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Sus iris verdosos estaban iluminados por un brillo especial. Un brillo casi inexplicable, eran demasiadas emociones juntas tras el espejo de sus ojos. Esa mirada mostraba la adrenalina de mirar el regalo en navidad y saber que todavía no podes abrirlo sin el permiso de tus padres o cuando faltan solo cinco minutos para terminar el año educativo y reloj marca el tiempo más lento de tu vida.

De la nada sonrió. Era la cosa más hermosa de mi ojos pudieron haber captado, sus labios tenían la forma perfecta para chuparlos, lamerlos y hasta morderlos, sus dientes tenían el orden perfecto y eran más blanco que piso de sanatorio.

¿Diosito por qué lo hiciste tan perfecto?

― ¿Por qué me miras tanto? ― pregunté y un el sonido muy placentero ahogo mis odios, su carcajada, logrando formular un hoyuelo en su mejilla derecho debajo del lunar más sexy del planeta. Tranquilamente podría volcar un cappuccino sin objeciones sobre ese pequeño surco muscular derecho, serie una buena manera de que tome café y sobretodo disfrutarlo.

― Es lindo mirarte, me gusta mirarte Lali. ― mis ovarios tocaron la vereda porteña y mi nerviosismo se mostro más evidente que hace dos segundos.
Se corrió al costado abriéndome la puerta del auto ― Lo cortés no quita lo valiente. ― caballero, lindo, inteligente y seguramente un semental en la cama.

¿Acaso todas mis plegarias fueron escuchadas? ¿Qué hice para encontrarte Juan Pedro?

Ya dentro del costoso móvil de cuatro ruedas nos dirigimos hacia "Sussex" un lujoso y extremamente exclusivo restaurant de Palermo Hollywood.

Por suerte el me invito porque si de mí dependiera lo hubiera llevado Baco's, una parrilla en la cual pagando quinientos pesos hay tenedor y canilla libre toda la noche hasta banda en vivo y todo. Nada que un buen asado bien argentino no pueda solucionar y de frutillita de poste la parilla tenía su locación en Ramos Mejía. Si la cosa terminaba saliendo mal solo estaba a diez minutos de mi casa. Un plan excelente pero demasiado menesteroso para alguien como el niño Hollywood.

La música sacada del parlante me devolvió a la realidad sin chorizos, vacios y con sushi y caviar. High Hopes de Panic! At The Disco, una canción que pegaba perfecta para la ocasión.

Had to have high
High hopes for a living
Shooting for the stars
When I couldn't make a killing

Hablaba de las metas que tiene uno por cumplir y desgraciadamente el dinero no le alcanzaba para lograrlas, hablaba del destino y hizo acordar a lo que me dijo hoy el tío Tito, todos tenemos un misión en el mundo.

― ¿Crees en el destino? ― enfoque mi vista en su perfil, tenía su brazo izquierdo sobre el volante y el derecho en la palanca de cambio, sus pronunciados bíceps estaban a más no poder de la camisa. Al parecer el ojiverde tiene una vida fitness bastante activa.

― Depende de que tan buenas sean las obras del destino.

― ¿No pensas que todos venimos al mundo para algo? ¿Qué tenemos algo por hacer y cuando nuestro trabajo este hecho partimos?. En el Máximo Esplendor dijiste "mi trabajo para la humanidad es hacer que la felicidad sea soportable y dolor efímero" creo que eso habla de la capacidad de amar de las personas, mientras más amor haya menos dolor habrá. Nuestra misión seguramente tendrá que ver con el amor o la felicidad...

― Lo único que va a salvar al mundo es el amor. Sea cual sea el destino sin amor no somos nada. ― sus palabras llegaron a lo más profundo de mi alma dejando miles de preguntas.

Llegamos a Sussex, el lugar tenía una ambientación dorada y negra, grandes candelabros decoraban los techos y la gente se vestía mas de gala que para un simple cena.

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⏰ Última actualización: Nov 03, 2020 ⏰

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