Capítulo 6

1.2K 169 41
                                    


Yeonjun es una de las personas más extrañas que pueden existir, si tuviera que definirlo simplemente no podría porque es un enigma al que no le hallo respuesta coherente, puede ser tan burdo y pedante en varias ocasiones y en otras sabe reconocer sus errores, aunque normalmente es grosero e indiferente con lo que pasa a su alrededor.

El ni siquiera parece notar lo que pasa frente a sus narices y por eso siempre me armo conjeturas acerca de lo que pudiera estar pasando o sintiendo, pero siempre me quedo sin encontrar respuesta alguna, si tan sólo pudiera saberlo todo sería más fácil. Yo sabría cómo abordarlo y evitar tantos malos ratos como los que he venido haciendo últimamente.

Hay veces que admito que me gusta que sea tan difícil el poder descifrarlo ya que es algo que llama completamente la atención y es un gran poder de atracción, pero eso no quiere decir que el hecho de no comprenderlo sea una frustración constante, en realidad yo quiero estar ahí para él, que me permita estar a su lado, pero es algo que no permite. Al principio creí que era alguien con un trauma que no lo dejaba expresarse correctamente, sin embargo, lo poco que lo conozco he notado que es un ser amargado.

Yo pensaba que sus padres lo tenían presionado para estudiar la carrera que cursa actualmente, pero he descubierto con las conversaciones que solemos tener, enserio ama su carrera, el la eligió y recibe total apoyo de sus progenitores, entonces, llegamos a un punto en el cual soy completamente ignorante de por qué Yeonjun es como es.

Sinceramente, creí que las cosas iban a pasar como si nada, yo lo ignoraría un fin de semana completo, él me buscaría, el tiempo pasaría y el lunes él me volvería a hablar, me diría unas cuantas cosas pervertidas y yo estaría derritiéndome en sus brazos, como siempre. Mi cabeza es un lío y mi cuerpo no deja de temblar, él sabe el efecto que tiene sobre mí y se aprovecha de eso, y a pesar de todo, estoy extremadamente feliz porque es la primera vez que recibo algo de su parte, sin haberlo pedido, porque era algo que nunca pensé que pasaría.

Por eso, estoy completamente callado, sólo aceptando sus toques, sus besos, las sensaciones que me provoca, y me tiene aquí, con la cabeza agachada y lanzando un sin número de suspiros, disfrutando lo que hace, lo que toca sin poder impedirle nada, pero...¿quién soy yo? ¿Acaso no me está dando más de lo que esperaba? Esta es una de las pocas veces que siento que no estoy haciendo nada malo, que sus caricias están completamente bien y no hay porque sentirme mal al respecto.

Aunque sea tan idiota para pensar eso, es algo que trato de convencerme a mí mismo, sé que yo estaba algo enojado y vine a buscarlo bien pudiendo dejarlo plantado, pero ya había quedado y no podía abandonarlo cuando sabía que me necesitaba, y me convencí de frenar mis sentimientos solo por hoy y no dejar que él me domine, pero Yeonjun siempre está un paso adelante de mí y sabe que hacer para tenerme bajo su control, sin embargo, nunca había llegado tan lejos como disculparse abiertamente.

No debería sentirme realizado por eso, pero es algo que no puedo procesar correctamente ya que son palabras que creí que no cabían en su léxico y que me las haya dicho es un logro.

Se que suena lastimero, pero necesito aferrarme a una mínima esperanza de algo que nunca existirá.

¿Qué tan patético me escucho?

¿Cuánta lástima puedo causar para saber que he tocado fondo?

—Siéntate en mi, Beomgyu.

Me sonrojo furiosamente por lo que acaba de decir, estamos dentro del auto de mi mamá, besándonos y tocándonos como si no hubiera un mañana, seguimos en el estacionamiento del terminal, a pesar que está todo oscuro, la expectación de que alguien nos descubra hace que me recorra una gran descarga de adrenalina por todo el cuerpo. Lo que Yeonjun propone que hagamos es lo más pervertido que hayamos hecho, y aquí estoy yo, accediendo a sus deseos porque es algo que yo también quiero.

I'm in [ Yeongyu ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora