- Hola Jinyoung, me alegra verte.- dijo con una sonrisa Wonpil.
- No digo lo mismo.- respondió con algo de desprecio.
Wonpil rio, se acercó al omega pero antes de que estuviera a unos cuatro pasos Jinyoung le gruñó en forma amenazadora, sus ojos se volvieron azules, Wonpil se sorprendió ante el acto, hasta que vio como Jinyoung abrazaba más fuerte a los pequeños aún dormidos en sus brazos, sonrió, era normal, él sabía que algunos omegas se volvían muy territoriales cuando estaban con sus cachorros o en cinta, y bueno, Jinyoung entraba en ambas categorías, así que comprendió.
- Tranquilo, sé que es por tu estado, algunos omegas gruñen.- dijo Wonpil, el ceño de Jinyoung se frunció.- Incluso a su alfa.-
- Jamás le he gruñido a Jaebeom.- dijo Jinyoung apretando los dientes.- Y jamás lo haré, es mi alfa.-
La sonrisa de Wonpil se tensó.- Dejemos algo claro aquí Jinyoung, ese nombre está prohibido en mi presencia.- dio otro paso, sus ojos se volvieron rojos.- Y eso de ser tu alfa, no más, de ahora en adelante eres mío, ¿Entendido?.-
- Estoy marcado y no por ti, así que no soy tuyo.- Jinyoung sintió una corriente en su espalda al ver avanzar a Wonpil.- No te acerques.- su aroma comenzó a salir de forma picosa, en forma de amenaza.
El alfa lo ignoro, tomó a Jinyoung por el cuello de la camisa, dejando al descubierto la marca de enlace.- Esa estúpida marca se puede arreglar, eres mío.- Wonpil apretó los dientes.- Harás lo que yo diga si no quieres que algo les pase a los cachorros.- sus ojos volvieron a la normalidad cuando vio el terror dentro de los de Jinyoung, sus brazos apretándolos más, pensó que los cachorros seguían dormidos, pero al parecer no era así, pues sintió un poco de ardor en la mano que sostenía la camisa del omega, miro y se encontró con el cachorro encajando sus pequeñas uñas tan fuerte como podía tratando de liberar a su padre de su toque, lo liberó de su agarre.- Amor, lo siento, no volverá a pasar.- intentó tomar la mejilla del omega pero este dio unos pasos para atrás.- No te haré daño, ni a los cachorros.- sus ojos fueron a la cachorra que un seguía dormida, pero tenía su pequeño ceño fruncido, y al cachorro quien lo miraba entrecerrando los ojos.- Estoy dispuesto a criarlos como míos, no les faltará nada, lo prometo, incluso ya tengo opciones de donde podrías dar a luz al cachorro que llevas en ti, solo necesito tu aprobación y me encargaré de todo.- Jinyoung solo lo miró, aún con esos ojos azules, el alfa sabía que con lo sucedido el omega levantaría más barreras, pero él estaba dispuesto a tirar cada una de ellas, suspiro.- Te prometo por mi vida que no les pondré una mano encima, jamás los dañaría, son parte de ti.- dijo el alfa tratando de calmarlo, los volvió a mirar, odio lo mucho que el cachorro se aprecia a Lim, pero sus ojos eran los de Jinyoung, le dolió que casi podía ver el odio en ellos.- El viaje a sido un poco largo, Chunha, llévalos a la habitación.-
Chunha asintió, indicó a Jinyoung que la siguiera, él lo hizo aunque trató de pasar lo más lejos posible de él, eso le dolió, pero sabía que se lo había ganado, ¿En qué pensaba al amenazarlo con dañar a los cachorros?, aunque si lo admitía no les tenía mucho aprecio, eran un recordatorio diario de Lim, también eso debía arreglar, en cuanto Jinyoung se lo permitiera cambiaria el apellido de Lim a Kim, y el cachorro en camino, él nacería con su apellido, tenía que hablar sobre nombres con Jinyoung, tenía algunas opciones desde hace tiempo había estado pensando en nombres, pero cuando se enteró que el cachorro sería un niño, descarto todos los de niña, aunque se sintió un poco desilusionado, siempre había querido tener cachorras, pero ya tenían una, así que no se quedaría al respecto, en cuanto pudiera los sacaría del país, era la mejor opción.
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