El mundo es extraño

154 4 0
                                    

Demasiado extraño — pensé nuevamente mientras veía mi nuevo uniforme escolar — porque me pasan estas cosas a mí — ustedes pensaran el porque me deprimo de ver mi nuevo uniforme escolar

La respuesta es bastante simple, mi uniforme consta de un pantalón gris casi negro, una camisa blanca una corbata roja con la punta  de color blanco y un saco carmesí oscuro con bordes blancos y el escudo de los Butei en el costado izquierdo

Y ustedes dirán que tiene eso de extraño, lo extraño no es eso, lo extraño es la pistola oculta debajo del saco, y lo peor de todo es que llevo el arma en contra de mi voluntad

Yo que era un estudiante normal

La preparatoria Butei de Tokio el lugar más extraño que existe en Japón, la escuela exige que los estudiantes estén armados en todo momento durante las clases o más específicamente mientras permanezcan en el campus de la escuela

Debido al incremento de la delincuencia y a la incapacidad de los gobiernos para hacer frente a la situación se creó la profesión con el título de "detective armado" (Butei), que opera como una policía internacional. El Butei tiene permitido portar y utilizar sus armas a discreción para arrestar a los malhechores, puede hacer cualquier cosa siempre y cuando esté de acuerdo al reglamento Butei de la nación que este adscrito. Además, a diferencia de la policía, cobra una recompensa por cada misión que cumpla. Es como un mercenario al servicio de la ley

Maldición y todo es culpa de ese chico

Yo que hasta hace pocos días podía decir que era un simple estudiante de preparatoria ahora soy uno de los pocos valientes de todo el país que se une a la escuela donde el 3% de los estudiantes no llegan vivos al día de su graduación

Como termine metido en esto se preguntaran, bueno eso se debe principalmente a un incidente el mes pasado

Salía de una preparatoria para chicos cualquiera, con la intención de dirigirme lo más rápido posible al dojo de mi abuelo, esperando no morir de agotamiento ese día, cuando de la nada un chico de unos 17 años apareció por una esquina de una de las calles asiendo que ambos cayéramos al suelo

— ¡Fíjate por donde vas! — grito furaco mientras se levantaba a toda prisa

— Lo siento

El chico ignoro olímpicamente mi disculpa, salió corriendo a toda velocidad

— Todos tienen prisa el día de hoy — pensé mientras recogía mi espada de madera y cartera del suelo

En eso de la esquina de la calle de donde venía el chico apareció una mujer al lado de un policía

— ¡Detente ladrón! — grito el policía mientras la mujer miraba con angustia al chico de ase un momento

Me acerque a la mujer que estaba bastante exaltada y cansada por la persecución del chico

— Disculpe

— Si

— Ese chico que le robo

Cuando expuse mi duda la mujer me dijo que ella trabaja para cierta institución y que llevaba un dicho con información de gran importancia en su bolso que había sido robado

— Ya veo

Tome la espada de madera, que estaba envuelta en una funda de tela negra, el ladrón había avanzado un gran tramo y nuestra distancia era obviamente inmensa

— ¿Que harás chico?

Me pregunto la mujer, cuyo rostro mostraba un claro interés en mis acciones

El camino del héroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora