La melodía - Mina y Tu -

R

— Momo, tengo que hablar contigo, creo que la acabo de fregar con t/n — dije muy nerviosa y un poco agitada por haber corrido desde la habitación hasta la sala

— Deja que me lleve un poco de comida para estudiar bien el asunto, minari — mencionó la primera japonesa mientras quitaba un poco de la bolsa donde sana guardaba los snaks para la película que veían juntas

Al llegar a la habitación que compartían y sentarse en la cama de la menor, se miraron unos segundos esperando algún indicio del tema así que mina empezó a contar lo sucedido

— Estábamos hablando como siempre, todo iba normal pero cuando me dijo que me extrañaba mucho le respondí muy mal... — recordó bajando la cabeza, arrepintiéndose de sus palabras

— ¿Qué cosa?

— Le dije... para abreviar, le dije que no fuera infantil y que se aguantara... aaahg no sabes lo mal que me sentí cuando desvío la mirada y dejó de sonreír — respondí restregando mis manos por mi rostro

— woah pero- ...¿por qué le dijiste eso? No te ví de mal humor cuando fuiste a hablar con ella y no es como que seas bipolar así que...

— No lo sé, s-solo lo dije y la dañe mucho

— Bueno... yo creo que tal vez no es para exagerar, puede que lo olvide rápidamente ya que tampoco es como que la hayas terminado o algo así — comparó tratando de tranquilizar a su amiga y hermana

— Pero ella es muy sensible, siempre muestra que no es así pero es mentira, tu sabes que antes ella pasó por cosas difíciles y eso la hizo cambiar, la hizo más vulnerable a las palabras de las personas cercanas a ella — suspiré tratando de sacar aquella preocupación que crecía en mi — y yo soy la persona más cercana a ella

— Tranquila ¿si? No creo que le afecte tanto, seguramente lo dejará de lado y ya, no creo que nada malo pase por ese comentario — dijo la mayor mientras se acercaba y abrazaba a la de los lindos lunares en el rostro — Solo recuerda el pedirle disculpas y listo

— ...Gracias por escucharme unnie, esto me ayuda muchísimo — agradecí a la vez que correspondía aquel abrazo de apoyo, donde recibía aquel cariño fraternal que siempre compartíamos

— ¿Me dirás de una vez por todas el porqué de esa mirada perdida en la nada? — preguntó repentinamente somi, mientras se sentaba a mi lado en la cama

— Se fue mi internet

— Te creería eso si tuviera diez pero lamentablemente no es así, dime ya que es lo que pasa contigo t/n... ¿tu familia? ¿las chicas de twice? ¿Mina? — tanteó con las cosas más probables y acertó en la última, lo supo ya que justamente cuando lo dijo yo volteé a verla — ¿peleaste con ella?

— No... solo que... e-ella... — me costaba más de lo debido el decirlo, porque dolía, y mucho — nada olvídalo

— Sabes muy bien que eso no pasará, estoy aquí para ayudarte y escuchar tus problemas como la buena amiga que soy, anda cuéntame que pasó si no te estaré molestando hasta que me digas

Reí y le conté lo sucedido, también lo que me hizo sentir una incomodidad y preocupación en el pecho, más la falta que me hacia tenerla entre mis brazos.

Y mientras le explicaba las cosas, me di cuenta de lo que me hacia la ausencia de mina, su ausencia sacaba lo peor de mí, la parte más insegura y sensible que guardo en lo más profundo de mi ser, allí entendí que la distancia entre nosotras es lo peor que me puede pasar pero también lo que no puedo evitar y lo más frecuente en una relación como la nuestra.

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