Tomé un respiro como si recién saliera de una piscina en la que me ahogaba, abrí los ojos para encontrarme con que estaba recostada en el suelo sobre una peluda alfombra que no era mía.
Las imágenes del ayer me atacaron después de ver las latas de cerveza vacías sobre la mesa de centro.Quité la mantita que tenía sobre mí para levantarme pero una mano cayó en mi cara, rápidamente me senté después del golpe y vi a Lee Dongwook dormido en el sofá.
- Condenado sinvergüenza... - murmuré aún con la voz ronca debido a que recién despertaba.
Después de ponerme de pie tomé la manta que me tapaba y usarla para cubrir al despeinado hombre que dormía en el sofá. Junté la basura para deshacerme de ella en el cubo de la cocina, entonces aproveché para servirme un gran vaso de agua.
La noche anterior después de hablarle a Dongwook sobre cómo llegó Ahn Soo a mi vida -y a pesar de la hora- ordenamos algo de comida picante para pasar el mal sabor de boca que lo revelado en el momento dejó, mientras esperábamos a qué nuestro pedido llegara él sacó del refrigerador algunas latas de cerveza.
Comíamos, bebíamos y reíamos como si la tragedia no se hubiera asomado, recordar sus malos chistes me hizo sonreír pero lo que ocasionó que una risita se me escapara fue la pelea de cocines que tuvimos por ver quién dormiría en el sofá a pesar de que él tenía su propia cama en el piso de arriba así como la cama de la habitación de invitados.
- Buenos días.
El repentino saludó me espantó.
- Buenos días - respondí mientras llenaba otra vaso para después dárselo. Él lo recibió.
- ¿Cómo dormiste? - preguntó después de beber el líquido.
- Bien, tu alfombra es más cómoda de lo que parece - bromeé - ¿Y tú?
- Me gustaría decir lo mismo - respondió con un rostro muy serio. Mi estómago por alguna razón se estremeció - Roncas mucha.
Mi quijada se abrió y Dongwook rió.
- ¡Yo no ronco! ¡Es imposible que eso pase! - me defendí.
Llevó una mano a su pecho no sin antes apartar algunos mechones de cabello de su frente y entonces imitó ser alguien indignado.
- ¿Me estás llamando mentiroso?
- ¿Me estás diciendo que soy ruidosa?
Ambos guardamos silencio mientras nos mirábamos fijamente a los ojos sin parpadear, esto se había convertido en una competencia de quién duraba más sin cerrar los ojos, algo que solíamos hacer.
Mis ojos comenzaban a arder y él comenzaba a derramar lágrimas pero entonces sucedió, hizo trampa, sopló en mi cara haciendo que parpadeara.
- ¡Gané! - proclamó alzando las manos como un boxeador después de una dura pelea.
ESTÁS LEYENDO
La Damisela en Apuros Necesita un Caballero | Lee Dong Wook | Lectora [PAUSADA]
FanfictionEs imposible creer que cambios tan drásticos se den de la noche a la mañana... En menos de un minuto... En menos de un abrir y cerrar de ojos... Cuando pensé que al fin mi vida comenzaba a tomar un rumbo mejor al que tenía, la desgracia aterriza com...