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- Hay que conocernos. - digo y Roberto se sorprende.

°R°C°G°

- Hay que conocernos. - dijo y me sorprendo.

- Y que quieres saber de mi?- pregunte.

- Que edad tienes?- pregunta.

- 23, y tu?

- 21, y me llamo Dennis.

- Roberto alias "Romero" según tu. - rio al recordar como me llamo.

- Perdón no soy buena con los nombres. - dijo algo avergonzada.

- Tienes hermanos? - pregunte.

- No y tu?

- Dos, que estudias?

- Para cirujana pediátrica, y tu?

- Es interesante lo que estudias, yo ya termine mis estudios. - intente evadir el tema, no quería darle pena solo por que no los acabe.

De la nada se formo un silencio incomodo, no sabia que preguntar, era tan incomodo que creo que estoy sudando frio.

* * *

No se en que momento pasamos de contar malos chistes a contar toda la historia de nuestra vida, sin darnos cuenta ya era de noche y no podía ya retirarme así que decidí pasar la noche aquí.

- Gracias por quedarte.

- No es nada.

- No enserio gracias, los demás se hubieran ido dejándome sola aquí.

- No tiene sentido, eres una persona increíble y agradable, yo no me alejaría de ti.

- Gracias, igual eres increíble y me agradas.

Seguimos hablando de lo mismo y riendo, hasta que una enfermera vino a callarnos porque no dejábamos dormir a los demás pacientes.

- Buenas noches Dennis.

- Igual Roberto.

* * *

- Te daremos el alta en dos días si sigues reaccionando bien a los medicamentos. - dijo el doctor.

- Gracias doc. - dijo y el doctor salió del cuarto. - Tu ve a tu casa, te veo mañana. - me ordeno Dennis.

°D°J°C°

Me siento muy aburrida desde que Roberto se fue, me siento muy sola, sonara muy raro ya que solo a pasado una hora desde que se fue pero. Lo extraño.

* * *

Hoy me dan el alta, estoy muy emocionada.

- Bien firma esto y toma la cuenta. - dijo la recepcionista.

Firme y entrego mis cosas, no se como pagare pero...

- Tome. - Roberto le extendió un sobre el cual la secretaria acepto gustosa.

- No era necesario, yo te lo devuelvo.

- No hace falta.

* * *

Pasamos por un parque, caminamos, platicábamos y reíamos, los dos estábamos tan chistosos que creo que nuestras risas se oían hasta china.

- Esto es increíble, - digo.

- Si lo es. - dijo y por alguna razón me sonroje.

No se en que momento comenzamos a mirarnos, el tenia un brillo en sus ojos, que pueden ser cabases de hipnotizar, miraba sus facciones detalladamente a simple vista es lindo pero si lo ves detalladamente es hermoso. De repasar todas sus facciones, vi sus labios hermosos son perfectos, me dan unas ganas increíbles de besarlo.

Y así fue lo bese, el no me rechazo si no que me correspondió, era de lo mas increíble esta sensación que jamás sentí, sabia que a nuestro alrededor había gente pero me importo un bledo.

Si no fuera porque necesitamos oxigeno para vivir seguiríamos besándonos, pero poco a poco nos fuimos separando, ahora este sabor que me dejo era mi favorito, era como mi nueva droga.

- Lo mejor será que te callas a casa. - dijo después de un tiempo de estar viéndonos.

- Puedes acompañarme? - pregunte temerosa.

°R°C°G°

- Te acompaño no te preocupes. - dije y pedimos un taxi.

En todo el camino a casa de Dennis, fue silencioso pero no un silencio incomodo sino uno agradable.

- Llegamos. - anuncio el taxista y me percato de que es el barrio donde estuve la semana pasada, y justo enfrente de

Esa no puede ser su casa debe ser una equivocación, no puede ser debe ser un error.

- Va a bajar o lo llevo a algún otro lado. - pregunta el chofer.

- No - digo. - Nos vemos Dennis. - me despedí desde el auto, Dennis se veía mas que confundida y con cierta decepción pero lo que mas resalta en su mirada es tristeza.

Esto podría ser un para siempre no lo se, será cosa del destino si quiere que nos volvamos a encontrar, no puedo dar la cara donde robe menos si es a una persona que quise demasiado en tan poco tiempo.

ROMEO Y JULIETA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora