Sinner (¡Especial Sahyo halloween!)

4.

Con la ayuda del grupo comenzaron a ordenar todo, dejando unos sillones en el centro de la sala de manera circular, sería la manera en que se sentarían para comenzar con la primera noche de noviembre, que aun despues de halloween, seguía siendo algo de lo cual podrían contar anecdotas tenebrosas

—Chae, ¿A dónde fue mina?—La pregunta de momo la asustó

—Mina se enfadó conmigo por unas cosas...dijo que no quería verme, mañana trataré de hablar con ella— Con un tono triste, se colocó al lado de ella y dahyun

Tzuyu finalmente podía quitarse los cuernos que llevaba su disfraz, al igual que dahyun se había quitado la mascara del genio, su cuerpo seguía siendo azul, pero al menos se podía ver con claridad su rostro

—Bien, comenzaré yo, esta historia es de antes que me mudara de taiwan—Tzuyu tomó la iniciativa— Siempre pensé que la casa de mi abuela era un sitio embrujado, y me di cuenta de que era así ese día...— Sana miró a jihyo, esperando ver una expresión asustada, algo que no fue así

Jihyo se encontraba sobre su regazo, tzuyu continuaba contando, pero dahyun y chaeyoung sabían muy bien esa manera de interactuar no era propia de su amiga, no por lo menos con alguien que no conocía de antes

—Era una sombra, pero mas que una proyección parecía ser físico, tan real que creí que podría tocarlo si me acercaba lo suficiente, apenas lo intenté se desvaneció, y nunca supe de que se trataba, me prometí a mi misma nunca quedar sola en esa casa—

Ahora era el turno de chaeyoung, que con un poco mas de atrevimiento, iba a dar indirectas al respecto de su desconfianza hacia sana

—Conocí a una chica cuando estaba en natación, era realmente linda, su nombre era somi...Hasta cierto punto me llamó la atención, siempre hablaba con ella despues de practicar y todo, nunca me preguntaba porque no me daba respuestas claras al respecto de su vida despues de las practicas, siempre me salía con mentiras y me hizo sentir que era alguien falso...y si lo era—

Sana tenía sus ojos posados sobre chaeyoung, era la unica quee estaba captando lo que decía. Su historia era falsa despues de todo, pero no dejaba de ser interesante para quienes la oían

—Recordé esto, el entrenador siempre pasaba lista antes de comenzar, y somi llegaba muy tarde, nunca estaba a tiempo para que el resto supiera de ella. El día que llegó temprano...no la mencionaron—

—¿Q...que quieres decir?—Tartamudeó jihyo, provocando que sana la viera fijamente

—Nunca existió Jeon Somi, le preguntaba a todos sobre ella, pero nadie me dijo que la conocían, incluso le pedí al entrenador ver su lista, no estaba...—

Momo y tzuyu estaban riendose junto con yuta, la historia no les dio miedo

Momo era muy estupida para entenderla, así que se reía solo porque tzuyu le hacía gracia que se hubiese inventado una historia tan tonta, al igual que al japonés

—Es mi turno, una vez fui a casa de mina a hacer una tarea y me mostró su jardín, dijo que quería hacer tarea al aire libre y fue a buscar la mesa y las sillas, entonces vi a ese perro, un lindo perro paseándose por el jardín, su collar decía ray, así que supuse que era la mascota de mina por alguna razón—

—Ray era la mascota de mina, murió por los ataques de coyotes...—

—¡ERA MI HISTORIA! ¡¿QUIERES CALLARTE?!— Frustrada con chaeyoung, momo solo se llevó las risas de los demas al intentar contar una historia de terror, pero mas bien parecía estar robandole las ideas a su amiga

Aun así, la reacción sobre jihyo le dio algo de miedo, sabía que la historia era falsa, pero imaginarse que algo de ese estilo pasara en su vida real le daba muchos escalofríos, sana podía sentir su temor y con tan solo tocarla fue suficiente para calmarla

Jihyo no podía sentir que su temperatura bajaba y la de su compañera subía, una diferencia ligera pero notable

—Tiempo, es mi turno— Suspirando, dahyun pensó en lo que iba a decir—Era una tarde normal y corriente, esto sucedió en el halloween de hace dos años, Chewy, ¿Lo recuerdas?—

En ese momento ella notó como su amiga le guiñaba el ojo, para que siguiera el juego, si había alguien que confirmara la historia entonces el resto le creería

—Vimos a una bruja en su escoba, era luna llena— Respondió la taiwanesa

—A ver,¿ dahyun dice que era una tarde normal de halloween y tu que vieron una bruja en luna llena?—Juzgó yuta

—Ah..este..lo que pasa es que ese día la luna apareció mas temprano— Con una sonrisa, ambas afirmaban al mismo tiempo

—Oh, tiene sentido— De manera tonta, momo asentía con la cabeza— ¿Cómo era la bruja?—

—Pelo corto— Respondió tzuyu

—Ojos grandes— Siguió dahyun

—Tenía un flequillo—

—Y un perro marrón—

—Pelo corto...ojos grandes, flequillo, perro marrón...—Jihyo estuvo pensando mucho tiempo, sosteniendo las manos de sana—¡ESTÁN HABLANDO DE MOMO!—

Siendo demasiado lenta para entender, solo miró a dahyun y a tzuyu con ganas de ahorcarlas, mientras que yuta y jihyo se morían de risa al notar lo facil que era burlarse de ella

Sana solo tenía una sonrisa, estaba feliz de ver a la chica que tanto estuvo persiguiendo alegre o pasandola bien

Pero le desagradaban las razones por las cuales lo hacía

—Creo que sigo yo entonces...—Yuta tragó saliva— Esta si es una historia real, shotaro, el chico que estaba aquí, el es hijo de padres santeros—

—¿Santeros?— Todos se preguntaron al mismo tiempo, menos la japonesa

—Es una religión de áfrica, me imagino que conocen la brujería— Todos asintieron, interesados— La santería es lo contrario a ella, pero muchos de sus practicantes usan el poder que le concenden los santos para causar maldiciones o mal augurio, Shotaro me contó esto...—Nervioso, continuó

—Para poder entrar a un grupo de santeros te llevan a un río, encienden troncos y debes de pisarlos con tus pies descalzos, antes de eso te hacen beber una cosa que se supone hace que uno de la decena de santos que existen entre a tu cuerpo, si el está adentro, entonces eres imparable—

—Estás inventandote eso— Murmuró tzuyu, pero el rostro serio de yuta decía lo contrario

—El no recordaba nada de ese momento, no solo debía de pasar por los troncos, sino recibir incontables latigazos por la espalda hasta quedar totalmente marcado. Solo segundos despues sintió el dolor de todo lo que hizo...eleggua, eleggua era el nombre del espíritu que entró en su cuerpo—

—¿Y que pasó después?— Mas que asustados, todos tenían interés en saber como terminaba la historia

—Shotaro me contó que su familia no hace rituales malos, ellos tienen una fabrica de ceramica a las afueras de la ciudad, dice que su religión trae fortuna al negocio. No deja de ser perturbador lo que tuvo que hacer para poder entrar—

—Wow...—Murmuró jihyo, provocando que todos la vieran— ¿Qué sucede?—

—¿No contarás una historia?— Preguntó momo

—No...no tengo historias que contar, tal vez la manera en que Young K me hizo desprecio—

—¿Hizo que?— Dahyun y chaeyoung se encontraron mas extrañadas que el resto, ambas tenían sospechas desde que notaron a sana tan cercana a jihyo

—Si, Brian me contó que solo pensaba en buscar alguna chica con quien pasar la noche, pero jihyo es tan tranquila e inocente que nunca llevó a nada. Estaba tan enojado que nunca se detuvo de decir lo que tanto le disgustaba, aun si no la conocía casi— Dijo yuta, teniendo eso pre—grabado en la mente desde que cruzó miradas con sana

—Maldito perro...—Susurró tzuyu, siendo la primera en mostrar asco

—No me lo esperaba, Young K siempre se me hacía un chico amable, por lo menos siempre es así en la escuela— Momo se desconcertó. Pero la mirada triste de jihyo la obligó a cerrar la boca— Bien...falta alguien que debe contar su historia— Cambió de tema, fijándose en sana

—¿De verdad quieren que cuente algo? No voy a hacerme responsable de que no puedan dormir— Con esa confesión sintió que jihyo le daba un apretón en las manos mientras que cerraba los ojos, al parecer prefería dormirse y que ella contara su historia, pero la curiosidad la mataba y dejó uno de sus ojos abiertos

—Unnie...me da miedo— Unas palabras que alertaron aun mas al dubchaeng, jihyo ni siquiera le hablaba de manera tan formal a los de años superiores, porque siempre fue muy cercana a ellos, que estuviera siendo tan respetuosa con la prima de yuta era extraño

—Tranquila, tendrá un final feliz. Esta es la historia...de uno de los seres mas desafortunados de la historia— Eso sonaba mas deprimente que tenebroso— Ellos son espíritus muy fuertes, pero necesitan siempre a alguien con quien vivir, si no lo hacen a tiempo, mueren—

Jihyo miró fijamente a sana mientras contaba su historia—Es así se simple, necesitan encontrar a un mortal para poder aferrarse de su vida y mantenerse en el mundo terrenal, muchos de ellos no lo logran, sufren una lenta y dolorosa muerte, que solo es el comienzo de una eterna agonía en el infierno—

—¿Y porque necesitarían a un mortal para vivir?— Preguntó Tzuyu

—Fácil, ellos les dan la vida, parte de su alma...es casi como la mitad que necesitas para poder vivir, muchas veces pueden terminar matando para quedar solo con su mortal, matar a tantas personas como sea necesario, y que no tengan mas elección que estar juntos para siempre—

—¿Y los humanos son conscientes de que es lo que quieren?— Siguió la taiwanesa, mientras que todo el mundo estaba en silencio

—No, hasta que ellos se lo confiesan, pero cuando eso sucede...mas de una persona está muerta, eso provoca que se asuste tanto que no quiera estar. El miedo los invade, y mueren, mueren después de que el frío inunde su cuerpo, eso en caso de que no correspondan—

—Es triste, ¿Pero es solo esa historia?— Preguntó yuta, haciendo que sana negara con la cabeza

—La historia que quería contar tiene como protagonista a uno de ellos, pero no la contaré, tal vez no estén listos para oírla— Y con un gesto de decepción, le suplicaban a sana para que lo hiciera, pero cada "por favor" venía seguido de un "No, lo siento"

Los cuentos se detuvieron en ese instante, el bostezo de tzuyu dio fue contagiando a cada uno, yuta fue el primero en irse a dormir, seguido del resto, que al ser invitados permitió que se recostaran en algunas de las habitaciones que tenía el japonés

Todos a excepción de sana y jihyo. Que se quedaron en el circulo de sillones contando historias y tratando de conocerse mas a fondo, no se separaba de la japonesa, tenía una sensación tan extraña de describir que ni siquiera entendía las razones por la cuales no podía simplemente apartarse un segundo de ella

—Debería de decirte esto, ¿Sabes que tengo dos madres?— Con interés, sana ladeó la cabeza regalandole una sonrisa— Si, nací por parte de mi mamá nayeon—

—¿Cómo es posible eso? ¿Conoces a tu padre?—

—¡No!, ¿No conoces la inseminación artificial?— Sana parecía estar perdida en otro mundo, no comprendía de que le estaba hablando jihyo, pero hacía lo posible para entenderla— Mamá fue a un hospital, y la fecundaron, así de sencillo—

—¿Eso es posible?—

—Lo es, desde hace mucho tiempo, ¿No lo sabías?— Ella negó con la cabeza, sosteniendo a jihyo por los hombros

Aun si el frío de sana le diera tembladera, y que su temperatura corporal se fuera transmitiendo al cuerpo de ella, no podía simplemente alejarse en ningún momento, ¿Estaba encantada o realmente apreciaba mucho su presencia?—

La segunda opción era la mas acertada, porque incluso en el silencio donde solo se escuchaban grillos, y coyotes aullando por el vecindario, jihyo estaba tranquila, y sin sentir la necesidad de hablar para poder sentirse cómoda con ella

Cerró los ojos por unos segundos, sana dejó su mentón sobre la cabeza de ella y dio un suspiro, si tan solo supiera de quien recibía esos abrazos y cariños

El dubchaeng no podía dormir, y juntas en una habitación estaban confabulando en contra de sana

Y confabular es mejor dicho: Hablar mal de ella a sus espaldas sin tener nada claro

—No tiene nada de bueno, en verdad...—

—Y aun así, no entiendo que es lo que no me cuadra— Murmuró dahyun, teniendo una camisa ancha y pantalones de algodón que yuta le había prestado para dormir—¿Un fantasma?—

—Eso es absurdo—

Ambas se vieron mutuamente antes de hacer un gesto hacia la puerta, no querían pensar en cosas tan estúpidas, ¿Pero había alguna otra opción? Seguramente si, pero la intuición de chaeyoung la llevó por ese lado

—¿Qué hacemos si es un fantasma?— Preguntó chaeyoung

—¿Shotaro no es el que sabe de estas cosas según yuta? ¿Qué tal si lo llamamos?—Y con eso en mente, ambas iban a ponerle un alto a una situación de la cual desconocían los resultados

—Shotaro conoce de santería, pero si el de verdad supiera quien es sana, nos hubiera alarmado a todos, ¿No?—

—Solo intentemoslo...—

Sana y jihyo se estaban dando miradas completamente diferentes a las que se dieron durante las fiestas, Jihyo no se molestaba en saber porque ese encontraba tan interesada en la japonesa, su contra—parte lo sabía, y aun así estaría allí hasta que sus planes fueran saboteados

—Sabes...creo que tu estás lista para escuchar la historia del espíritu—

—¿En serio? P...pero ¿Es de miedo?— Sana negó, mirando hacia el fondo de la sala—¿Y de que trata?—

—Es la historia de un espíritu, que vagando por la tierra, encontró a quien mas necesitaba, encontró a su mortal— Con interés ene la historia, jihyo se acurrucó en el cuerpo de sana, escuchando atentamente— Era dulce, amable con todos, y algo reservada...entonces cruzó con su espíritu—

—¿Qué pasó?—

—Ambos se atrajeron, aunque detrás del humano habían otros que querían estar con el, se encargó de dejarla sola, sin nada, que tan solo desearía estar con su espíritu, para el resto de los tiempos—

—¿Lo aceptó?— En ese instante sana se quedó callada— ¿No lo hizo?—

—Eso dependía del mortal, no tenía nada que perder en ese momento...—Con un tono suave, Sana endulzaba aun mas a jihyo— Lo aceptó, era su otra mitad...y no solo se sabe eso por la opinión del humano, ¿Sabes como también se sabe?—

—¿Cómo?— En ese momento, sana comenzó a deslizar sus manos frías sobre los brazos de jihyo, de una manera tan extraña que levantó sus alarmas— U..unnie...—

—Te voy a enseñar como lo hizo— Acercando sus manos hasta el vientre de la menor, subió ligeramente la parte superior de su disfraz— ¿Puedo tocarte?—

—¿Q..que quieres enseñarme?—

—Déjame tocarte, solo así puedo hacerlo— Y siendo totalmente inocente, jihyo accedió, sintiendo como su cuerpo temblaba ante el contacto de sus frías manos— Siempre pasaba esto, los humanos se asustaban por el tacto...— Aun diciendo ese tipo de cosas tan evidentes, nunca fue claro hasta que se lo demostró por completo

Jihyo tenía miedo y curiosidad al mismo tiempo, que sana la estuviese tocando por todos lados la hacía sentir demasiado vulnerable, ¿No había confiado en ella todo este tiempo? ¿Qué la hacía echar para atrás ahora?

Ahora tenía sus manos sobre sus piernas, estaba dando ligeros apretones como si disfrutara de sentir su dureza, sana se relamía los labios deseando en algún momento poder saborear el cuerpo de jihyo, en un contexto nada relacionado con comérselo

Los escalofríos que estaba dando, por mucho que tuviese miedo de lo que fuese a hacer, no quería negarse, sentía que si le negaba un gesto tan grande de confianza a sana no volverían a sentir la misma conexión

—¿Te gusta como se siente?— Jihyo estaba sin palabras, no podía hablar por la tensión que sentía en el cuerpo, si seguía así iba a llorar— Linda, ¿respondes?...—

—Unnie...me gusta, pe...pero—

—¿Qué pasa?—

—Nada...sigue—Aun no le gustaba, pero por alguna razón permitió que sana continuara con los toques, que ni siquiera eran lascivos o con ganas de algo sexual

Lo que sana sentía por ella iba mas de una relación. Sabía que si no encontraba a su humano pronto iba a sufrir por el resto de los días, estaba apreciando a jihyo como lo que era

Su salvadora, ¿Qué otra manera de poder sentir a lo que te iba a rescatar de una agonía?

—Bien, llegamos a la parte donde te lo explico...— Susurrando en su oído, sana incluso pegaba los labios de su lóbulo izquierdo— Algunos espiritus conocen a su humano—

—¿C...como?—

—Los analizan por años, los años necesarios para poder estar seguros de quienes son, cada detalle de cada día de sus vidas...—Y metiendo sus manos por debajo del vestido, sana hizo contacto con los costados de su cuerpo—Jihyo, bésame—

Una petición totalmente fuera de contexto, le estaba contando sobre los espíritus, y ahora pedía un beso. ¿Qué debía hacer? ¿Gritar? ¿Correr? ¿Negarse? ¿Aceptarlo?

Nada era claro a este punto, su vista se nublaba, y su cálido cuerpo estaba perdiendo viveza, nada la detuvo de darle un beso a sana, estuvo tardando mucho en hacerlo, desde que comenzó la fiesta no era young k quien tenía destinado, sino ella

Y las manos de la japonesa se comenzaba a calentar al acariciar los costados de jihyo, estaba haciendo gestos de placer como si tuviera excitación, una sensación realmente agradable, y mas combinado con el beso que le daba a aquel espíritu, hasta separarse, observándose la una a la otra

Sana no dejaba de tocarla, y le gustaba que lo hiciera, ya no le importaba si era menor o mayor

- Esta hermosa cicatriz, los doctores te la hicieron para poder acomodar tus pulmones...¿Verdad?—

Jihyo ya tenía demasiado miedo como para pensar en algo cuerdo en ese instante, su emoción por haber tenido tan de cerca a sana se desvaneció con esa pregunta

Le había contado que los espíritus eran capaces de ver a sus destinados crecer, y se dio cuenta de la realidad, la historia que le contó sana, estaba hablando de ella misma. En el momento que quería zafarse de su agarre era algo tarde

Claro, tantos toques y demostraciones de amor, eran muy intensas, sana se pasaba de la raya con sus cariños teniendo en cuenta que lo hacía con una menor de edad. Porque sería la ultima vez que lo haría

El cuerpo de jihyo se enfriaba, y el de sana comenzaba a tomar calor, la coreana no podía hablar, se palidecía con el pasar de los segundos

—Te amo, gracias, de verdad, no sabes cuanto te amo, te necesito cerca de mi siempre, no puedo vivir sin ti— Repitiendo el "Te amo" una decena de veces, solo sentía el cuerpo de jihyo completamente inerte, parecía haberse quedado congelada— Al fin estaremos juntas...—

Jihyo siempre sintió que estaría a salvo con sana, porque sería así a partir de ahora, estando inerte y en un sueño profundo, nunca envejecería, nunca sufriría daño por otras personas, nadie iba a lastimarla, la japonesa le iba a dar todo a cambio de eso. No dependería de nadie mas que ella

Incluso su emoción al poder encontrarla fue lo suficiente para hacerla llorar, y recostando su cabeza sobre el hombro de jihyo, suspiró

—Por fin...—

Ese por fin no sería eterno, había escuchado el sonido de una de las escaleras rechinar, y rápidamente volteó a ver quienes se encontraban oyendo lo que le dijo a jihyo

—¿Quién está ahí? Salga...—


No se si habrá capitulo de game over porque necesito hacer tarea. Fue una mala idea querer tener dos historias en emisión, lo sabré para la proxima JAJAJAJAJ