—Mamá ¿Cuál es la idea de venir tan temprano a casa y llegar gritando? –Justin se quejó- ¿Qué pasa?
— ¡¿Qué pasa?! En serio Justin, eso me lo tendría que preguntar yo.
—Pero todavía no mamá, es súper temprano así que puedes retirarte y esperar.
—¡No Justin! –Pattie gritó, yo solo me mantenía en silencio, con mis mejillas ardiendo de calor- Me explican esto, ahora.
—Eh, Pattie no es lo que tú piensas –hable por primera vez.
—La escucho señorita –estaba bastante enojada.
—Ayer Justin y yo nos quedamos conversando un rato, hasta que a él se le ocurrió ver una película, pero se quedó dormido y cuando trate de despertarlo, no lo hacía. Duerme como un camión.
—___... Los camiones no duermen –Dijo Justin y se puso a reír, mentalmente le hubiera pegado unas buenas cachetas por ser tan estúpido pero le pegue una pequeña patada en la pierna izquierda- Auch. ¿Qué fue eso?
—Silencio Justin –dije con los dientes apretados.
—¿No me estás mintiendo ____? –Pattie me hablo.
—No Pattie no lo hago.
—No quiero que vuelva a suceder algo así de nuevo. Imaginen Justin, tú eres bastante grande, esto puede hasta pasar por una violación o abuso sexual.
—Mamá, no seas exagerada. Apenas la toque cuando dormí. ¿O sí?
—No claro que no, no me toco en absoluto.
—Está bien, solo espero que no vuelva ocurrir. –Pattie nos sonrío a ambos y salió junto con Elysandra de la habitación.
—Ya sabes ya, está noche no puedes dormir aquí. –le informe.
—Bueno yo no, pero tú sí en la mía.
—No Justin no me arriesgaré a nada. Luego de esto, ni loca.
—Hay no seas tan dramática, además ella ni siquiera duerme aquí en mi casa.
—Igual. Una cosa ¿por qué no le dices que estamos en algo? Digo, le tuve que mentir en todo.
—Porque no ____, aún no es tiempo.
—Siempre que me dices eso, pienso que es porqué tienes vergüenza de mí.
—Claro que no, jamás me avergonzaría de ti. Eres hermosa. Mamá siempre me decía cosas como “Si te avergüenzas de tu novia, eres un fracaso como hombre y no merece su amor. Así de sencillo” y le hice caso, jamás me avergoncé de alguna novia.
—Es porque quizás jamás has tenido una novia “común y corriente” –hice comillas con mis dedos.
—¿Qué hay de Shay? Ella era una chica común y corriente.
—Me refiero, que no has tenido novia común y corriente ahora que tienes fama.
—Igual. A mí me da igual si la chica tiene fama o no, la cosa es que yo me tengo que sentir cómodo y a mí me tiene que gustar.
—Primera vez que sales, por así decirlo, con alguien normal –afirme.
—Sí, supongo. La verdad es que es mejor. Así no hay tanta polémica.
—Ya dejamos la charla para después… ¿Qué hora es?
—La hora de seguir durmiendo. –bostezo.
—Tienes que levantarte, flojito.
—No quiero, quiero seguir durmiendo.
—Yo quiero muchas cosas, pero no siempre se pueden hacer. Así que vamos levanta ese trasero de la cama. –Dije, tratando de levantarlo pero era bastante pesado- Oh Justin ¿Cuánto pesas?
—No lo sé, estoy hecho un oso perezoso.
—Ya levántate, Pattie estará más furiosa si sigues aquí y más encima durmiendo.
—Lo haré solo si me das un beso.
—Sólo uno. Chiquitito.
—Me tendré que conformar con eso.
Lo besé tiernamente, mientras él quería más. Cerró sus ojos y lo besé con un poco de más intensidad. —Ya levántate, fue mucho por hoy.
—¿Mucho? ¿En serio nena? Eso no fue nada.
—Lo sé, pero ya levántate. Pattie te castigará.
—____... Tengo diecinueve años.
—Aún recuerdo cuando le dijiste a Usher que tenías dieciséis y él te respondió que no los tendrías para siempre.
—Vaya, veo que te aprendiste Never Say Never por completo.
—Solo un poquito. –respondí con una risa traviesa.
{{}}
La tarde fue demasiado divertida, ya que Pattie se había quedado para almorzar con nosotros. Aunque Justin no podía hacer nada, se veía demasiado frustrado por no poder abrazarme o besarme. Cada vez que se acercaba a mí en silencio Pattie lo llamaba para algún favor o lo miraba y eso significaba que no lo podía hacer, era gracioso verle tan estresado.
—Ugh, me estoy hartando no puedo hacer nada –susurro en mi oído, yo solo reí- Nena ¿Cómo puedes con todo esto? Muero por besarte y tú estás de lo más tranquila riéndote de mí.
—La verdad es que sé tener paciencia y contenerme.
—Paciente puedo ser, pero contenerme a besar a mi chica, no juegues con eso no puedo.
Me acerque a unos centímetros de su boca tratando de besarlo aunque no iba a hacerlo en frente de Pattie –Sí puedes.
—No hagas eso.
—¿Qué cosa?
—Acercarte y parecer que me vas a besar. –rodo los ojos.
—Es entretenido verte frustrado.
—No estoy frustrado. Sólo me estoy volviendo loco por algunas cosas.
—Eres divertido –dije conteniendo una carcajada.
—¿Escapémonos de aquí? –pregunto mirándome.
—¿Qué? –dije formando una pequeña “O” con mi boca.
—Dije; escapémonos de aquí. ¿Quieres o no?
Esto se vuelve interesante, quizá pueda decir que sí…
ESTÁS LEYENDO
YO SOY BELIEBER (justin y tu) adaptada
Fanficesta es la historia de una belieber afortunada.