Cuando el miedo quiso conquistarme y hacerme menos,
le puse frenos recobrando así mi aliento.
Aunque haya personas que quieran derribarme,
no podrán porque conmigo hay un gigante.
Es quien nunca me abandona y siempre está presente,
muy latente dentro de mi corazón, sí, le conoces; es mi Señor.
Hay palabras que hieren o matan y otras que brindan amor,
no podemos seguir apegados a un gran dolor.
Muchas veces llega el llanto, pero no encontramos como calmarlo,
o a donde correr para aliviarlo.
En ese estado es muy fácil que nos falle, hasta nuestro propio corazón,
levanta la frente saldrás de ésta, una puerta abierta te espera.
Nadie me detendrá, aunque me quieran derribar,
surgiré con más fuerzas y ganas de avanzar.
ESTÁS LEYENDO
Palabras que cobran vida #KAS2020
PoesíaLa poesía es el arte, de lo que transmite nuestro corazón, por medio de palabras y versos.
