Dos semanas después de que Lappland llegara a Rhodes Island...
Cada parte de su cuerpo se estremecía de dolor mientras jadeaba. Texas yacía en el suelo sin fuerzas, su espada siendo apretada con fuerza en su mano derecha, la iluminación artificial del cuarto dañaba sus ojos con solo mirar. estaban rodeadas por paredes de un color blanco,con algunos posters en ellas. Los estandartes no hacían más que dar color a la sala, ninguna de esas palabras en estos eran leídas por las operadores, su enfoque no se encontraba ahí o en la fría baldosa debajo de ella, ni siquiera en el frío punzando su piel.
No, había algo más, o quizás ella debería decir algo más.
Encima de ella, una mujer muy parecida a si misma, pero a la vez muy, muy diferente. Orejas blancas puntiagadas en la oscuridad, salían por la cima de su cabeza, estaban rodeadas por cabellos blancos casi es su totalidad revueltos, hebras que se asoman sin sentido alguno, una cicatriz marcada en medio en uno de sus ojos, que de alguna manera la herida no la había cegado; Texas recuerda haberla puesto ahí, eso días fueron hace mucho tiempo. Lappland sonreía hacia ella, sus ojos deslumbraban con un tono maniático, podía recordar cuando solía haber bondad en su pálido rostro, en medio de la furia de una asesina a sangre fría, esas memorias creaban un dolor en su corazón por el pesar.
Pero Texas dudaba que esos momentos pudieran volver.
"¡Ay Texas, y yo pensaba que ibas a poner resistencia, hehehe!" Lappland dejó salir una extraña risa, había un tiempo en donde la habría encontrado cómica, incluso adorable, pero ahora solo enviaba escalofríos a través de su espina dorsal, podía sentir como su corazón iba a escapar de su pecho en cualquier instante.
Ella devolvió la mirada desafiantemente hacia Lappland, con su feroz expresión de furia, el lobo dentro de ella aulló, con rabia, con furor, con pena, con dolor... estaba insegura de cual estaba ganando en su interior.
"No vas a decir nada, ¿verdad? Se que siempre has sido de hablar poco, pero esto es completamente un nuevo nivel. Oh Texas, en serio te has vuelto una cobarde, ¿no?" esa palabra provocó que apretara fuertemente los dientes, conteniendo un gruñido que crecía dentro de su pecho.
Su mente pensó miserablemente en todos los eventos que las trajeron a este momento, Texas trató de detenerle, qué las cosas no tomaran este rumbo, y al final, fue por nada, y ahora vas a morir aquí, por la espada de Lappland.
La empuñadura circular estaba fuertemente sujetada en la mano de la otra operadora, la hoja apuntando hacia abajo pinchando la mejilla de Texas, no podía verlo, pero podía saborear el hilo de sangre que bajaba hasta su mejilla, una parte distante de ella sabía que Lappland no iba a marcar su cara, que ella solo estaba jugando, después de todo, es lo que ha estado haciendo desde que llegó.
Texas podía recordar ese día bien, justo como el día que se conocieron, todo era tan diferente en ese entonces, como si fuera otro mundo diferente.
(Pues,esta nota va aquí por si no fue leido en la descripcion,esta historia no es nuestra,solamente la estamos traduciendo al español, la autora original es pokemonshadowhunter a la cual estamos (mi amigo y yo) agradecidos de darnos la autorizacion, así que todo el apoyo que esta historia reciba debe ir para ella,¡muchas gracias y espero verlos pronto!)
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La historia no contada de Texas y Lappland
Romance(esta historia no es de nuestra propiedad, fue creada por Pokemonshadowhunter en base al mundo de Arknights, nosotros solamente las tradujimos al español, todo el crédito es para ella) "no importa cuanto corras, el pasado siempre te va a alcanzar". ...