CAP IX: Sueños Y Señales (+18)

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PoV Tn

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PoV Tn

Después de terminar con ese mágico momento, nos fuimos a sentar al sofá y vimos una película de terror, por la época. Creo que hice el ridículo en más de una ocasión porque él no dejaba de reír. Pero no le dije nada... Ya me la cobraré, ya me la cobraré.
Cuando terminó la película nos fuimos a dormir; se despidió de mi con un beso en la frente, así que para no quedarme atrás le di otro fuerte abrazo.
Dormí muy tranquila, pero mis sueños no fueron precisamente iguales:

Abrí los ojos en un bosque de cerezos, todo se veía muy hermoso. Me tiré al suelo para rodar entre los pétalos y contemplar la vista desde abajo. Escuché una voz que me llamaba:

~(Tn), ven a mí. Tú me necesitas y yo a ti.

~¿Quién eres?

~¿No me reconoces? A pesar de que he estado contigo toda la vida.

~¿Dónde estás? (Se levanta) ¡Muéstrate!

~Pero si ya me estás viendo (Aparece una mujer encapuchada).

~¿Quién eres? (Le recorre un escalofrío).

~Tú (Se quita la capucha)

La luna llena aparece inmediatamente detrás de la mujer que se quitó la capucha: Era una mujer parecida a mi físicamente, pero su aura era diferente; irradiaba una belleza increíble y su rostro era más fino que el mío.

~¿Por qué? ¡Responde quién eres!

~¿No lo entiendes? Esto es lo que eres realmente. Ahora pon atención.

~¿Qué quieres de mí?

~Despierta lo que llevas dentro, y no permitas que la serpiente se lo lleve.

~¿Serpiente? ¿De qué hablas?

~Cuídate de la serpiente, (Tn).

De pronto los árboles se secaron, la luna desapareció dejando todo a oscuras y comenzó un gran temblor, el cual dejó salir volando a una horrible criatura que estaba debajo de mis pies. Estuve a punto de ser tragada por el animal, el cual, al observarlo bien, caí de cuenta de que era una enorme serpiente blanca.

Cuando iba a ser tragada, algo me sujetó y evitó mi fin; me sentí volando y vi que estaba montada sobre un ave de colores rojizos y azules. Me llevó hasta un templo en una montaña, bajé de ella y me di cuenta de que era un Suzaku. La criatura me guió hasta un jardín con piedras en el piso que tenían símbolos que no reconocí, a excepción de uno: El kanji japonés que significa "fuego". Inmediatamente el Suzaku voló alrededor de mí, liberando un fuego de tonos celestes. Volteé a ver a todas partes pero sólo pude ver hacia arriba; contemplé la gigante luna que estaba sobre mí, hinoptizándome con su brillo de plata. Dejé de sentir el calor de las llamas y, por un momento, las vi danzar a mi voluntad, imaginé como que se apagaban y así lo hicieron. Volví a ver la luna, para luego... Despertar.

Escape de la realidad (Kakashi x Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora