Hasta Que Te Enamore

Cap.0

Max

Durante mucho tiempo de mi vida conocí a muchas mujeres, mujeres las cuales incluso a algunas de ellas las llegué a compartir con mi mejor amigo Tul, pero ciertamente sólo fingí... No niego el hecho de haber experimentado con al menos 3 de ellas, también tengo necesidades, hasta que mi amigo se gradúo y al fin pude dejar de fingir, mi amigo se iba al extranjero por una excelente oferta de trabajo mientras yo me quedaba a terminar la universidad (soy 2 años menor que él). Lo cierto es... Soy gay, ¡Sorpresa!. Nadie se lo esperaría, mi apariencia es varonil, soy alto, fornido, de cabello negro largo y espeso, mirada aparentemente seria, sin mencionar que a las chicas les parezco sumamente "atractivo". Honestamente quien me parece atractivo es mi amigo... Tul, de mirada dulce, musculos pronunciados y piel ligeramente bronceada, voy a todas partes con él aunque siempre me hable de mujeres y cosas extrañas de la escuela. El es muy estricto y disciplinado, va al gimnasio con frecuencia, cuida de su piel y su cabello, así tambien su apariencia. ¿Se dará cuenta de lo guapo que es a mis ojos?

-Se un buen chico- dijo Tul al despedirse de mí -Volveré en cuanto pueda- prometió

-Esperaré tu llegada, hermnao- dije sonriendo -Cuida bien de tí-

Sonreímos y bromeamos durante alrededor de una hora, sentados ahí en la sala del aeropuerto hasta que su vuelo llegó y la despedida definitiva también. Fué nostálgico.

Al salir del aeropuerto, un lindo chico apareció en mi camino

-¡Ha!... Perdón- dijo después de chocar conmigo accidentalmente

-Ten cuidado- lo ví seriamente. Quizás mi seria mirada lo intimido, el chico de apariencia linda y razgos japoneses me vió tiernamente, no era muy pequeño, a penas alcanzaba quizás unos 1.78 m de altura, lo cuál su mirada daba casi justo hacía la mía de 1.83 m. ¿A ésto se le puede llamar amor a primera vista?

-Lo siento- volvió a disculparse. Sonreí

-¿Solo sabes decir eso?- pregunté mientras sonreía, parecía agradable

-No... Se hablar perfectamente su idioma- respondió -Mi nombre es Yu- se alejo un paso de mí y me extendió la mano

-Mi nombre es Max- extendi mi mano hacia la suya en un buen apretón de manos. Ambos sonreímos, quizás sea mi inexperiencia, pero estoy realmente nervioso de ver a éste chico sonreír

El tiempo pasó y pronto se hizo un mes desde la partida de Tul al extranjero, la última vez que nos comunicamos dijo estar muy ocupado, así que decidí no molestarlo más, hasta que el tuviera tiempo para mí, aún así seguramente esté conociendo a nuevas conquistas. Hablando de ello...

-¿Hola?- respondí en cuanto sentí mi teléfono vibrar

-Hola Max- respondió ésa voz al teléfono -Soy Yu-

Yu y yo nos convertimos en buenos amigos, en efecto averigüe que es japonés y reside en el país debido al trabajo de sus padres.

Los meses pasaron y Yu se convirtió en algo así como el reemplazo de Tul, al menos ésta vez podía ser quien realmente era, Yu también era gay. De alguna extraña manera el se enamoró de mí... y yo de él, así después de un año de conocernos, nos dimos la oportunidad de amarnos, Yu era muy guapo y muy atento conmigo y yo correspondi a él, citas romanticas, besos, abrazos y sexo nunca faltó entre nosotros. Mi gran amor, mi confidente, a quien confié mi corazón con tanto temor y supo cuidar muy bien de él, jamás creí encontrar a alguien de ésta manera, justo cuando se fué mi primer amor, Tul, llegó Yu para darme una oportunidad para amar, para entregarme y dedicarme a la persona que amo. Para ser la persona que realmente soy.

-Feliz aniversario- dije a mi chico, extendiéndole una pequeña cajita

-¡Lo recordaste!- me sonrió de vuelta, su rostro se veía tan feliz, sus ojos razgados lucían tan bien al sonreír