Extraño a mi amiga

"Adiós Blight"

Desperté como si nada hubiera ocurrido, mis hermanos no estaban en la casa y mis padres tampoco, lo que era un alivio pues estarían molestando con cualquier cosa que hiciera, bastante hice con que Boscha rompiera mi pie y que terminara nuestra amistad.

Intente levantarme, aunque claramente sin éxito por la incomodidad de mi pie. Logré sentarme y ver el techo un poco más, las imágenes de ayer aún seguían en mi cabeza, Luz peleando contra el emperador, Eda y mi mentora casi siendo petrificadas... Algo de alto impacto sinceramente.

-Me pregunto si Luz estará bien- solté un largo suspiro en el que yo misma me sorprendí, no es como si me importara, digo, desafiar al emperador ya es algo bastante grave y una deshorra para las brujas.

Sin nada más que hacer gire mi cabeza inspeccionando mi cuarto, notando qué es medio día, vi mi librero , mis pósters del aquelarre del emperador, y después mire mi pie, recordando lo sucedido con Luz días antes, sentí mis oídos zumbar por la sangre subiendo a mi rostro con fuerza por el recuerdo.

-Lo siento Amity, mis tonterías terminan metiéndote en problemas- dijo mirando hacia un lado aún cargandome en sus brazos mientras nos dirigíamos al salón de sanación.

-Jaja, estoy bien, te preocupas demasiado... Puedo caminar yo sola mir..- no termine la frase por mi imprudencia de querer zafarme de sus brazos. -¡Ah!- grite después de que mi pie tocará el piso.

-¡Amity!- grito sorprendida cargandome nuevamente pero ahora con más fuerza y más cerca de ella.

El recuerdo de sentir su cuerpo tan cerca mío me hizo agitar la cabeza para poder quitar el rubor de mi cara.

-Espero este bien- suspire volviendome a acostar y cerrando los ojos.

No sé cuánto tiempo permanecí dormida, pues escuché ruidos cerca de mi puerta lo que hicieron que despertara, escuché abrir la puerta y al mirar en su dirección me encontré con mis hermanos, asomando su cabeza.

-¿Necesitan algo?- dije haciendo mi claro disgusto.

-Ah, no Mittens- dijo Edric. -Solo estábamos preocupados por ti...- agachó la mirada y bajaron sus orejas.

-Estoy bien- respondí sacando mi pergamino. -Si ya no tienen nada más que decir, vayanse- no despegue la mirada del pergamino.

-Claro Mittens- escuché decir a Emira -Noches hermana- seguido cerró la puerta detrás de ellos

-Noches chicos...- Susurré. Agh quisiera ser honesta con que los quiero y el hecho de que hayan cambiado y bajado un poco el nivel de sus bromas me hace feliz pero aún no me siento bien expresándome.

Mirando Penstagram, había muchas publicaciones relacionadas a Luz y su pelea con el emperador, conspiradores apoyando el movimiento de Luz y Eda, otros con miedo de usar magia salvaje y volverse alguna bestia, también encontré comentarios sobre mi mentora, "¿Lilith Clowthone traicionó al emperador?" "La líder del aquelarre desterrada".

Comentarios así aparecieron hasta encontrar una foto en la que estaba Luz  detrás de Kikimora con fuego en su mano, el comentario decía "La famosa humana se opone al aquelarre"

Mirando más de cerca la foto ví a Luz demasiado molesta, cosa que jamás me imaginé de ella, desconozco las razones por la que Luz atacará al aquelarre pero algo debió molestarla... ¡Pero tampoco era para que peleara con el emperador! Me hace cuestionar si lo que siempre he querido es lo correcto ahora...

Mire mi pie nuevamente y recordé a Luz tan sonriente como siempre, sin notarlo se formó una sonrisa grande y un rubor leve.

-Luz, puedo caminar, en serio- dije intentando ocultar mi rojo rostro de ella.