Mi nueva vida

De viaje

Estaba en el aeropuerto, esperando mi vuelo a Seattle. Cuando estuviera en Seattle, cogería un taxi y me iría a Port Angeles a comprar un coche.

Ya tenía carné de conducir, sólo me faltaba el coche.

"Los pasajeros del vuelo A-16 con destino a Seattle, que pasen por la ventanilla 3."

Ese era mi vuelo. Pasé por el control, recogí mi maleta y subí al avión.

Mi asiento estaba al lado de la ventana, y por suerte, nadie se sentó a mi lado.

Me puse los cascos y caí en los brazos de Morfeo.

***SUEÑO***

Llegué a Seattle y me compré un BMW. Conduje hasta Forks. Cuando iba por la carretera de la reserva, vi la cabeza de un lobo asomar de entre los árboles. Frené y el gigantesco lobo vino hacia mí. Bajé del coche y aparecieron más lobos.

Cada vez se acercaban más,así que formé un escudo a mi alrededor.

Los lobos me miraron y...

***FIN DEL SUEÑO***

-Señorita, abrochese el cinturón. Vamos a aterrizar-me dijo una azafata.

Le sonreí y me abroche el cinturón.

El avión aterrizó y fui la primera en salir.

Fuera del aeropuerto me esperaba el taxi.

Subí las maletas y me abroche el cinturón.

-¿A dónde la llevo, señorita?-me preguntó el conductor.

-¿Sabe dónde venden buenos coches?-pregunté.

-Sí. Conozco a un chico que vende Mercedes, Audi, BMW...-respondió.

-Pues lleveme allí-le dije.

Arrancó el coche y puso rumbo al concesionario.

Después de un largo viaje en coche, al fin llegamos.

-¿Cuánto le debo?-le pregunté al conductor sacando la cartera.

-20€-respondió.

Cogí un billete de 50€ y se lo di.

-Quedese con el cambio-le sonreí.

Bajé las maletas y el taxi se fue.

Entré al concesionario y un chico de 30 años me atendió.

-¿La puedo ayudar en algo?-me preguntó.

-Sí. Busco un BMW rojo-respondí.

-Sigame,por favor-empezó a andar.

Yo le seguí.

-Tenemos muchos modelos de BMW. Hay familiar, todoterreno...-dijo moviendo las manos.

-Quiero éste-señalé un BMW rojo todoterreno.

-Tiene buen gusto. Es el modelo nuevo importado de Alemania- me comentó.

-Lo quiero. ¿Me lo puedo llevar ahora?-pregunté.

-No creo que lleve encima 15.900€-se rió.

-En eso está equivocado-sonreí.

Saqué el dinero y se lo di.

-¿Las llaves,por favor?-pregunté.

-Están puestas-dijo asombrado.

-Gracias. Un placer- subí al coche y arranqué.