La Madriguera

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Narra bella*

Después de pasar los filtros de seguridad me encontraba parada frente a la puerta de la madriguera, estaba nerviosa ¿Quienes estarían?¿se alegrarían de verme? ¿Estarían enojados conmigo? ¿Aceptarian a mis amigos? Realmente era un poco frustrante
Damon noto mi estado, me abrazo y alentó a estar bien, como solo el podía hacerlo. Di un fuerte suspiro y antes de entrar cambie mi forma a la real, el cabello se volvió rojo fuego, los ojos verdes, mi busto creció un poco ya que lo reducía para no llamar mucho la atención, pero lo mas notorio eran mis cicatrices.
Damon me sonrió y abrí la puerta, el aroma de la comida de Molly me inundó pero de golpe fui golpeada por una fuerza descomunal que me hizo quedar en el suelo

-Lily -escuche al mismo tiempo hablar a los gemelos que ahora se encontraban encima de mi

-Chicos, necesito mi espacio vital -Respondí entre risas

-No -dijeron al unísono

-Ya tuviste demasiado espacio vital.. -dijo George

-...viviendo en Norte América estos años -completo Fred haciéndome reír. Enserio extrañaba esto.

-Oigan, dejenla ya. -dijo Alastor escamando a los gemelos con su bastón -Tendrán mucho tiempo para mimarla estando seguros adentro. Ustedes, pasen -dijo lo ultimo hacia mis invitados que no podían ingresar sin permiso

Ante esto las comadrejas se levantaron y me ayudaron a levantarme, pero Fred me tomo por sorpresa y me cargo como costal de papas haciéndome pegar un gritillo mientras me introducía a la sala. En esta posición quede Justo a la altura de los ojos de Damon, esos ojos penetrantes que sentía podrían hurgar mi alma, entonces acordé de aquella promesa que me hizo aquella noche y como la cumplía.

*flashback*

Me encontraba en mi habitación mirando la foto de Edward, aquella que le había tomado sin que se diera cuenta, a pesar de que había sido un buen día con la llegada de mis amigos a la ciudad, el dolor seguía latente

-Aun me dueles pero debo sacarte de mi corazón -dije doblando la foto -no puedo permitir que me sigas haciendo daño. Tú seguiste con tu vida y yo debo hacerlo con la mía

-Esa es la Lily que conozco -dijo Damon a mi espalda haciendome girar, se acercó y prosiguió -decidida y valiente. No debes mal gastarte por alguien que no apreció la increíble persona que eres

- Lo sé pero eso no quita que duela -respondí y me abrazó

-Prometo que te haré sonreír -me dijo sentándome en la cama

-Estoy segura que lo harás -respondí con una media mueca

-Por supuesto que sí -dijo arrogante y me tumbo en la cama haciéndome cosquillas, yo me reí a carcajadas y al cabo de un rato dejó de hacerlo pero yo seguía sonriendo, pasó su mano por mi mejilla y entonces dijo -Tú sonrisa es lo más hermoso de este mundo y yo me encargaré de traerla de vuelta -me dio un beso en la frente, me giro para abrazarme y así nos quedamos dormidos

*Fin flashback*

Desde entonces se había encargado de cumplir su promesa al grado de que casi ya no pensaba en Edward y después cuando tuve que volver no titubeó en apoyarme, realmente le importaba pero eso me causaba miedo de volver a enamorarme de el

-LILYYY - escuché gritar a Molly, Hermione, Ginny y Fleur haciendo que Fred me bajara, saludé a cada una con emoción, Charly empezó también a saludar, Molly dijo que iría a preparar la mesa y que le ayudaramos y así fue como las chicas me arrastraron a la cocina.

Diario de un crepúsculo en HogwartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora