oh no! / Luca & Edgar

05

— Val, levántate, tenemos que llegar a la fiesta de Norton. — Luca estaba aprovechándose el pantalón. — Vamos bebé, quiero ir.. dicen que Norton dará dulces mexicanos, ¡Y muero por probarlos! —

Edgar lo miro de mala gana.

— Luca. —

— Dime. —

— Me acabas de destrozar el culo, me duele todo, tengo chupetones en el cuello, ¿Quieres que aún así vaya? Dios Luca, no quiero. — Edgar volvió a acomodarse para poder dormir.

— POR FAVOR ED, UN RATO, POR FAVOR, TE LO PIDO, TE LO RUEGO, BEBÉ, PORFISSS. — el castaño se lanzó a un lado de Edgar, provocando que esté levantará la mirada y le diera una mirada enojada. — Anda, llamaré a Melly. —

— Ugh, como jodes Balsa. Está bien, lárgate del cuarto, en 5 minutos bajo. —

Luca le mostró una sonrisa victoriosa, tomo ropa del clóset y salió corriendo. Pero era una fiesta de disfraces, ¿Qué mierda haría? Ni siquiera tenía disfraz.

Por su parte, Edgar se levantó de mala gana y tomo su ropa, para empezar, tomaría un baño rápido, y así lo hizo. Al terminar, se secó completamente y escogió la ropa más linda y decente que tuviera en el clóset, veamos.. no había algo que le llamará la atención, sólo tenía una par de pantalones cortos de color negro, una camisa blanca y sus típicos tirantes, ¿Por qué mierda no se compraba ropa de una buena vez? Tenían dinero, pero era muy antisocial como para salir. Se encogió de hombros y tomo dichas prendas, se las colocó junto sus típicas botas café, pero tenía que darse el toque.
Se cepillo el cabello y lo dejo así, quiso darse un pequeño toque, el cual fue ponerse delineador y un poco de rubor. Salió del cuarto y bajo las escaleras topandose a Luca acostado en el sillón haciendo literalmente nada.

— Vámonos ya Balsa, antes que me arrepienta. — terminó de bajar las escaleras. — ¿Melly si irá o no? —

— Yup. — se levantó del sillón. — Por cierto, te ves precioso. —

Edgar simplemente se sonrojó y Luca rio por esa tierna reacción, así que sin mucho que decir, salieron de la casa.

En la esquina inesperadamente se toparon a Melly, quién les saludo muy felizmente.

— ¡Hola chicos! No pensé verlos por aquí.. o bueno, quizá si. Vivimos cerca de Norton, lo cual agradezco. —

— ¡Te ves muy bien Melly! Algún día deberías decirme cómo te maquillas, lo haces genial. — Edgar mostró emoción al verla, cosa que era rara en el, ya que no solía emocionarse por cosas como esa.

— Ed, tú delineado es genial. —

— ¿Nos vamos o no chiquinenes? —

Se soltaron a reír por olvidar la existencia de Luca, así que mientras llegaban a la casa de Norton tenían una agradable plática, la cual terminó al llegar a la casa del mencionado. Todavía les sorprendía ver lo enorme que era su casa, si querías podías jugar a las escondidas y no volver a aver la luz del sol en años. Simplemente entraron.

Y oh, vaya.

El lugar era un desastre.

Pero era genial.

Gente bailando, gritando, cantando, peleando, tirando botellas.. vaya, que genial.

Había mucha gente, y a duras penas pudieron adentrarse, para mala suerte de Melly y Edgar, perdieron de vista a Luca.