Fix You | Kooktae.

7 - Incógnitas.

─ ¿Ya vas a dejar de seguirme?

─ Es que todavía no me dijiste que te pasó ahí.

Jungkook soltó un largo suspiro cargado de molestia. El enano no dejaba de seguirlo en todo ese tiempo que salieron de la enfermería.

Luego de que Yongsun curara las heridas de ambos, y le diera una paleta de manzana a Taehyung, Jungkook fue el primero en salir del lugar, y el menor no pudo resistir asique lo siguió, y por supuesto Jungkook estaba fastidiado.

─ Deja de molestar, niño.

─ Que no soy niño. ─ fruncio el ceño un momento. ─ Tenemos la misma edad.

─ Eres al menos uno o dos años menor.

─ Mmh, si así fuera.. ¡eres un hyung!

Jungkook rodó los ojos.

─ ¿A donde vas ahora? ─ no volvió a responder. Taehyung se puso a su lado avanzando el paso y siguió hablando.─ Yo también a veces tengo rasguños, es porque cuando voy por los pasillos la gente me cruza sin querer y termino con una marca, pero siempre me piden disculpas así que está bien.─ sonrió hacia el mayor. Él lo miró de manera curiosa.

Jungkook comenzó a preguntarse seriamente si debería gritarle que se vaya. Además, también se preguntaba si el chico no se daba cuenta de que no siempre eran accidentes sus caídas, como la que pudo presenciar en el pasillo hace unos minutos. Taehyung puede ser muy distraído, pero la gente a su al rededor tampoco ayudaba.

¿Acaso nadie se da cuenta de lo tonto que es? Pensaba el pelinegro.

Pero también pensó que es ingenuo, gritarle o mandarlo a la mierda (aunque ya lo había hecho una vez) no serviría de mucho, solo lo haría llorar, y eso no tendría sentido.

Desvió su mirada a una de las muñecas de Taehyung, y por primera vez vio pequeñas cortadas ahí, mientras que en la otra tenía la venda que la enfermera le había puesto. Taehyung se dio cuenta de su mirada y bajo la manga de la camisa para tapar aquellos cortes.

─ Esto pasó hace poco, fue un accidente en realidad, ¡estoy bien! ─sonrió. ─ ¡Espérame!

Los pasos de Jungkook eran más largos, cortesía de su buena altura, mientras que Taehyung tenía que caminar más rápido para poder estar a su lado, y sin darse cuenta había llegado al campo del Instituto, donde se encontraba la piscina. Jungkook sacaba algo de sus bolsillos en el proceso que llegaba a las gradas, y luego el más bajo intentaba mantenerse lo más alejado de la piscina.

Era tanto el miedo que tenía que no se dio cuenta cuando tropezó y terminó unos centímetros cerca del borde del agua.

Hola a nuevos raspones en sus manos.

El más alto escucho un impacto detrás suyo y eso lo hizo girarse, encontrando el cuerpo de Taehyung tendido en el suelo intentando tomarse las rodillas, ya que le empezaron a arder de nuevo. En ese momento soltó un suspiro cansado y guardo el encendedor en su bolsillo.

─ Arde, arde.─ hizo un pequeño puchero.

Sintió una presencia cerca, lo que lo hizo mirar hacía arriba y encontrar aquellos ojos oscuros y penetrantes, no entendía porque lo miraba así hasta que sintió como era alzado con facilidad hasta estar de nuevo de pie. Jungkook le soltó la muñeca sana y siguió con su camino luego.

─ ¿Siempre eres así de callado? ─ habló Tae, mientras con su manos limpiaba su pantalón en la parte de las rodillas.

Era extraña la manera en que quería sacar conversación de cualquier cosa, y como el más alto intentaba evadirlo a toda costa, pero ahí estaba, sin saber porqué, simplemente se sentó en una de las gradas y veía como el menor seguía limpiando su ropa. La mirada aburrida de Jungkook decía mucho y a la vez nada, sus expresiones no cambiaban en ningún momento, parecía una especie de robot, mientras que el menor ya había cambiado sus expresiones y tono de voz una diez veces en lo que iba del día.