Escuela secundaria y extraterrestres

Capítulo 1

Alien en la bañera

Inicio del capítulo X

Yuuki Rito vio como su enamoramiento secreto, o no tan secreto, dependiendo de quién eras, pasar junto a él en el pasillo de su escuela.

Como la mayoría de la gente, Rito era un estudiante de secundaria bastante normal, sin características realmente inusuales o únicas. Tenía dieciséis años y medía unos ciento sesenta y cuatro centímetros. No era ni flaco ni gordo y no parecía tan atlético. Sus ojos eran de un ligero marrón dorado y vestía los pantalones y corbata verdes estándar con una camiseta blanca y un combo de chaqueta marrón claro de la escuela a la que fue. La única característica de él que podría considerarse única era su desordenado cabello naranja, un color inusual sin importar dónde estuvieras.

'¡Hoy es el día!' pensó para sí mismo con determinación. Había un fuego en sus ojos que solo estaba presente en días como este. Día en el que decidió confesarse con la chica que amaba. '¡Hoy es el día que le confieso a Haruna-chan!'

Desde que conoció a su enamorado, Haruna, una chica bastante bonita de su grado con cabello y ojos morados, había sido amor a primera vista. Su belleza siempre lo había asombrado y afectado de una manera que ninguna otra mujer lo había hecho. Pero era su amabilidad lo que realmente le había ganado el amor de Rito.

'¡Voy a hacerlo!'

Ahora podía verlo todo. Caminaría hasta Haruna, audazmente y con una puerta segura nunca antes vista. Él se arrodillaría, tomaría su mano entre las suyas y le profesaría su amor. Luego le pedía que fuera su novia y ella le decía:

"Confesando a Haruna de nuevo hoy, ¿eh Rito?"

"Sí, hoy voy a…" Rito comenzó a detenerse cuando se dio cuenta de que la voz venía directamente detrás de él. "¡AAH!" Con un fuerte grito se dio la vuelta para mirar a la persona que había logrado acercarse sigilosamente a él.

Dicha persona era un joven vestido con la misma ropa que él, pantalón verde y corbata con una chaqueta color canela. Tenía el pelo rubio puntiagudo que le llegaba hasta los hombros, con dos flequillos hasta la mandíbula que enmarcaban su rostro y un flequillo puntiagudo flotando sobre sus ojos. Dichos ojos eran azules y tenían una cualidad penetrante que Rito siempre había encontrado desconcertante, siempre sentía que esos ojos miraban dentro de su alma. Quizás la característica más extraña de este hombre eran las seis marcas de bigotes en su rostro, tres en cada mejilla, que recorrían horizontalmente su rostro.

"¡Maldita sea, Naruto! ¡Cuántas veces te he dicho que no te acerques sigilosamente a alguien así! ¡Siempre haces esto, sigues constantemente detrás de otras personas y asustando a los demás! ¡Especialmente a mí!" Terminado con su diatriba, Rito se detuvo, sus hombros se encorvaron mientras comenzaba a respirar con dificultad, mirando a todo el mundo como si acabara de correr un maratón.

"¡Jajaja! ¡Gomen, gomen!" Dijo Naruto, agitando una mano frente a su rostro como para protegerse de la cómica ira de Rito. No es que pareciera estar tan afectado por la ira de los adolescentes de pelo naranja. De hecho, parecía que encontraba más diversión en las bravuconadas de Rito que en cualquier otra cosa.

"Entonces…" el rubio comenzó de nuevo, una mirada maliciosa en su rostro mientras se inclinaba para mirar a Rito cara a cara. Siendo una de las personas más altas en la escuela, cerca de cinco pies y ocho, la mayoría de los estudiantes solo alcanzaban la altura del pecho con Naruto. Para mirar a la gente a los ojos, el rubio necesitaba inclinarse o agacharse. "Veo que vas a confesarle a Haruna-chan de nuevo hoy. Sabes, esta será la doscientos cincuenta y seis vez que hagas esto. Hasta ahora has fallado en cada intento de capturar su corazón. ¿Estás seguro de que estás preparado para esto? "