Me, Myself and Her // Choni

Capítulo 13

- Por qué no mejor regresa a su casa y mañana en la mañana le digo a Cheryl que vino a buscarla y ya que ella decida se la  llame o no - me pare a un lado de la puerta esperando a que saliera.

- Sé que hablo muy claramente y puedes procesar lo que te estoy diciendo - articulo como si fuera una completa estúpida a la que le hablaba, "respira y ranquilízate, recuerda que es la madre de Cheryl",  - y no te conviene hacerme enojar, como te dije, ella es menor de edad, fácilmente irías a prisión - carcajee ante su estúpida amenaza.

- Mire - conté internamente hasta diez, - yo no tengo aquí a nadie a la fuerza. Ella el día que quiera puede tomar sus maletas e irse con usted, aunque dudo que eso suceda - dije burlonamente y su rostro se pintó de rojo.

- ¡Escucha muy bien lo que te voy a decir... - dijo ya más que enojada señalándome con su dedo índice.

- Ten mucho cuidado con lo que vas a decir - la voz de Cheryl la interrumpio desde las escaleras.

- Marjorie que bueno que estas aquí, trae tus maletas. Nos vamos.

- ¿Quién te dijo que estaba aquí? - dijo con una enorme frialdad.

Era sorprendente lo duro que podía hablarle, yo ni en sueños había sido capaz de hablarle así a mi madre.

- Eso no importa.

- ¿Quién te dijo que estaba aquí? - repitió bajando las escaleras.

- Veronica, pero ya hablaremos en la casa - mi cuerpo se tensó, ahora si me tocaría ajustar cuentas con la imbécil de Veronica.

- No gracias, mira ya es tarde y hay una pequeña que duerme, que te parece si te visito un día de estos, claro si tienes tiempo - prácticamente la corrió, - revisa tu agenda tal vez tengas algún espacio en algunos dos meses.

- ¡Marjorie! - dijo en un tono de impresión.

- Solo vete y deja de fingir que te intereso.

- ¡Claro que me interesas!, lo estoy haciendo por ti, esto es un error, tú no puedes salir y mucho menos vivir con ella - me señalo una vez más.

- Si puedo, es mi novia y la amo - esto sí que subía mi ego.

- Pero ella jamás...

- Basta - no la dejo terminar.

La verdad quería que la dejara hablar quería saber lo que detestaba tanto de mí. Además de que tenía que mantener a mi hermana, mi ausencia de padres, mi forma de vestir, mi vehículo. Prácticamente me odia por completo.

- Piénsalo - acomodo su saco, - ¿qué te puede ofrecer esta? - eso si me ofendió, yo podía ofrecerle mucho más que cualquiera.

- Cariño, aprecio, un verdadero hogar - esta vez yo hable, - tal vez no puedo darle muchos lujos - baje la mirada pero Cheryl tomo mi mano, - pero puedo asegurarle que aquí estará mejor que en cualquier lugar.

- De amor no se vive niña, tenlo bien
presente - dijo con repulsión, - prepara tus
maletas, no te quedaras por mucho aquí -
salió de la casa y la puerta se cerró tras de
ella.

- Perdóname - su voz era amortiguada ya que se hundió en mi pecho abrazándome.

- ¿Porque te disculpas?.

- Mi madre...

- Tranquila, nadie elige a su familia - soltó una pequeña risa.

- Estúpida Veronica - murmuro y concorde con ella.

- Ya me arreglare con ella mañana - afine mi
mirada y Cheryl ahogo un grito.

- iNo!, déjamelo a mi yo me encargare de la
bocona esa.

- Ya veremos mañana, la primera que la vea se arregla con ella - tome su mano y la entrelace para después guiarla a las escaleras. Ella subía un escalón atrás de mí cuando pregunto.

- ¿Un verdadero hogar?.

- Para mí somos una familia, algo extraña, pero familia - me golpeo jugando, - solo bromeaba - me retracte y me detuve para que me alcanzara y pase un brazo por sus hombros.

- Muchos hijos - dijo y vaya que me sorprendí, - quiero tener muchos hijos - hablaba pensativa, seguramente imaginaba.

- ¿A cuántos te refieres por muchos? - no me aterraba la idea de ser madre, ya que prácticamente desempeñaba ese papel con Jellybean.

Lo que me aterraba era que Cheryl quisiera formar todo un ejército, ¡y seguramente de niñas!. No puedo ni imaginarme la cantidad de vestidos que tendría que comprar, habitaciones de rosa por pintar y novios a los cuales espantar.

- Tres, tal vez adoptar cuatro o hasta cinco - sonrió, - quiero la casa siempre llena y cuando seamos viejitas que las cenas y reuniones sean grandes festejos, con nietos y hasta bisnietos - ella simplemente quiere una familia.

- ¿Te imaginas?, nosotras de viejitas peleando cada cinco minutos - ambas reímos.

POV. Cheryl

- ¿Eres estúpida o te haces?.

- ¡Te-Te!, ¿en que quedamos? - reproche.

- Yo la vi primero, yo me encargo de ella - se sacó la chaqueta y la lanzo en el césped, me puse en medio ya que casi se le lanza encima a Vero.

- ¡Yo la vi primero! - era verdad, - hasta te dije "ahí esta Veronica, yo me encargo".

- Si, son adorables sus discusiones, ¿ya me puedo ir? - dijo Vero con ironía y fastidio.

- ¡No! - gritamos Toni y yo al unísono haciéndola sobresaltarse un poco, ambas reímos como viles brabuconas. Al menos Toni ya lo era.

- Llegare tarde a algebra - reclamo, obviamente no estaba en posición de hacerlo.

- No, Cheryl y yo llegaremos tarde a algebra, tu con suerte y en una semana podrás volver a clases o al menos ponerte en pie.

- ¡Basta Te-Te!.

- ¡Quiero que lo intentes idiota!.

- ¡Veronica cállate!.

- ¿Que lo intente?, mejor cállate si no quieres que te desfigure.

- Así no se puede - me deje caer en el césped, cruce las piernas como indio, también cruce mis brazos y fruncí mi ceño.

- Cuando terminen de decirse cosas me avisan.