-Hey!-
Aquel llamado estruendoso ahuyentó de golpe la neblina mental del rubio, haciéndole girar la cabeza hacia el lugar de donde provino la voz.
-¿Disculpa?- musitó con una expresión confusa y suave en su perfíl, el cual contaba con escasas marcas de expresión en tal piel perlada y suave.
-Te pregunté: "¿Cómo estuvo tu viaje?"- repitió, está vez de manera menos amable. Ya habían pasado varias horas desde que Estados Unidos quedó estafermo, dejando al mayor hablar sin paro.
-¿Eh?- aquella simple pregunta volvió a dejarle confundido -¿viaje a dónde?-
El hombre algo canoso (por la edad, aunque de un porte admirable) frente al ojiazul, tomó una bocanada de aire antes de soltarla en cierta pesadez -te ves cansado hijo mío. Si gustas, tu habitación se encuentra en la planta de arriba-
Estados Unidos entreabrió los labios apunto de hablar, arrepintiendose al instante para tan solo asentir lentamente mientras bajaba la mirada. No lograba entender como había llegado a aquel punto en dónde las formalidades entre ambos se volvieron innecesarias, mientras que sus rencores se disolvieron.
No le tomó más de cinco segundos antes de levantarse empujando la silla hacia atrás pasando a regresarla a una posición más correcta al costado de la mesa. Sus hábitos educativos le obligaron a levantar el mueble con delicadeza en el proceso, con el único fin de evitar el ruido del chirrido contra el suelo.
El americano fue guiado por sus propios pasos fuera del comedor, andando a lo largo de aquella gran, ostentosa y sobria construcción. Miraba a su alrededor con cierta preocupación mientras soltaba suspiros melancólicos, aquello era como un simple e inmenso deja vu que redireccionaba su pensamiento al pasado, un pasado que no reconocía como lejano o fuera de su interés. Después de todo, aquellas cuatro paredes le vieron crecer y reafirmarse como un ser de mero absolutismo, que adoró y enfrentó a su progenitor.
Entre tanta meditación involuntaria e igual que antes, no pudo explicar cómo llegó hasta donde se encontraba ahora. Su cuerpo reposaba en una nueva y suave superficie, la cual palpó con ambas manos aún negandose a investigar de que se trataba todo aquello.
Un quejido gutural escapó de sus labios mientras cerraba los ojos con pereza.
Estaba abrumado, casi como si no tuviese un pensamiento real. Sentía que no tenía control sobre sus acciones y a penas comprendía la situación de su entorno. Para el, nada tenía sentido, nada le resultaba normal, no sabía nada y a la vez comprendía todo. Por ello, también comprendía que tan solo quería dormir.
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Serendipia
FanficSerendipia (nombre femenino): descubrimiento o un hallazgo afortunado, valioso e inesperado que se produce de manera accidental, casual, o cuando se está buscando una cosa distinta.