan casi hasta la mejilla, y los ojos rojos de tanto llorar. Acaricia con el pulgar el lente de las gafas, y suelta lágrimas sobre ésta. Se alarma y levanta la cabeza al oír el ruido de la puerta principal abriéndose. Salta nuevamente del sofá y corre hasta ésta, pero se detiene, helado.

- Hola, Dave.... -

Bro saluda a su hermanito. Está todo manchado y herido, con un gran manchón de sangre en la cara. Lleva el pelo semi rapado y un poco más de barba. Dave lo mira, con los ojos enormes de abiertos, inmediatamente unas lágrimas ruedan por éstos.

- B-Bro.... -

El jóven sonríe, y corre hasta su hermano, quien sonrie también. Ambos se abrazan; Dave abraza fuertemente su espalda, apretando los puños en la ropa, mientras llora en su pecho. Bro acaricia su cabello, riendo entre lágrimas.

- Te extrañé mucho.. - Se escucha al unísono.

-Bueno, eso fué todo, ojalá les haya gustado este One Shot, que hice a media madrugada e_e LOL, bueno, lloren y comenten <3 -

Hello, Bro... [OneShot][Sadstuck UA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora