Vida normal

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Luego de que Eliot fuera nuevamente inducido hacia las indicaciones de James, este volvió a comportarse igual que siempre, a James le pareció de lo más útil en su vida, digo posee una pareja que puede manejar a su antojo, una empresa funcional sin nada de complicaciones económicas y una secretaria que es devota a las peticiones que se le dan, sin embargo, querer más era algo ambicioso de su parte que no iba a ignorar. Eliot en la mayoría de las veces se las pasaba en "modo gato" ya que para James era más cómodo tenerlo de esa manera, solo en ocasiones de fiestas o convivencias forzosas sería el momento exacto para tenerle como "humano".

Y el saber cómo se tenía a Eliot dentro de ese espacio junto con James, no se sabe, de echo habla poco (por obvias razones) y en su cabeza esa información esta bloqueada, al grado que ni el mismo sabe como se siente, se rebajo su pensar a como sobrevivir, a lo que es sencillo ya que es un "gato de casa", sus necesidades fisiológicas se cumplen con facilidad y al ser un "animal" no se le puede pedir más.

Para James, los días fueron pasando de manera monótona, siempre llegaba del trabajo cansado y Eliot solo pasando el rato con él, sin nada más que hacer, ya que no le gustaba interactuar con más personas pensó que el tener a Eliot le daría cierta esencia nueva a su vida, lo cual sucedió, sin embargo, fue algo fugaz y para nada duradero, ¿seria buena idea agarrar a otra persona?, ¿tener una mascota nueva para que Eliot conviviera?, esas dudas fueron surgiendo con el pasar de las noches, pero siempre terminaba por quedarse dormido con Eliot en sus pies.

Siendo fin de mes, James llegó de nuevo a su casa, sin nada nuevo que reportar y menos con alguien; aun sabiendo que podría modificarlo, escucho demasiado ruido en su habitación lo cual era raro ya que Eliot ya había aprendido a ser más precavido con las cosas del hogar, igual aminorando la posibilidad de un ladrón ya que considerando a la persona que tenia dentro de su casa el sistema de seguridad fue mejorado para una privacidad de calidad. James camino dirigiéndose a su habitación encontrando a un Eliot con muchísimas sabanas regadas a su alrededor y este restregándose fuertemente con una pequeña elevación de sus glúteos hacia arriba que para James era una imagen demasiado provocativa.

Este gato llego a escuchar la llegada de su dueño a lo que este siguió dando una imagen con picardía, ya que está siguiendo con sus bajos instintos de reproducción, así es, llego ese aclamado celo que James le indujo, a lo que emocionado se fue deshaciendo de sus posesiones para completar esa compleja etapa que Eliot tenía; la acción de entrar en Eliot fue una de las experiencias que James nunca pensó que le iba a suceder, junto a los gemidos de este fueron música para sus oídos, a pesar de que solo "maullaba" James lo interpreto como una petición de más intensidad para su entrada. Ninguno de los dos supo cuanto tiempo estuvieron dentro de la cama con recurrentes encuentros, lo único que se tenia en cuenta que el celo de Eliot ya había pasado de la mejor manera, si no fuera por ser una persona masculina este tendría una excelente posibilidad de tener descendencia.

Después de ese día, James marco dentro de un calendario para tomar en cuenta los encuentros que tendría con él, para poder gozarlo de diferentes formas, además de agendar el día para tener a una nueva persona a quien controlar.

Pero... ¿ahora que tipo de persona seria? ¿hombre? O ¿mujer? ¿qué nuevas características tendría?, esas preguntas se fueron integrando en las noches que tenía James, que siempre eran calladas por el cansancio que le ganaba, se estaba haciendo cansado que esas preguntas se hicieran tan recurrentes al grado de provocarle insomnio y frustración en su vida diaria, siendo ese grado que Eliot empezó a ser más meloso con él para que este su entretuviera, para lo que James decidió tener por un tiempo a una pareja normal. Así que después del celo regreso a tener el comportamiento de un novio idóneo para James.

--Oye James—Dijo Eliot llegando detrás de él para abrazarlo por la espalda—te he sentido aún más malhumorado de lo normal, ¿Qué te tiene tan irritable?

--Nada—soltó un suspiro—es solo que me he encontrado con mucho trabajo, demasiadas ofertas para integrarme a otras empresas y tener más ganancias que eso quiero, pero ¿no crees que es muy ambicioso de mi parte? —menciono con un ligero puchero ocasionando

--Para nada—dio una pausa—no crees que sería un buen dinero para poder jubilarte sin el miedo de quedarte sin dinero.

—Tienes razón, creo que será lo mejor hacer el contrato hoy ¿no? –le regalo una bella sonrisa, que a la vez chasqueo los dedos para que regresará su bello gato—Bueno, ya que estuviste de acuerdo en hacer el "contrato", pues vamos a trabajar.

Esa misma noche, se dedico a hacer un cartel para contratar personal de limpieza, se decidió por otro hombre, ¿Por qué?, para que se hicieran las cosas lo suficientemente interesantes.

Hypnosis peligrosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora