Capítulo 3. "Friendzone".

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*Jennifer Andrews*

Estuvimos hablando toda la tarde hasta el anochecer. Me contó algo sobre su situación y yo de la mía. Me estuvo halagando toda la noche, diciendo que estaba seguro de que yo iba a terminar así.

_¿Así como?- le dije confundida.

_Así de intelectual, avanzada, educada, no lo sé. Inteligente, dulce, fresca. En fin, la chica independiente que siempre has sido. -me dijo convencido.

Sin palabras.

_No se que responder a eso, pero, tú no te quedas atrás; sigues siendo sincero, honesto, humilde y directo. Una condición social no cambia a las personas. Eres tan buena persona como lo eras antes, puede que hasta incluso más. Por eso eras mi mejor amigo... "el bad boy" recuerdas?- dije contenta.

El comienza a reír.

_SI, viejos tiempos... aunque eres la única que sabe que lo fingía. Sabes que no era mujeriego, solo me hacia respetar, y que te respetaran a ti. Me vas a decir que ser la mejor amiga del bad boy no trae beneficios eh?- dijo galán hasta que se le escapo una carcajada.

-Sí, lo sé.- Dije riendo.

_Ya que estamos recordando cosas, recuerdas cuando hicimos "el club de los friendzoneados"- nos empezamos a reír a más no poder. Menos mal que el café estaba cerrado.

_Estábamos muy mal. Recuerdo que lo hicimos porque Pamela te mando directamente a la friendzone- dije burlándome.

_Si, estaba tan deprimido que hicimos una marcha en el colegio contra la friendzone. Con carteles y todo.- Reímos a la par- Nos ganamos un reporte de la directora y un mes sin televisión.

_Si.. Dios mío. Cuéntame de ti, ya recordamos cosas. Cada uno quiere saber cómo terminó donde está. Así que, empieza tú.

_Bueno... Mi padre falleció un mes después de que todos entraran a la secundaria, cuide a mi mama hasta que quise entrar a una universidad, pero falleció dos años después. No pude entrar a la universidad por falta de dinero y depresión. Estaba solo, sin trabajo, y en menos de un año perdí la casa de mis padres. Así que quede aquí, hace un año que junto cartón para comprar algo de comida.-dice avergonzado.

_Lo siento mucho... Nunca me imagine que esto iba a pasar. ¡Eras el mejor de la clase! Lo siento mucho. -le digo tomándolo de la mano.

_Quien dijo que deje de ser yo?-dijo divierto- solo... no encuentro un trabajo ideal.

_Pero... lo bueno sería al menos un trabajo temporal, y cuando tengas bastante dinero, tu trabajo ideal aparecerá. Ya sea de empleado o dueño. Yo, en cambio, busco la vida ideal, el trabajo para mi es algo pasajero, lo de menos. Quiero formar un futuro. Por eso trabajo aquí.

_Eso me suena mucho a tu abuela, volviendo al tema. Si es un trabajo temporal, ¿donde viviré en ese periodo de tiempo? Eh pensado en todo, Jennifer. No hay caso para mí ya.

_Tengo una idea..

¿Que harás Jennifer?...

La Cafeteria de la Esquina.©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora