A c c i d e n t e _ [BakuTodo-Kirikami] - [ P A U S A D A ]

C h a p e r • I

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♪♪Yo quiero un pelotero que tenga dinero
Me lleve de shopping por el mundo entero
Viajes, lujos, joyas, pero, pero....

¡¡Que me deje coja sino NEXT!!
♪♪~

•La música que sonaba de la radio del vehículo era suficiente como para que uno de los pasajeros menease la cabeza al ritmo mientras tarareaba la letra con el rostro sereno sin aparta la vista de la ventanilla y palmeando una de sus piernas al son de la canción.

_Coja, coja, coja, coja...- murmuraba empezando a hacer caras lascivas, no se dió cuenta cuando del asiento a su costado una mano salió propinandole un buen zape que le obligó a pegar su frente contra la ventanilla.

_¡¡CALLATE PEDAZO DE MIERDA!!- Le gritó un joven rubio cenizo con mal temperamento, y esque, momentos atrás había estado tan "tranquilo" en su habitación maldiciendo a su vieja que tenía por bruja, o madre si nos volvemos técnicos. El punto es, que de un momento a otro el rubio que se encontraba acariciando su cabeza y rostro, llegó como si fuese miembro del FBI junto al pelos de mierda y en un acto de complot junto a su madre le obligaron a entrar a aquel maldito vehículo donde se encontraba actualmente. Prácticamente estaba secuestrado.

_¡Oye! Si no querías un sugar daddy no es mi problema. Pero yo sí quiero que me dejen coja- bromeaba guiñando un ojo y llevando su dedo pulgar hasta su mentón.

_¡Que te den!- volvió a gritar. La canción fue cambiaba esta vez por el noticiero y de repente el cenizo deseó volver a escuchar el asqueroso intento de música de antes que esa mierda.

_Kacchan, cálmate un poco, se supone que las vacaciones de final de semestre serán divertidas- motivó un peliverde de ojos esmeraldas mientras jugaba con una de esas trampas chinas entre sus dedos, una vez estos quedaron prensados intento quitarlo, pero, no estaba siendo para nada fácil, ¡en qué lío se fue a meter!?. Con su lengua medio fuera para más concentración decidió ignorar los gritos de su amigo de la infancia y continuar con su trabajo.

_Y yo que se supone hago aquí?- indagó un somnoliento ojivioleta que recién despertaba después de 5 minutos de viaje- Ni siquiera soy de su salón- reprochó, pues los dos rubios se encontraban enfrascados en una pelea verbal, más bien el cenizo gritaba como histérica y el del rayo reía y parecía no importarle su vida.

_Ah, sobre eso. Nos pareció buena idea invitarte, después de todo eres amigo de Midoriya- Explico pacientemente y con una gran sonrisa puntiaguda aquel pelirrojo de carácter varonil.

_Eso y que Aisawa sensei nos obligó cof cof..~- murmuró nuevamente el rubio del rayo llamando la atención del de ojeras que gracias a su salud depresiva no le escuchó.

_Desearia que un camión nos arrollara- cuchicheo el conductor del vehículo, pensando que sus palabras no habían sido lo suficientemente fuertes. Se equivocó.

_Ah, quien lo diría, bastardo mitad-mitad- se burló con gesto de superioridad erizando la piel de la nuca del pobre medio albino, ¿acaso le escucharon su egoísta petición?- así que tu plan es llevarnos a una maldita cabaña para asesinarnos como el loco traumado que eres!?

_¡Kacchan! Que cruel eres. Todobro jamás nos haría eso... verdad?- retrocedió un poco colocando su mano en la perilla de la puerta del auto, cualquier movimiento estaba fríamente calculado.