LunaJuro que mi pie se podría salir de tanto pisar el acelerador de la motocicleta, la luz que estaba abajo del helicóptero alumbraba perfectamente hacía mi delicado cuerpo. El cual estaba lleno de heridas y cortes provocado por las caídas en el bosque.
Al parecer no se cansarían de perseguirme, creo que eso es obvio. Es la policía, nunca dejan un caso abierto. Me aproxime a un puente y, mierda, pensé.
Habían muchos coches de los oficiales al final de este, no podría pasar, acabaría muerta, Auton no podrá ayudarme.
Maldito seas Auton.
El jefe de la SWAT estaba ahí, sin casco y sus agentes estaban delante de el con armas, apuntando hacía mi. Esperando a que me rindiera y no hiciera ningún movimiento. Están jugando con Luna Holmes, no con cualquier chica.
- Estar atentos. -gritó el jefe, haciendo que los agentes se pusieran en posición.
- No hay opción. -susurré a Auton.
- Iremos directo. ¿Estas listo, Auton?
-una sonrisa de victoria se formo en mi rostro, claro que el estaba listo.Mi mano se movió para luego posicionar mi pie en el acelerador, la moto salió arrancando. Lo único que hice en ese momento fue,gritar
- ¡¡Auton, te necesito!! ¡AHORA! -mi tono era tan alto que hasta en Tokio podría oírme.
Sentí una brisa a mi alrededor, algo que me protegía, mi vista por un momento se podía ver borrosa pero se acostumbro al momento. Gracias por el escudo, Auton. Pensé.
Atravesé a los agentes, los coches de policías y las barreras que los cubría, la adrenalina estaba pegada en mi cuerpo, estaba en mi cerebro. Era parte de mi.
Habían pasado unas horas, minutos, no tengo ni idea pero estaba un poco más oscuro. Estaba en Bakertown, este pueblo o ciudad estaba un poco desolado, el único ruido que se escuchaba era mi respiración y el sonido de la motocicleta. De la nada sentí algo que hizo que la rueda reventara, habían disparado. Estaban aquí.
Os juro que salí volando de la moto, estaba tirada en el suelo, pero no sentía dolor, me acostumbre. Los camiones y coches no tardaron en llegar, se pararon cerca de mi y gritaban que se dieran prisa. Yo cojeaba, el dolor se concentraba más en mi pierna que en los demás músculos, me escondí detrás de un coche.
Habían francotiradores, estaba perdida, ¿Que digo? ¡Más que perdida! - Estas rodeada, ¡Sal con las manos en alto y no te haremos daño -mentirosos, más que mentirosos. Me han querido matar todo este tiempo y creen que no me harán daño. Simplemente idiotas.
- Si estáis buscando problemas..
-dije para mi misma. - Eso van a obtener.. Encárgate de ellos Auton..Y ahí fue cuando las cosas comenzaron a explotar.
Narrador.
Auton era experto en estas cosas, desde que creció con Luna había aprendido a como defenderla, protegerla y lo más importante. Nunca alejarse de ella, aunque Luna lo odiara.
En este momento el controlaba a uno de los agentes de SWAT, el agente apuntó a uno de sus compañeros, disparando. Lo mato, había asesinado a alguien después de tanto tiempo. Uno de sus compañeros se dio cuenta de aquello, y le disparo, pero también el agente había disparado, así que los dos murieron.
Muerte consecutiva, que genial es Auton ¿no?
Los grifos de agua comenzaron a derramar todo lo que contenían, los coches que se posaban en las afueras de las casan saltaban. Muchos oficiales se suicidaron a causa del gran poder de Auton, todo estaba en llamas, era el mismísimo infierno. Pero al chico no le importaba, ni menos a Luna, con tal de estar vivos, estaban felices.
Auton, se acercan ¡¡Aléjalos de mi, rápido, vienen!!
Se acerco a la puerta en la cual Luna trataba de abrir, en un abrir y cerrar de ojos, esta se abrió sin ningún problema.Crea una distracción, vuela los coches.
Y eso es lo que hizo, nada más ni nada menos que distracciones algo brutales, para que se alejaran de su pequeña "dueña". Coches, edificios, camiones, TODO salía volando, explotando, atropellando agentes sin más. Era una masacre, de las malas. Pero había algo que faltaba, algo que acabaría con todo esto y la dejarían en paz.
El helicóptero.
Auton se acerco a el y haciendo un movimiento, controlo al conductor de este, dejándolo inservible y desconectado del mundo. El helicóptero comenzó a dar vueltas, para luego con delicadeza caer al suelo y... explotar en mil pedazos.
Luna.
Sentí una explosión, más grande de las que había hecho mi gran ente, miré por la ventana. El helicóptero, lo hizo, lo exploto y ahora la mayoría de los agentes están muertos. Estoy a salvo.
Con mi pierna aún un poco mala, camine por los lugares en los que no había fuego, no quería más heridas y menos morir quemada, que horror sería eso ¿verdad?
El jefe de la SWAT estaba arrastrándose por el suelo,y dando algunos gemidos de dolor, eso me daba alegría. Pero no vengáis decir que soy mala persona ni nada, ni que Auton lo es. Porque se lo merece, me hizo sufrir, me quiso quitar a lo más querido que tenía, y no, nadie me separa de Auton.
Me acerqué a el y lo cogi por el cuello de la camisa que traía, hice que me mirara y creo que las palabras que dije, pudieron destrozar su vida.
- Díles que me dejen en paz, porque la próxima vez.. -hice una pequeña pausa para tomar un poco de aire - Mataré a todos.
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Dos Almas
Science FictionLuna, es una misteriosa chica con un lúgubre pasado. Una tenebrosa entidad sobrenatural parece estar atada a ella, siguiéndola a cada paso que da, alejándola de la vida normal que tanto anhela.