3- La luz

18 1 0
                                    




Por posición del sol , aproximadamente las 14:30 horas, 1 año después de la propagación

Han pasado demasiados días, horas y ni un solo suspiro de otra persona que no sea el mío.

Ese día en el centro de control de enfermedades parece tan lejano, y de igual forma tan cercano.

Después de que llamaron mi nombre, todo cambio, pensábamos que lo teníamos, pensé que lo tenía pero solo fue el inicio del gran desastre.

Me encuentro caminando por las desiertas calles de Manhattan, manteniendo alta atención a mi alrededor; desde que se liberó el XX-21 debe ser así.

Mis cosas se encuentran dentro de un pequeño bolso cruzado, y lo que visto son unos pantalones y botas militares, una blusa negra de manga larga y una chaqueta que me mantiene caliente en este frío de invierno, ademas de que llevo en mano mi fiel escopeta, en mi tobillo una Magnum 0.35, y mis cuchillas para lo que se necesite.

Mantengo el silencio y voy en la acera, manteniendo mi postura baja y en posición de asalto, por cualquier cosa, durante este camino; he notado que me encuentro en una zona comercial al parecer; por el sin muero de locales que se encuentran aquí. 

El sonido de mis pasos es lo único que se escucha, mantengo el paso, caminando con sigilo hasta que pasé por delante de un puesto de ¿espejos?,que se encontraba a mi derecha, al menos eso parece ser, ahora está casi destruido en su totalidad. Puedo notar que debió haber sucedido una pelea muy fuerte para causar todo ese desastre, la vitrina se encuentra rota; solo se notan los rastros de cristales y sangre en el piso, conduciendo hacia dentro,  hago lo mismo que suelo hacer cuando paso por delante de un lugar que no se encuentra cerrado, miro hacia el interior e intento ver si hay ALGO dentro. No noto movimiento, lo cual supongo que es buena señal, sigo avanzando, y escucho un ligero TIC; como reacción me coloco en cuclillas detrás de la pared que me detiene de entrar al establecimiento. De nuevo el TIC se escucha solo que un poco mas cerca, apenas logro asomar un poco mi cabeza para ver con claridad hacia adentro y visualizo un, podría decirse estante frente de donde se suponía que se hallaba una puerta, miro hacia los lados y me adentro a la tienda, dando mi espalda al estante, ahora inclino mi rostro a la izquierda y lentamente yendo hacia la parte de, al parecer una caja registradora, me mantengo gacha me mantengo en alerta y un pequeño destello de luz me hace mirar hacia abajo, cuando lo hago veo un reloj, un tanto sucio de sangre, y vuelvo a escuchar ese TIC, me río en mis adentros y lo tomo, mucho tiempo había pasado desde que no tenia uno en manos, mantengo mi sonrisa y pienso en levantarme; de pronto, antes de que lo logre, escucho unos pasos apresurados entrando a la tienda, ahora todo vuelve a ser un estado de alarma y atención total.

Me mantengo quieta, y comienzo a estudiar la zona para poder encontrar un sitio donde poder esconderme por si se diera el caso, sigo atenta a cualquier ruido; dios como desearía tener una capa invisible en este momento, siseo un poco y escucho unas ligeras pisadas otra vez... ¡Maldición! creo que lo que entro me ha escuchado, rápidamente miro hacia mis lados y veo un pequeño compartimento, no lo pienso mucho y me meto; apenas lo logro y veo unas botas posarse donde hace unos cuantos segundos me encontraba. Por favor que no me vea, que no me vea...

Lentamente, después de un pequeño momento,se movió, tal vez escondiendo el lugar, lo que fuese que estaba ahí no me vio. Sigo esperando por cualquier sonido, y escucho el sonido que hace la ropa al momento de que uno se sienta, ¿ahora que hago?... Saco un poco mi cabeza y miro a mi derecha, logro ver al fondo los pies y un poco de las piernas, las cuales parecería que traen puesto un pantalón militar, justo cuando estoy pensando en que hacer, escucho una voz mas bien un susurro, es grave y parece ser de un hombre; me mantengo en silencio y escucho...

-Ya lo se hombre- hace una pequeña pausa- todo se fue a la mierda en un dos por tres, les dije que me había quedado sin municiones y ahora no se ni donde me encuentro; esas malditas bestias me habían perseguido, no pude ver donde estaban los otros. Cambio- escucho esto, y cuando termina se escucha el típico sonido que hace un radio para cambiar ahora del sentido de la frecuencia y se escucha ahora a alguien hablando por el radio- James, ¿pero te encuentras bien?, les dije a los chicos que no salieran, iba a ser peligroso y más cuando ahora esas cosas escasean de alimento...Cambio- no noté que cuando estaba escuchando esto, puse mi mano en el suelo pero había una cosa que provocó un chillido, tardé mucho en reaccionar; me puse de pie al mismo tiempo que ese hombre lo hacia y apunte con mi escopeta hacia su dirección.

Cuando los dos nos apuntamos, logre al fin verlo, es alto aproximadamente 1.80 mts y tiene el cuerpo fornido, cabello castaño y despeinado, se veía demacrado y cansado; hablamos al mismo tiempo -¡Suelta. El. Arma. Ahora!- Nos miramos al mismo tiempo y lentamente bajamos nuestras armas, sin despegar la vista de cada uno, y pregunte- ¿Quién eres?- el me contestó con una mirada muy fuerte y solo dijo- ya lo escuchaste, ahora tú ¿Quién diablos eres?- no me quedó de otra que decirle- Lexa.





-------

Hola de nuevo, dejo hasta aquí el capitulo, saludos, disfruten. :)

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 19, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Destinado a morir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora