Dos demonios y un amor

Capitulo II

Daven: — Hay bastante que hacer... aHhH [Apenas entran al lugar, el polvo lo invade, haciéndolo estornudar] … Mierda 
Kumiko: — Salud 
Daven: — Gracias… Bien, empecemos… Varias de estas cajas están vacías, así que todo lo que veas suelto, ponlo en ellas, como libros, cosas viejas entre esas cosas … [dice mientras arremangaba su camisa hasta los hombros…]

-Hacía tiempo que no limpiaba el lugar a fondo. Parecía haber una cama debajo de algunas cosas, eso ahorraría el tiempo de ir y comprar una-

Kumiko: — Está bien, pero puedo limpiar yo solo si quieres … [empezaba a recoger algunos libros polvorientos que estaban apilados en el suelo]
Daven: — Estás loco, sabes que amo limpiar … [Sin saber de donde, saca un trapo y un balde con agua]
Kumiko: — jajaja, bueno … [cambia a su forma original, así estaría más cómodo, además de que en ese lugar no los podrían ver] ... Ahhh, mucho mejor, bueno… 

-Estaban llenando cajas con libros y cosas inútiles, parece que quién vivió allí antes, le gustaban los libros de ficción, entre otros-

Kumiko: — … (Romeo y... Julieta, parece aburrido) … [lo deja en una caja y la cierra para hacerla a un lado y seguir con otras]

-Luego de varios minutos acomodando y despejando el lugar, ya estaban casi terminando de guardar las cosas para después empezar a limpiar el lugar-

Daven: — Por cierto, cuando saquemos todas las cajas, las que están marcadas con rojo tienen objetos frágiles dentro, probablemente también haya lámparas y decoraciones que podés usar [señala a cada una de las cajas]
Kumiko: — ah, déjalas, yo me encargo… Quiero algo de decoración… 
Daven: — Está bien… [silencio para nada incómodo < ironía>] 
Kumiko: — ¡oh! ¡tengo mucho que contarte! … Cómo cuando te fuiste y a la semana había una reunión, tu padre estornudó y quemó los papeles, Jajajs… Fue épico, y también una vez cuando estaba con papá paseando, un tipo nos quiso robar… Cuando notó quién era casi se muere, lo hubieras visto… 
Daven: — Creo que ya me la imagino, jajsjsjdj
Kumiko: — Ah, y aún tengo la foto mía y tuya de cuando éramos pequeños, ahora que lo pienso... Es medio raro, la mayoría de los demonios de tu edad no quieren estar conmigo porque tengo 16 años, y por mi estatus social, aparte cuando tengo confianza hablo mu- … [contaba cada todo con extrema felicidad, movía su cola como si fuese un perrito con su amo, pero cuando se da cuenta que estaba hablando demasiado simplemente calla, muchos demonios se quejaban de él por hablar demasiado] … Perdón… [sigue guardando en silencio, tenía que si hablaba demasiado podría molestar]
Daven: — hey, ahora no me dejes con la duda, cuéntame [estaba concentrado en limpiar un estante, pero aun asi le interesaba todo lo que le contaba]
Kumiko: — Na, ta bien, tampoco pasó nada interesante ... [se para para luego, de su mano, dejar salir una sustancia parecida a un slime y tirarlo al suelo, este slime contenía ácido, pero él podía controlar que deshacer y que no]
Daven: [deja de hacer lo que estaba haciendo y se acerca a kumiko, parándose en frente de él] — cuéntame, me interesa saber, no tienes que pedir perdón por sólo hablar, ¿o alguien te dijo algo? [pone ambas manos en sus hombros, se preocupaba mucho por su amigo, ya que se dejaba llevar por lo que la gente decía y no quería que este mal]
Kumiko: — Ehh… No se, tampoco es la gran cosa [continúa desintegrando el polvo del suelo, podía controlar la sustancia a distancia]
Daven: — no seas idiota [le da un pequeño golpecito en la frente] …
Ami si me interesa [sonríe suavemente]
Kumiko: — Auch [lleva una mano a su frente] … En serio, no se como me aguantas … [le devuelve la sonrisa]

-para Kumiko, el tener a alguien como daven le reconfortaba, si no fuese su amigo, quien sabe qué hubiera pasado-

Daven: — entonces… ¿Me vas a contar sí o no? [vuelve a su lugar terminando de limpiar el estante, pasaba varias veces el trapo hasta estar seguro que estaba limpio]
Kumiko: — Decía que ningún otro demonio de tu edad, ni de la mía, quieren estar conmigo… primero; por mi estatus, segundo; porque hablo mucho, tercero; porque soy muy pegote y cuarto… No sé ... [se agacha para estirar su mano y recoger el slime, gran parte del suelo estaba reluciente]
Daven: — Ví en ti algo que no en otros demonios, no me preguntes qué…

-Desde hace tiempo Daven estaba algo confuso sobre lo que podría estar sintiendo hacia kumiko, ¿tal vez era un gran amor de amigos?
¿hermanos? o tal vez si es amor, pero por el momento no se sabe-

Kumiko: — En fin, ¿no te es incómodo el estar así? [lo señala de arriba a abajo] ¿El no tener cola ni los cuernos?
Daven: [deja el trapo en el balde] — Es solo cuestión de acostumbrarse, pero bueno... Ayúdame a llevar las cajas al patio trasero, las guardaremos en allí 

-en el patio había una especie de galpón de jardín, no lo utilizaba para nada asi que podria guardar las cosas ahí- 

Daven: — Cuidado de no caer 

-Bajaban las escaleras, Daven cargaba con una sola caja, pero su amigo cargaba con dos, casi impidiéndole ver- 

Kumiko: — Tranquilo [logra bajar las escaleras sin caer] Ja... [caminaba despacio hacia la puerta del patio, pero de repente tropieza casi cayéndose] ¡Ah!
Daven: — Te dije [Con una mano abre la puerta y guardan las cajas que llevaron]

-Hicieron varios viajes hasta terminar de guardar todo, no se preocuparon de que kumiko esté en su forma natural, el patio tenía cercas, por lo que si iban y venían rapido nadie los vería, vuelven a la habitación luego de terminar, aún faltaba el ordenar la cama y demás- 

Kumiko: — Bueno, ahora vete, vete [Lo empuja hacia la puerta para sacarlo] ... Yo ordeno MÍ habitación.
Daven: — Bueno, bueno [Abre la puerta] Sorpréndeme, si encuentras objetos en las cajas que te gusten, úsalos... Luego, la cama, algunos libros y demás están en esas cajas también [señala algunas que quedaron allí, exactamente las que kumiko pidió que dejara]
Kumiko: — Ok... [espera a que daven se vaya para empezar y escucha que sus pasos se alejan] ... [se da la vuelta viendo el lugar] ... ¿que hago?

-3 horas pasan y nuestro amigo demonio termina de ordenar todo-

Daven: [al dejar de escuchar el ruido que provenía de la habitación, supuso que terminó, así que va a la cocina para preparar algo rápido, unos bocadillos, y sube a ver como estaba]
Daven: — ¿terminaste de arreg…? [queda asombrado ante el buen trabajo que hizo con la habitación]

Kumiko: [con su cara en la cama] — odga (hola)
Daven: — no creí… no creía que el sótano era tan grande… Lo hiciste muy bien [veia cada rincón mientras caminaba hacia kumiko para darle los sandwiches que hizo]
Kumiko: [levanta la cabeza de la cama para verlo] — verdad que te sorprendí, ¿eh? [tenía una sonrisa de victoria en su rostro, le gustaba que lo felicite]
Daven: — Ni me lo digas... Toma, come y descansa un poco si quieres [se sienta junto a él a la cama y le deja el plato cerca suyo]
Kumiko: — Usé varios libros para hacer una mesita de noche y puse una lámpara [era una lámpara que utilizaba una vela como luz] … Me dejé algunos libros que me interesan para leer, y también vi que había una alfombra, la coloqué en el piso [nota el plato de comida y toma un sándwich] ¿que es? … Es un poco diferente a la comida de casa
[prueba un mordisco, estaba rico]
Daven: — son sandwiches, tienen jamón, queso y pan, nada fuera de lo común 

-La comida de Inferant y Ethania no eran muy diferentes, pero algunas cosas, como los nombres, sí lo eran-

Daven: — Bueno, no sé que harás ahora, ¿no tienes sueño? [pone su mano en la cabeza del más pequeño, dándole pequeñas palmaditas]
Kumiko: — tal vez, ¿qué hora es? [mira el cielo por el ventanal]
Daven: — son las 20:30
Kumiko: [bosteza] — estoy algo cansado, cambiar de forma y limpiar me cansó [apoya la cara en el colchón]
Daven: — Ok [sonrie] … duerme bien... Si necesitas algo, estaré abajo...
[se levanta de la cama y toma el plato dirigiéndose a la puerta-
Kumiko: — oki… Mmm, ¿Dav? [dice antes que se vaya] Daven: — ¿Si? [voltea la cabeza antes de salir del la habitación] Kumiko: — Mañana en el desayuno quiero contarte algo...
Daven: — Ehh claro, pero primero duerme, descansa del viaje que bastante agitador habrá sido para ti... [Sonríe] … Buenas noches [lo saluda y se va]
Kumiko: — bye... [se recuesta arropándose en las cobijas, cayendo dormido al minuto]
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Si llegaron hasta aca gracias por leer y darle una oportunidad a esta historia, perdón por actualizar tarde. No olviden vitar y comentar.
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