Llegué a casa tirando la puerta y las llaves las deje por algún lugar
- Hey Mateo que te pasa? No vuelvas a llegar así- me retó mi vieja saliendo de la cocina
- No estoy para boludeces - dije para subir a mi habitación
Deje el casco en el sofa y fui a sentarme al final de la cama
- Mateo? - giré un poco al escucharla con la voz dormida
- Lo siento si te desperte- dije girando para verla mejor
- No te preocupes...vení aquí dale - dijo estirando su mano, la tomé acostandome con ella
- Porque estás tan enojado, contame - murmuró pasando sus delgados brazos por mi torso
- Nada mambos míos no te preocupes amor - dijo tomando su mentón para besarla
Y sentí como la calma y la paz volvían a mí
A veces me sorprendía y me aterraba el poder que tenía Sofía en mí porque a veces hasta el que más te quiere te puede fallar y que haría con todo lo que siento por ella
- Podes contarme y lo sabes - susurró a centímetros de mi boca
- Lo sé pero no es nada enserio- dije para abrazarla mas a mí
Se separo de mí repentinamente, la miré mal
- Que haces? Dale veni aquí- dije para tomar su brazo pero ella me quito levantándose de la cama
- Tengo algo para vos - dijo sonriendo como una nena acercándose a su mochila
Pase un bazo por detrás de mi cabeza viendo como revolvía todo
- Lo encontré- dijo levantando una bolsita de papel
Sonreí palmeando al lado de la cama
- Que tenes ahí - pregunté sonriendo sentandome
- Ayer fui con Lucas a comprar algo para Lu y dije porque no- dijo abriendo la bolsa con cuidado
Me quedé en silencio viendo como de la bolsa sacaba dos cadenas, reí enternecido
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(Ignoren lo que esta grabado, solo era para que se den una idea. Me gusta que ustedes vean lo que yo imagino)
- No te tendría que regalar algo yo a vos - dije divertido sabiendo que la joderia
- Ay esos pensamientos machistas tuyos- dijo rodando los ojos
Tomé sus mejillas apretandolas para besarla
- Mira está es tuya- dijo tendiendome la de la correa mas gruesa
La miré divertida estirando mi brazo, rió tomándolo para cerrarla
Le puse la suya con extremo cuidado a veces era muy torpe
- No te vayas de mi lado nunca Mateo- dijo mirándome directamente
- Y así querés que no te coma la boca- dije para acercarla a mi
- Hey no me lo prometiste - dijo separándose de mí
Reí para entrelazar nuestros dedos
- Te lo prometo mi amor- hablé besandola - Te amo
- Yo también y no nos vamos a separar nunca- dijo riendo para tirarse sobre mi haciendo que mi espalda vuelva a chocar con la cama
Cruzó sus brazos sobre mi pecho dejando su carita sobre estos
Baje mis manos hasta llegar a su orto para dejarlas ahí acariciandolo con las yema de mis dedos
- Que tanto me miras- murmuré divertido
- Nada solo pensaba cosas- rió negando
- Que pensas contame- insistí
- Vos no ves en un futuro? - preguntó con las mejillas rosadas
- Con vos?
- Y si estupido con quien mas si no - dijo rodando los ojos, me encantaba joderla
- No te enojes...y si quiero todo con vos mi amor- dije acariciando sus mejillas - vos como nos ves?
- Mmm no sé con hijos - dijo con una sonrisa gigante
- Con hijos enserio? - pregunté algo asombrado
- Si no lo sé- dijo algo nerviosa- con dos...no no con tres hijos - dijo alegre
Eran estos momentos que me llenaba
- También quiero - dije acercandome a ella para besarla
La amaba gente no había vuelta atrás
- Tengo mucho sueño todavía- dijo escondiéndose en mi cuello
- Vamos a dormir entonces - dije para hacerla dar vuelta haciendo que ella se acostara en la cama
Me levanté quitando mi remera para acostarme al lado suyo pegando mi cara a su pecho
- Haceme mimos - murmuré para escuchar su risa
- Sos cruce con perro vos - dijo divertida
Levanté mi rostro viéndola mal
Me lanzó un beso para volver a ponerme en su pecho y esta vez si acariciarme el pelo
