¨ᴡʜᴀᴛ ᴀ ʙʀɪɢʜᴛ ᴛɪᴍᴇ, ɪᴛ's ᴛʜᴇ ʀɪɢʜᴛ ᴛɪᴍᴇ
ᴛᴏ ʀᴏᴄᴋ ᴛʜᴇ ɴɪɢʜᴛ ᴀᴡᴀʏ
ᴊɪɴɢʟᴇ ʙᴇʟʟ ᴛɪᴍᴇ ɪs ᴀ sᴡᴇʟʟ ᴛɪᴍᴇ
ᴛᴏ ɢᴏ ɢʟɪᴅɪɴ' ɪɴ ᴀ ᴏɴᴇ-ʜᴏʀsᴇ sʟᴇɪɢʜ¨
Los especiales navideños son divertidos, ¿No?
Cerremos el año de una manera dulce, armoniosa y que mejor forma que...
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"Princesa para navidad"
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Sebastian corría por las calles concurridas de su pueblo, mirando sobre su espalda cada dos por tres revisando si lo estaban siguiendo y claro que así sucedía, podía ver a su guardaespaldas abrirse paso cada vez más rápido hacía él.
El príncipe de Bucarest giro para introducirse en una nueva calle y ver si así podía deshacerse del guardaespaldas, pero no contaba con toparse con alguna persona.
—Fíjate por donde caminas —le recriminaron, se quedo estático al escuchar la voz de la chica, la observo con detenimiento por unos segundas, ella alzo una ceja viendo la manera tan extraña en la que se estaba comportando.
Sebastian miro al inicio de la calle por donde había dado vuelta, dándose cuenta que el guardaespaldas casi le pisaba los talones, tomo a la chica por los hombros y la acerco a él, plantándole un beso sobre los labios.
La chica abrió asombrada los ojos por tal imprudencia, el guardaespaldas real paso de largo, ignorando a la pareja, Sebastian lo vio irse, alejándose de la chica y siguiendo con la mirada al hombre que debía cuidarlo y protegerlo, su atención fue llevada hacia la chica al sentir dolor en su mejilla.
—Mierda —suelta la chica al sentir su mano caliente por el impacto y más porque le había dolido por igual, parecía que el chico tenía una maldita mejilla de acero.
