Cap 4

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...

Willy

-¡MIERDA! ¡Otro camino sin salida!-Golpee la mesa intentando sacarme de encima algo del estrés que llevaba estas últimas semanas. No encontrábamos por ningún lado algún tipo de pista que nos podía llevar a este hombre.

-Tranquilízate Willy, golpeando cosas no lo vamos a encontrarlo más rápido.-Dijo Fargan intentado organizar todos los papeles que había esparcidos en la mesa principal, donde siempre nos sentábamos cuando había reunion.

Toda la guarida estaba llena de papeles, desde la mesa, paredes y piso. Y ninguno de estos tenía algo que podíamos usar. Ni siquiera sabemos por dónde empezar a preguntar para conseguir más información.

-Es que es imposible que no haya nada sobre él. Algo tiene que haber, en algún mercado negro, algo, sino, ¿cómo lo vendieron?

-En algún lugar tiene que haber un rastro de que lo vendieron a alguien. ¿Qué te parece si vamos a ese mercado del pueblo Blomst disfrazados y buscamos algo más de información?

-Está bien...- Estaba muy frustrado. Me masajee la frente para ver si podia disipar el dolor de cabeza

-Vamos, ya estamos muy cansados como para intentar seguir, vamos a casa.

Nos levantamos y dejamos todo como estaba. No teníamos energía para nada.

Caminamos parte del camino y luego cada uno se dirigió a su casa. Cuando me fui acercando a la isla flotante, solté un suspiro y comencé a pensar en qué pensarían ellos si supieran lo que estoy haciendo. Sé que Rubius no le gustaría la idea de que esté intentando buscar a ese hombre, y Vegetta me dijo especialmente que no hagamos nada que a él no le gustaría. Dios, estarían tan enojados.

Subí por el ascensor y abrí la puerta de la muralla. Me sorprendió que aun haya luces prendidas dentro de la casa. Me fije en el horario, eran las cinco de la mañana, ¿me estaban esperando? Esto era lo peor, no tenía pensada ninguna excusa.

Abrí la puerta y no había nadie. ¿Se olvidaron las luces prendidas? No creo, Vegetta nunca se olvida de nada. Mucho más si son temas de su mansión. Que extraño. Me dirigí hacia el living para apagar las luces. Seguía sin ver a nadie.

Supongo que realmente se habían olvidado las luces prendidas. Deje la mochila y todo lo que llevaba encima en el sillón y subí para dormirme con mis amores. Arriba estaba todo apagado, así que no estaba viendo bien por donde iba. Cuando abrí la puerta de nuestra habitación vi algo que me llamo la atención. Había una silueta algo grande en la cama. ¿Qué era eso?

Me acerque para ver si podía reconocer lo que era. No vi a ninguno de mis chicos en la cama. ¿Dónde estarán?

Me apoye en el borde de la cama y alce mi mano para tocar a la silueta. Era suave, tenía pelaje. ¿Qué carajo es esto? Y de la nada escuche un gruñido, muy fuerte.

-¡AHHH!-Caí de espalda al esquivando un zarpazo que me lanzo el animal. Había un oso en mi habitación... Que carajo... Si había un oso en la habitación... ¿DONDE ESTABAN RUBIUS Y VEGETTA?

El oso se me lanzo encima y volví a gritar pensando que era mi final. Pero lo siguiente que sentí fue un lengüetazo.

-... ¿Qué? ...- El oso se apoyó en mí sin dejar que me mueva por su peso. El oso no parecía querer hacerme daño. No estaba entendiendo que estaba pasando. Hasta que escuche una carcajada muy conocida.

-¡Vegetta! ¿Qué mierda está pasando?-

-Jajajaja Ojala lo hubiese grabado, tu grito fue genial-Entre el estrés que llevaba estos últimos días y el susto que me pego este oso, la risa fue la última gota del vaso.

Sin titulo (por ahora) - RuwigettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora