𝑾𝒉𝒆𝒏 𝒚𝒐𝒖 𝒍𝒐𝒗𝒆 𝒔𝒐𝒎𝒆𝒐𝒏𝒆|| 𝑯𝒂𝒏 𝑱𝒊𝒔𝒖𝒏𝒈.

𝘗𝘳𝘪𝘮𝘦𝘳𝘢 𝘷𝘦𝘻 || 𝘏𝘸𝘢𝘯𝘨 𝘏𝘺𝘶𝘯𝘫𝘪𝘯.

Después de cinco meses desde la partida de Felix, mi alma seguía sintiéndose con un vacío, extrañaba esas tardes enteras jugando online, mientras hablábamos por chat, no era una vida de lo más genial, pero al menos era divertido el tiempo que compartía con él. Realmente me cuesta tanto aceptar que no está y me sigo cuestionando muchas cosas mientras estoy tendido en mi cama boca arriba mirando el techo de mi habitación. Es como si cada acto, cada palabra y todo del pasado pasaran frente a mí y las pensara una y otra vez... ¿En serio la vida tenia que ser así? Porque me cuesta entender el significado de los acontecimientos o de lo que nos sucede y probablemente viva con este sentimiento por mucho tiempo.

Mi madre ya me tiene cansado, siempre me reprocha las mismas cosas, una y otra vez... ¿Acaso no ve que estoy cansado del alma? Bueno, al parecer no. Es por eso que al menos debo intentar algo más, aunque sea por solo satisfacer una necesidad imperiosa de otra persona y no porque realmente la sienta, también es parte de la vida ¿no?

Buscar un trabajo no fue fácil, pero encontré uno en una tienda como vendedor, que fastidio, odiaba tener que relacionarme con personas desconocidas, aunque claro, mi falsa sonrisa exterior era una ayuda, pero no soportaba la rutina diaria de ser un "ejemplar vendedor". Quisiera no sentirme nostálgico a veces, pero era imposible, cuando veía dos amigos reír dentro la tienda o alguien similar a Felix, mi corazón se aceleraba y un nudo en la garganta me acechaba. Yo, yo no quiero seguir viviendo con esto en mí.

No me gustaba relacionarme con el resto de las personas que trabajaban en la tienda, eramos unos seis vendedor en el área de electrodomésticos, que era en el que estaba yo... ¿Ideal para aburrirse, no? Habían chicas y chicos, ellas intentaban hablarme, acercarse a mí, pero mi timidez impedía entablar una conversación más allá, aunque decían que era lindo, que salieramos, pero yo no quería, no me interesaba, además... ¿Para qué salir con este chico tan aburrido y tan poco atractivo? No vale la pena, ni nunca va a valer. Mi autoestima era prácticamente nula ahora que lo medito y lo pienso, porque sí, nunca recibí una invitación a una cita, ni nada, además ¿Qué podría darles un tipo tan vacío como yo? Nada y eso es peor que cualquier otra cosa.

— Entonces... ¿El nuevo no va a venir? — era lo que decía desde la distancia a todas las chicas uno de mis compañeros de trabajo peli rubio largo y alto.

¿En serio piensa que voy a salir con él estando cerca? Es que yo no estoy a su nivel, digo... Cuando lo ví por primera vez, pensé que era una chica, pero me equivoqué. Todas revolotean a su alrededor, prácticamente todo el día y él se comporta tan amable siempre, con una sonrisa tan carismática. Admito que es guapo y sobresaliente, pero una persona como yo, jamás podría ser cercano a alguien como él.

De verdad yo no quería, no quería aceptar salir con todos, es mil veces mejor quedarme en casa, en mi soledad que rodearme de personas que ni siquiera conozco bien, pero todos me convencieron de ir, de que no me arrepentiría, de que sería divertido para mí. A veces me pregunto cuál es ese interés constante en mí de las personas, no lo entiendo.

El lugar escogido fue un bar, jamás había estado en uno, pero no era un bar cualquiera, además tenía una pista de baile, al parecer mis compañeros de trabajo acostumbraban a ir ahí. Me sentía incómodo, el peli rubio me sonreía a cada rato y centraba su mirada penetradora en mí cada unos cinco minutos, la verdad ya quería irme, pero todos se veían tan entretenidos bebiendo, conversando y yendo a la pista de baile de vez en vez o cuando la música lo ameritaba.

No supe cómo, pero de pronto el peli rubio se sentó a mi lado después de estar en la pista de baile, su rostro estaba todo sudado, pero por muy increíble que fuera, seguía conservando su belleza induscutida y hasta le daba otro toque a su llamativa persona.