🔺Kián🔺

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Yo era el típico chico de los deportes, capitán de fútbol americano, en fin todo un cliché. A mis padres les encantaba el deporte, por ello a mi igual, éramos una familia muy sana.

Había terminado el partido, así que me dirigí a la duchas para refrescarme mientras todos estaban celebrando.

- Eh , Kián , ¿Vienes a celebrar a casa de Malcom?- señaló Steven con alegría ya que habíamos ganado
- seguro, ahí estaré- dije un tanto descontento.

Normalmente los demás me querían sólo por que era bueno en el deporte, conocía chicas que querían estar conmigo porque me consideraba popular, sinceramente era un tanto frustrante el hecho que me usaran para tener más "amigos" o seguidores, algunos me veían y pensaban que era muy antipático pero simplemente no me agradaba estar con ellos.

Al llegar a casa me estaba preparando para ir a la fiesta, pero unos extraños mareos me interrumpieron, fui a recostarme en mi cama, ni siquiera podía estar de pié.

Mi padre entró a mi habitación un rato después -Hey, no ibas a ir a una fiesta?- preguntó desinteresadamente.
-Mmmm no, me siento un poco mal- le respondí con evidente malestar. Honestamente mis padres son buenos, digo, jamás he tendió necesidades, pero a veces me gustaría que me prestaran más atención.

Minutos después mi teléfono sonó

- Hola tú- me escribió una linda chica llamada Vanesa, no la conocía tanto pero por lo poco que había convivido con ella me caía bien.
- Hola - conteste, después de una larga plática en la que me sentía cómodo, hablando de gustos que teníamos, haciendo bromas y riendo la chica fue lo bastante directa para decirme
- Se que sonará raro pero, haré una fiesta y tengo miedo que la gente no venga ¿Puedes venir?- mi indignación era muy grande así que me límite a contestar - No gracias, tengo algunas cosas que hacer- bloqueé mi celular para no ver qué me respondía, me sentía mal por decirle que no pero realmente estaba muy molesto.

Para ese entonces ya se me habían pasado los repentinos mareos, así que decidí ir al gimnasio para desquitar todo ese enojo

mientras bajaba la palanca de una máquina para entrenar brazo esta se rompió.
Estaba sólo así que algo confundido tomé mis cosas y salí corriendo...
Hey no quiero que sepan que rompí una máquina.

Al día siguiente en casa tenía un poco de hambre, sinceramente me sentía más triste que molesto, así que bajé por comida y cuando abrí la puerta de la nevera sin querer la arranqué, pero antes de volver a correr una terrible migraña cayó en mi de nuevo, -Esto no puede ser normal- pensé

Al día siguiente como de costumbre estaba sólo, me dirigí al médico para que me examinara.

Llegando con el doctor el me dijo
- bueno joven, el ejercicio no es fuente de todo lo que te está pasando- él miró para todos lados -¿tus padres no están aquí cierto?- dijo con un todo de decepción, así que solo moví la cabeza negando.

- okey, tienes que ir a este lugar, pero te advierto que debes que empacar ya que si entras no podrás regresar aquí en un tiempo, si tienes la oportunidad háblalo con tus padres, pero si es necesario que vayas a esta dirección- me miró con un poco de tristeza en sus ojos mientras me extendía la mano que sujetaba un papel con una dirección, lo tomé y salí del consultorio, me sentía bastante enojado por que me di cuenta de que no le importaba a mis padres, no sabía que era lo que me estaba pasando pero tenía miedo y ellos no estaban ahí para ayudarme.

Llegando a casa hice lo que me dijo el médico, tomé una pluma y escribí una nota diciendo:
"Mamá, Papá, tendré que irme por un tiempo, estos últimos días me he sentido bastante mal pero fui con un médico quien me dio una dirección en donde seguramente podrán ayudarme, no se preocupen, bueno que estoy diciendo, si ustedes nunca lo hacen... atentamente: Kián"

Metí todas las cosas a mi coche y me dispuse a ir hacia la dirección que el doctor me había dado, y vaya que estaba lejos.

Llegué a la prestigiada academia, me impresionó bastante lo que estaba viendo, era muy grande y bonita, así que entré y me llevaron al despacho del director donde concluí mis exámenes, me felicitó por tan buenas calificaciones, después una amable señora me llevo por un largo pasillo.
- que grandes son tus músculos - señaló mientras me tocaba suavemente el brazo.
- gracias , trabajo mucho en eso - dije en tono seco.
- mmm todo el tiempo en gym vale la pena- me respondió sonriendo, a lo que yo hice una mueca.
- ¿qué vamos a hacer aquí? - le pregunté para intentar cambiar el tema, ya que ella seguía mirándome en una forma que me ponía bastante nervioso, por suerte llegamos a la habitación y con molestia por lo que la mujer insinuaba abrí la puerta y la rompí.

-ou yo - tranquilo Kián no salgas corriendo- me dije a mi mismo - lo siento , no quería romperla.

Un señor me interrumpe y pone una hoja en el pecho - tranquilo muchacho , terminaste tu prueba , puedes irte - todos ellos se fueron dejándome sólo en el lugar, me encontraba bastante confundido- ¿qué había sido todo eso?

Tomé la hoja que aquel hombre me dió y la leí, en ella decía que yo había sido aceptado en la Academia Diáfora y pertenecía a la facción llamada"Phortea".

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Holaa, seguimos presentando uno por uno a nuestros personajes principales, de verdad esperamos les guste el cap.
Cómo saben nos sería de mucha ayuda  que le den a la estrellita⭐️
Los queremos mucho y nos vemos en el siguiente 🖤.

🏛LOS SEIS PILARES 🏛Where stories live. Discover now