𝐇𝐞𝐫𝐨𝐞𝐬 𝐨𝐟 𝐭𝐡𝐞 𝐎𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞 𝐒𝐤𝐢𝐞𝐬 ➸ Larry. (Traducción)

0.4

La luz de la luna brilla detrás de Harry, arrojando su cabello en este tenue halo, la plata brilla a través de los oscuros rizos despeinados en la parte superior de su cabeza. La parte posterior de su cuello es larga, bellamente arqueada de una manera que hace que a Louis le duela el estómago. La cabeza de Harry está agachada y Louis puede ver el oro rojo de su cigarrillo, cenizas humeantes flotando en la calle vacía, tranquila a esta hora de la noche.

Es casi medianoche, un martes. Hace calor, uno de los días más calurosos del verano según la radio, y Louis está acostado encima de su cama con solo sus bóxers, uno de los muchos pares sucios que han estado en su habitación durante días. Louis no es exactamente productivo en lavar su ropa, ni puede molestarse en mantener su habitación en una apariencia de organización. Todo lo que le importa en este momento es estar exactamente en la línea del ventilador que se encuentra en la esquina de la cama, pero hasta ahora todo lo que está hecho es hacer que el aire polvoriento y húmedo se mueva un poco, en lugar de enfriarlo.

Desde donde yace, puede ver las perillas desnudas de la columna vertebral de Harry moverse y rodar mientras se desenrolla de estar sentado en el borde de la escalera de incendios, tirando de sus piernas hacia atrás a través de los peldaños y levantándose. Se estira, largo y felino. Le recuerda a Louis una pantera, todo cabello oscuro y ojos con forma de gato y la columna vertebral curvada como el arco de un cazador. La ventana está abierta, las luces distantes de la ciudad proyectan un resplandor amarillo en la habitación; cuando Harry vuelve a trepar por la ventana, bloquea la luz y, de repente, la habitación se vuelve negra como la tinta.

Harry se deja caer en la cama, sus largos brazos aletean sobre las piernas de Louis con un repugnante sonido de sudor. "Estoy tan caliente", gime en la rótula de Louis, su suave aliento le hace cosquillas en el pelo de la pierna de Louis. Hace demasiado calor para que un patán gigante y pesado esté acostado sobre sus piernas, pero lo permite por alguna razón, al igual que le permite a Harry fumar sus desagradables cigarrillos en la escalera de incendios de Louis. No sabe por qué lo hace.

Harry gira la cabeza, y sus ojos brillan desde la oscuridad hacia Louis, cargados de verde y calor y algo indistinguible que Louis puede sentir detrás de sus costillas, pero no puede ponerle un nombre.

"¿Quieres hacer algo?" Harry murmura con la boca aplastada contra la rótula de Louis.

Louis niega con la cabeza. Hace demasiado calor para hacer algo. Aparece una estrella de mar en el medio de la cama, con las manos llegando lo más lejos que pueden hasta los bordes de la cama. Es una cama grande y no tiene salida al mar en el medio.

Dos semanas. Ni siquiera 14 días en realidad. 13 días, más aventuras nocturnas de las que Louis recuerda haber tenido, y de repente aparece este chico, con estos huesos antiguos más grandes que la vida misma, y ​​Louis simplemente. Solo tiene este ardiente deseo de que Harry sepa todo sobre él, mostrarle su diario de 12 años y tal vez contarle sobre los hábitos de vandalismo de Louis, sentarlo y enseñarle sobre todas las formas en que Louis está perdido y roto, y todo las formas en que ha tratado de encontrar el camino de nuevo. Louis se pregunta si el mundo alguna vez ha defraudado a Harry. No lo parece, no con su entusiasmo desenfrenado por todo, desde metal oxidado hasta libros de segunda mano en la tienda a unas cuadras del piso de Louis.

Es alarmante, de verdad, lo rápido que Louis se enamoró de Harry, cómo al final de esa primera cita de café (no es una cita, se recuerda Louis), Louis ya sabía el nombre de la primera mascota de Harry, sus sentimientos sobre el control de armas, su película favorita. Louis ha memorizado la forma en que Harry se ve cuando se estira hacia atrás en su silla, la camisa subiendo y la piel pálida debajo de sus brazos, tiene la risa de Harry tatuada en sus tímpanos.