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Jungkook cerró la puerta con un poco de fuerza al movimiento, cerrando sus ojos dejó escapar un suspiro. Jodido día de mierda empezando con su jefe era un mierda y terminando con su compañeros siendo unos completos idiotas. Las llaves cayeron en la mesa que estaba en la entrada.

-bebé ¿en dónde estás?- Cuestionó el mayor mientras buscaba a su bebé. Para su sorpresa, en el cuarto escuchaba gemidos de su pequeño, entre más se acercaba mejor escuchaba sus gemidos. Cuando ya se hallaba frente a la puerta, se escuchaba fuerte los gemidos de su bebé, lo que le hizo sonreír y abrir la ya mencionada. Se encontro a su pequeño tocandose.

le temblaban las piernas, su respiración se escuchaba agitaba mientras el sudor bajaba por su frente, sus labios hinchados son todo un espectáculo para quien pudiera verlo. El pequeño Hoseok hizo una mueca de frustración por que sus dedos era muy pequeño y no llegaban. Jungkook arrugo su nariz en descontento al ver a su pequeño tocandose. Se cruzo de brazos mientras alzaba una de sus cejas viendo la provocativa cara de su pequeño quien estaba sudando y sonrojado

- Estas en graves problemas pequeño- le hizo saber.

Él terminó por sentarse al borde de la cama palmeando así sus piernas y Hoseok temeroso quiso negarse pero sabía que su novio se enfadaría más si no acataba sus ordenes. Se recostó boca abajo sobre los fuertes muslos de su novio y al estar desnudo le había hecho las cosas más faciles. Jungkook empezó a acariciar su hermoso trasero.

-Sabes bien que odio que te toques cuando no estoy.-
Apretó sus glúteos que se movían ante el contacto, era una delicia poder apreciarlo. Al estar cerca de uno de los cajones, sacó un vibrador junto a un control remoto.

-si te corres, te pondré un peor castigo, cachorro.- Le advirtió, sintiendo a Hoseok removerse, gemidos reprimidos ahogandose en su garganta tras la introducción del objeto.

-Ahora vas a contar las nalgadas mientras tienes esto adentro ¿De acuerdo?.- Encendió el vibrador a segundo nivel de cinco, escuchando maldecir a Hoseok y la primera nalgada, un poco suave resonó en la pieza.

-U-uno.- Su voz salía jodidamente temblorosa, Jungkook relamio sus labios volviendo a estrellar la palma contra la carne suave.

-D-dos, dos.- aquel azote no había sido tan fuerte pero la sensibilidad que el objeto en su interior le brindaban le podía más, estaba más que húmedo a esas alturas, sus manos tapaban su rostro y el tercer golpe vino más fuerte, con el soltó un gemido alto.

-¿Cuántos azotes llevo, bebé?.- Su cara se sentía roja, su miembro que hacía fricción contra la pierna de Jungkook, estaba demasiado excitado, temblaba bajo el tacto ajeno y su voz casi no salía.

-M-Mmm, T-Tres.- Respondió apenas con ellos,Jungkook subió la intensidad del vibrador.

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Bien Jovenes soy Mayne y esta es mi pequeña aportación en el mundo del Junghope.

Haré más si veo que les gusta

Heaven - JunhopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora